Charles Leclerc es intocable
Pese a la inconsistencia del monegasco, que saldr¨¢ segundo en Austria, Ferrari no se cuestiona su continuidad
Charles Leclerc es el pack completo. Su evidente habilidad como piloto se combina con un car¨¢cter apacible y una imagen que mezcla pureza y sensibilidad, con el pellizco de mala leche imprescindible para afincarse en la parrilla del Mundial de F¨®rmula 1, por la que muchos pasan sin pena ni gloria, casi tan veloces como lo son los coches que conducen. A pesar de todos esos atributos, a nadie se le escapa que el monegasco atraviesa un periodo complicado a nivel profesional, una etapa que arrastra desde el pasado ejercicio.
Ferrari cuadr¨® entonces su mejor monoplaza en m¨¢s de una d¨¦cada, el prototipo m¨¢s r¨¢pido a principios de curso, pero no lo suficiente como para contrarrestar las pifias a nivel de estrategia que se sucedieron en los momentos clave de la temporada. Esa falta de pegada dio alas a Red Bull y a Max Verstappen, que termin¨® arrasando. Con tres triunfos, Leclerc, quien deb¨ªa liderar la Scuderia, no fue capaz de aguantar el tir¨®n del neerland¨¦s, circunstancia que anticip¨® una nueva revoluci¨®n en la estructura de Maranello, que explica el desgobierno en el que anda metida. Los ejecutivos de Il Cavallino se cargaron a Mattia Binotto, el director y quien, por su perfil t¨¦cnico, fue clave en el concepto del F1-75 que en 2022 acumul¨® cuatro victorias; una de Sainz (Reino Unido) y tres de Leclerc (Bahrein, Australia y Austria).
Este fin de semana, el paddock se instala en el Red Bull Ring, precisamente donde Leclerc se subi¨® al escal¨®n m¨¢s alto del podio por ¨²ltima vez. All¨ª, el de Ferrari perfor¨® la aparentemente impenetrable armadura de Verstappen, a quien adelant¨® hasta tres veces en carrera, siempre en pista. El paseo del equipo italiano por Spielberg todav¨ªa habr¨ªa sido m¨¢s pl¨¢cido si el motor del coche de Sainz no se hubiera puesto a arder superadas las tres cuartas partes de la prueba. Esta vez, el panorama se presenta muy distinto para la marca de los b¨®lidos rojos y tambi¨¦n para Leclerc, al menos si atendemos a sus n¨²meros, por m¨¢s que eso no parece argumento suficiente como para que Ferrari le ponga en duda.
A las puertas de la novena parada del calendario, Sainz ocupa la quinta plaza de la tabla general, con 68 puntos, 14 puntos m¨¢s que su compa?ero, que figura en la s¨¦ptima posici¨®n a pesar de ser el ¨²nico de los dos que se ha subido al caj¨®n (fue tercero en Bak¨²). En las tres primeras carreras (Bahrein, Arabia Saud¨ª y Australia) solo fue capaz de sumar seis puntos tras abandonar por una aver¨ªa en el estreno y sufrir una salida de pista en Melbourne que le dej¨® clavado en la graba. Los dos accidentes consecutivos en Miami todav¨ªa agravaron una crisis que todav¨ªa gan¨® m¨¢s voz en M¨®naco, por un malentendido con su equipo que le llev¨® a ser penalizado por entorpecer a Lando Norris. El fin de semana siguiente, en Montmel¨®, el desconcierto lleg¨® a su l¨ªmite despu¨¦s de que Leclerc no fuera capaz de explicar c¨®mo pudo quedar eliminado en la primera criba de la cronometrada (Q1). A pesar de todo lo anterior, Leclerc reconoce desde Austria que ya ha comenzado a dialogar con Ferrari sobre la prolongaci¨®n de su contrato, que expira a finales de 2024.
Demasiado err¨¢tico
¡°Poco a poco estamos empezando a hablar de ello, medio en broma, medio en serio¡±, desliz¨® el campe¨®n de la GP3 de 2016, y de la F¨®rmula 2 en 2017, que debut¨® en el Mundial en 2018, con Sauber, antes de dar un triple salto mortal, a Ferrari, en 2019. Si en los despachos de la escuder¨ªa italiana se muestran ansiosos por cerrar la continuidad del actual subcampe¨®n del mundo, esa prisa no parece la misma que rige con el otro lado del taller, donde Sainz se ha marcado hasta fin de a?o para firmar su nuevo acuerdo, con vistas a 2025.
En su sexto a?o en la F1, y con el pedigr¨ª que se le presupone, Leclerc se ha mostrado demasiado err¨¢tico, algo que no escapa al escrutinio de quienes pueden hablar sin compromiso. Seg¨²n sus propias palabras, esos errores deben interpretarse como algo ¡°normal¡±, dado que en esta solo est¨¢ ¡°concentrado en encontrar los l¨ªmites¡±. Para Jenson Button, excampe¨®n del mundo (2009) reciclado a comentarista, ese es el quid de la cuesti¨®n. ¡°Es tan r¨¢pido como los dem¨¢s, y puede que incluso el m¨¢s r¨¢pido de todos en t¨¦rminos de ritmo puro. Su problema es que no reconoce d¨®nde est¨¢ el l¨ªmite¡±, opina el brit¨¢nico.
Este domingo (15.00, Dazn), Leclerc tiene una oportunidad de oro para reivindicarse, dado que arrancar¨¢ el segundo, desde la primera fila, al lado de Verstappen, que se adjudic¨® su sexta pole del curso y la 26? de su hoja de servicios, una cifra que le iguala a Mika Hakkinen, bicampe¨®n como ¨¦l. Sainz saldr¨¢ el tercero y Fernando Alonso, el s¨¦ptimo.
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