La presi¨®n del Athletic desmonta al Rayo
Dos goles de I?aki Williams, otro de Nico y uno m¨¢s de Guruzeta, evidencian la superioridad rojiblanca
Ha goleado el Athletic al Rayo Vallecano, sin conservantes ni colorantes, sin paliativos. En la fiesta de los hermanos Williams, no apareci¨® el equipo madrile?o, demasiado apocado, sin encontrar nunca a Isi o a Unai L¨®pez, pacato e ingenuo en la salida de bal¨®n, que los rojiblancos les robaron para desmontar su plan de juego. El conjunto de Valverde se afianza en la zona noble de la tabla despu¨¦s de su triunfo.
Cuanta menos presi¨®n tiene, m¨¢s presiona el Athletic. Y le va bien. La presi¨®n adelantada es la religi¨®n que profesan todos los jugadores del equipo de Valverde. Para vestir de rojiblanco no se puede ser agn¨®stico ni ateo. No todos rezan el padrenuestro del vestuario antes del partido, pero s¨ª se saben los mandamientos que Valverde ha instaurado, que se resumen en uno: presiona arriba en el minuto 80 como si fuera el primero. Claro que ese juego tiene sus riesgos, y no siempre sale bien, porque hay equipos que saben salir de esa presi¨®n, y cuando lo hacen se encuentran muchos metros por delante para correr y disfrutar, que en el f¨²tbol profesional tambi¨¦n se disfruta a veces. Pero el Rayo Vallecano que se present¨® en San Mam¨¦s no fue uno de esos equipos. Aguant¨® 22 minutos, en los que ya hab¨ªa soportado la presi¨®n bilba¨ªna con varias p¨¦rdidas, e incluso recibido un gol anulado a Guruzeta por fuera de juego muy justito de I?aki Williams. Pero hasta ah¨ª.
Quer¨ªa salir con el bal¨®n jugado el Rayo y fue I?aki a la presi¨®n, se asust¨® Balliu, rob¨® la pelota Sancet, que se la puso a Guruzeta, ducho para ajustar al palo y batir a Dimitriesvsky. Abierta la lata, con el ascua arrimada a su sardina, y reforzado en su idea de la presi¨®n, sigui¨® el Athletic cada vez m¨¢s convencido de las cualidades de su manera de jugar. Y sigui¨® en lo mismo, hasta que nada m¨¢s comenzar la segunda parte, otra vez rob¨® Sancet la pelota muy cerca del ¨¢rea rayista, prolong¨® a la carrera de I?aki Williams, que dispar¨®, o centr¨®, qui¨¦n sabe qu¨¦, aunque tampoco lo sab¨ªa Pacha Espino, que meti¨® la pierna para despistar a su guardameta y ampliar la desventaja del Rayo, que si ten¨ªa otro plan para el segundo tiempo, vio c¨®mo se le desbarataba en un santiam¨¦n.
Comenzaba la fiesta de los hermanos Williams, que festejan la renovaci¨®n de Nico en la v¨ªspera y, adem¨¢s, de la mejor manera posible. Ya no era tan necesaria la presi¨®n frente a un rival que parec¨ªa resignado, pero nadie dej¨® de correr en el Athletic, sobre todo los delanteros. Sancet le pon¨ªa la pausa cuando hac¨ªa falta, y marcaba el ritmo, como en la acci¨®n en la que busc¨® a Guruzeta que llegaba por la izquierda sin nadie que le siguiera. El delantero centro rojiblanco jug¨® de extremo, observ¨® la llegada de I?aki por el otro lado, y su pase horizontal encontr¨® la respuesta adecuada en su compa?ero. M¨¢s fiesta todav¨ªa en casa de I?aki y Nico.
Pero todav¨ªa quedaba la guinda, que la puso el peque?o, cuando recibi¨® de Lekue, dio dos pasos en el ¨¢rea y remat¨® con rosca al palo contrario en el que nada pod¨ªa hacer Dimitrievski. Ah¨ª se acab¨® el partido, con permiso del Athletic, y hasta la numerosa afici¨®n del Rayo se conform¨®. La goleada reafirma a Valverde en la idea que ha convertido a su equipo en un grupo fiable y s¨®lido y adem¨¢s, asentado en la zona alta de la clasificaci¨®n.
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