La defensa del Real Madrid, m¨¢s de tres meses en el desfiladero

El d¨ªa que se abri¨® el mercado de invierno, el pasado 2 de enero, Carlo Ancelotti comunic¨® que el Madrid no fichar¨ªa ning¨²n central. Se hab¨ªa quedado solo con dos (R¨¹diger y Nacho) tras la rotura de cruzado de Alaba (misma lesi¨®n que Milit?o), pero la decisi¨®n se anunci¨® inamovible. Y la casualidad quiso que el pasado jueves, mientras la ventana de contrataciones agotaba sus ¨²ltimos minutos, el equipo acabara la noche en Getafe tiritando en defensa, expuesto por las contingencias a la escasez de piezas en esa zona del campo, en la previa de un duelo clave ante el Atl¨¦tico en Liga.

A las 21.40 del jueves, dos horas antes de que terminara el plazo de adquisiciones (23.59), los blancos vieron en el Coliseum c¨®mo R¨¹diger ca¨ªa lesionado por un fuerte golpe con hematoma en el muslo izquierdo. Y cerca de las 23.00, en el descuento de un partido ya finiquitado (0-2), el primer recambio para el eje de la zaga, Tchouameni, carg¨® con una amarilla que le ape¨® del derbi. La tormenta (fatal) perfecta antes de afrontar una cita peliaguda contra el ¨²nico equipo que le ha derrotado (dos veces), y con la amenaza de Griezmann y Morata (37 goles entre ambos).

Este s¨¢bado por la ma?ana, se descorri¨® la cortinilla de Valdebebas y sobre el c¨¦sped no se encontraba R¨¹diger, tratando de acelerar en el gimnasio una recuperaci¨®n expr¨¦s. No participar en el entrenamiento previo a un encuentro junto al grupo descarta casi por completo a un jugador, pero esta vez la situaci¨®n es excepcional. Ancelotti, que el jueves apel¨® al car¨¢cter ¡°guerrero¡± del alem¨¢n, no le cerr¨® la puerta a la titularidad. ¡°Ha mejorado mucho. Ma?ana [por hoy] evaluaremos¡±, apunt¨®.

Si no llega, el italiano se abocar¨ªa a remiendos de resultados imprevisibles para acompa?ar a Nacho, el ¨²nico central completamente sano. Este s¨¢bado cit¨® las tres alternativas: Carvajal (mide 1,73), al que solo se le recuerda ah¨ª en la pr¨®rroga de los cuartos de Champions frente al Chelsea en 2022 en uno de los momentos milagreros del Madrid en Europa; Mendy, que desempe?¨® esa funci¨®n alguna vez con Zidane aunque en una formaci¨®n de tres centrales; y Camavinga, sumado a ¨²ltima hora a la ecuaci¨®n. ¡°Nunca lo ha hecho, pero saca el bal¨®n muy r¨¢pido y es contundente en los duelos¡±, defendi¨® el t¨¦cnico.

Carvajal, Camavinga y Mendy, remiendos si el alem¨¢n no se recupera y se da, seg¨²n Ancelotti, la ¡°emergencia absoluta¡±

Fuera de Nacho y R¨¹diger, ninguna opci¨®n ofrece apenas pasado en esa posici¨®n y en la cantera nadie llama tanto la atenci¨®n. El primer recurso de emergencia era Tchouameni, que en realidad disput¨® su primer partido como central en octubre contra Osasuna, en otra situaci¨®n de necesidad. Es ahora lo m¨¢s cercano a algo testado, pero Competici¨®n no le levant¨® la sanci¨®n. ¡°El trabajo de central y pivote es el m¨¢s sencillo. Hay que usar m¨¢s la cabeza que la energ¨ªa¡±, argument¨® Carletto en un intento de restar dramatismo al socav¨®n.

El cuadro m¨¦dico y la carest¨ªa de elementos en una zona tan sensible devuelven al primer plano la arriesgada medida del club de no reforzarse cuando a¨²n le quedaba un mes entero para hacerlo. David Alaba se rompi¨® el cruzado el 17 de diciembre y, aunque Ancelotti no descart¨® en un primer momento un fichaje, no tard¨® en cerrar esa posibilidad despu¨¦s de las conversaciones con el club. En las oficinas rechazaron desde el principio un gran desembolso y pronto se resolvi¨® que no saldr¨ªan al mercado para nada.

Cuando este se abri¨®, el Madrid ya hab¨ªa dicho que no entrar¨ªa. La conclusi¨®n de la entidad aboc¨® al vestuario a un escenario de precariedad y sin margen para dos imprevistos seguidos en un calendario tan abrasivo. Quedaban, en el mejor de los casos, tres meses para disponer de Milit?o, que seg¨²n Ancelotti ¡°empieza a estar muy bien¡±. Entre la Supercopa, la Copa, la Liga y la Champions, el Madrid se encuentra en medio de un desfiladero de una veintena de partidos que encara con solo dos centrales puros.

Carletto, como ya hiciera con la medida de no traer a un delantero de talla mundial tras la salida de Benzema, asumi¨® la decisi¨®n y en su momento declin¨® manifestar en p¨²blico su opini¨®n sobre la necesidad de fichar. ¡°Tras la lesi¨®n de Alaba, pensamos que Tchouameni podr¨ªa reemplazar en la emergencia, y lo ha hecho bien. Ahora es una emergencia absoluta, y solo por un partido, si R¨¹diger no juega. Tuvimos en cuenta que no era para toda la temporada porque Milit?o volver¨¢ a finales de marzo o principios de abril¡±, explic¨® el italiano.

La lesi¨®n del brasile?o el 12 de agosto ya dej¨® la plantilla con tres centrales, lo que supon¨ªa un riesgo. Para la jornada nueve, Ancelotti tuvo que tirar de Tchouameni, un novato que no ha ocultado que no le gusta esa funci¨®n. Y cuando cay¨® Alaba y a la vista de que no vendr¨ªa nadie, el italiano inici¨® sus habituales maniobras de seducci¨®n. ¡°Se enfadar¨¢, pero es un central espectacular¡±, asegur¨®.

Mientras, apenas ha habido tregua para el mejor R¨¹diger (30 a?os), el jugador blanco con m¨¢s minutos (2.594). Desde que sustituy¨® a Milit?o, solo se ha perdido dos encuentros (Valencia por tarjetas y Arandina en Copa), y fue suplente en el intrascendente cierre de la liguilla de Champions en Berl¨ªn. Tampoco le ha dado respiro Alemania. Ancelotti aguarda su evoluci¨®n para no afrontar la ¡°emergencia absoluta¡±.

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