El Girona de M¨ªchel, lejos del Madrid pero aferrado a Europa

En el Girona reinaba la prudencia antes del partido contra el Real Madrid. No hab¨ªa manera de romper p¨²blicamente el guion en ninguno de los estamentos del club. Del vestuario al cuerpo t¨¦cnico, pasando por los despachos, en la entidad rojiblanca solo se hablaba de Europa. No se mencionaba la Champions League ¨Cpodr¨¢ convivir con el Manchester City en la competici¨®n europea siempre que demuestre que nadie del City Group toma deciciones en el club catal¨¢n y que no haya intercambios comerciales ni de jugadores¨C, mucho menos la posibilidad de levantar la Liga. Sin embargo, en el camerino del Girona el sue?o del t¨ªtulo crec¨ªa jornada tras jornada, siempre cerca de lo m¨¢s alto de la tabla. Hasta que visitaron el Santiago Bernab¨¦u. A la capital lleg¨® con dos puntos menos que el equipo de Ancelotti y se fue con cinco menos. De nuevo, el Real Madrid desnud¨® la quimera rojiblanca.

¡°Si en alg¨²n momento se nos hab¨ªa pasado por la cabeza la ilusi¨®n de ganar la Liga, el Madrid nos la quit¨®¡±, explica unos de los futbolistas del Girona tras la paliza en Chamart¨ªn (4-0). Estaban avisados, en Montilivi ya hab¨ªan sucumbido frente a Vinicius, Bellingham y compa?¨ªa (0-3) en la primera vuelta. Un global de 0-7 frente a los muchachos de Carlo Ancelotti. No hubo mejor (peor) ba?o de realidad. ¡°Nuestra liga no es esta¡±, reconoci¨® M¨ªchel.

Lo peor para el Girona no fue solamente que el Real Madrid advirtiera de que no ten¨ªa cach¨¦ para conquistar Chamart¨ªn, sino que tambi¨¦n le borrara sus se?as de identidad. Los rojiblancos se caracterizan por controlar los partidos con la pelota ¨C¡±es muy complicado quitarnos el bal¨®n¡±, aseguraba David L¨®pez a este peri¨®dico¨C. En el Bernab¨¦u, el cuero durmi¨® en los pies de los blancos: 53,2% de posesi¨®n. El Girona, sin embargo, que suma los mismos goles que el Madrid en la Liga (52), se march¨® de Chamart¨ªn sin disparar a puerta. Ninguno de los cinco remates del visitante necesit¨® la intervenci¨®n de Lunin. En Montilivi, al menos, Kepa cont¨® tres paradas. La estad¨ªstica m¨¢s dolorosa para M¨ªchel estuvo en su defensa. El Girona ha recibido 29 goles en la Liga, siete se los estamp¨® el Madrid: el 24%.

De hecho, la charla de M¨ªchel con sus jugadores en el vestuario fue pr¨¢cticamente calcada a la que minutos m¨¢s tarde realiz¨® en la sala de prensa del Bernab¨¦u. ¡°Nos dijo que era culpa suya, que nos hab¨ªa expuesto demasiado. Y que el Madrid es lo que es y sus jugadores valen lo que valen¡±, cuenta uno de los jugadores rojiblancos. ¡°Intentamos jugarle de t¨² a t¨² y cuando ellos est¨¢n al m¨¢ximo rendimiento nosotros no llegamos. Creo que fue m¨¢s m¨¦rito del Madrid que dem¨¦rito nuestro. Mis jugadores dieron lo m¨¢ximo, pero en los duelos ellos fueron muy superiores a nosotros¡±, explic¨® p¨²blicamente el entrenador del Girona, que, tras el duelo en Chamart¨ªn, para ahuyentar el des¨¢nimo, les dio dos d¨ªas libres a sus jugadores.

Las l¨¢grimas de Yan Couto en el Bernab¨¦u encarnaron la frustraci¨®n del Girona. ¡°Sus compa?eros se volcaron con ¨¦l¡±, cuenta uno de los presentes en el vestuario del equipo en Chamart¨ªn. Hasta Vinicius se apiad¨® de su compatriota y consol¨®, junto a Rodrygo, al lateral rojiblanco. Los 21 a?os de Couto simbolizaron la falta de experiencia en un duelo de m¨¢xima tensi¨®n de un equipo que se hab¨ªa quedado sin sus estandartes en la zaga: Blind (lleg¨® a la quinta amarilla ante la Real Sociedad) y David L¨®pez (lesionado).

El liderazgo del Girona, en cualquier caso, se resume en M¨ªchel. Y el t¨¦cnico tambi¨¦n vio el partido lejos del campo en el Santiago Bernab¨¦u. Suspendido, el carism¨¢tico entrenador, que representa mucho m¨¢s que la pizarra, tuvo que ver el encuentro en un palco. El Girona comienza a olvidarse del t¨ªtulo de Liga, pero quiere mantener viva la lucha por los puestos de Champions. ¡°Nuestra Liga es Athletic, Real Sociedad, Betis, Valencia... no podemos estar en la del Madrid, Bar?a y Atl¨¦tico. Ellos son tres transatl¨¢nticos¡±, record¨® el preparador madrile?o.

Es justamente el mensaje en el que insisti¨® M¨ªchel en el vestuario. ¡°No nos podemos caer¡±, subray¨®. La prueba del algod¨®n ser¨¢ el lunes 19 contra el Athletic en San Mam¨¦s. Eso s¨ª, que nadie hable de Champions. Sin la ilusi¨®n del t¨ªtulo, el discurso se aferra a Europa.

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