Zubeldia: ¡°Quiero jugar contra Mbapp¨¦ para probarme a m¨ª mismo¡±
El central de Azkoitia reflexiona sobre su oficio antes de emparejarse este mi¨¦rcoles al astro franc¨¦s en el PSG - Real Sociedad de octavos de la Champions
Hombre contra Superhombre. Igor Zubeldia (Azkoitia, 1997) contra Kylian Mbapp¨¦ (Par¨ªs, 1998). El duelo singular sobre el que gravitar¨¢ buena parte de la eliminatoria PSG - Real Sociedad de octavos de final de la Champions comenzar¨¢ a dirimirse este mi¨¦rcoles (21:00 horas, Movistar) en el Parque de los Pr¨ªncipes. Un acontecimiento que el defensor vasco asume con m¨¢s curiosidad que nervios, seguro de que Par¨ªs consagra el mejor momento de su vida profesional.
Pregunta. ?Qu¨¦ significa jugar contra el PSG?
Respuesta. Para alguien como yo, que ha salido de la cantera, jugar contra el gran PSG en Par¨ªs, y m¨¢s en Champions, es un reto.
P. ?No cree que estos partidos tienen algo de moneda al aire y que las primeras jugadas marcan todo?
R. Antes pensaba eso: ¡°Mi partido depender¨¢ de c¨®mo sea mi primera acci¨®n; si gano me dar¨¢ confianza, si fallo jugar¨¦ mal¡±. Con los a?os he aprendido que esa primera jugada no te marca. Si tu primera acci¨®n no te sale bien olv¨ªdalo y a la siguiente vuelve all¨ª y sigue conectado al partido. Antes ten¨ªa ese d¨¦ficit.
P. ?Piensa en el partido como en una sucesi¨®n de duelos con Mbapp¨¦?
R. No har¨¦ nada diferente. No cambiar¨¦. Ser¨¢ un partido m¨¢s, sabiendo que enfrente tendr¨¦ a uno de los mejores o al mejor del mundo. Con respeto, sabemos que les podemos hacer mucho da?o a ellos tambi¨¦n.
P. D¨ªas, Araujo, Kim-min Jae, R¨¹diger, Lucas Hern¨¢ndez¡ ?Hoy los grandes equipos de Europa prefieren centrales de reacci¨®n r¨¢pida m¨¢s que de pies finos?
R. Son jugadores de contacto. El defensor tiene que defender, y luego, si puede, ayudar en ataque. Hoy en d¨ªa nos piden las dos cosas. Las jugadas empiezan atr¨¢s, ?no? Hoy los porteros no pueden pegar pelotazos y olvidarse. Los defensores tambi¨¦n ganamos partidos.
P. ?Se defiende m¨¢s con el f¨ªsico o con la cabeza?
R. Como en la vida, la cabeza es el motor de todo. Con cabeza tienes confianza, seguridad, tranquilidad, saber estar en el campo. Si no tienes la cabeza en su sitio puedes hacer alg¨²n buen partido, pero no llegar¨¢s lejos.
P. La Real se caracteriza por defender lejos de su porter¨ªa. Los centrales ah¨ª no tienen margen de error. Un tropiezo y su portero est¨¢ solo. ?Le resulta estresante?
R. Para m¨ª no y para mis compa?eros tampoco. Nuestro estilo es apretar arriba con los centrales a mitad de campo, sabiendo que a la espalda tenemos 60 metros. Partimos de la confianza en poder ganar las disputas: desde el delantero hasta el ¨²ltimo hombre. Confiamos al 100%, pero tiene un punto de riesgo porque si no ganas tu duelo con el delantero rival muchas veces eres el ¨²ltimo hombre.
Siempre hay riesgos en el f¨²tbol. A la hora de jugar con el bal¨®n y a la hora de defender. En la vida es lo mismo: si no arriesgas, ?d¨®nde est¨¢n tus l¨ªmites?
P. Sois como los alpinistas colgados de la pared.
R. Siempre hay riesgos en el f¨²tbol. A la hora de jugar con el bal¨®n y a la hora de defender. En la vida es lo mismo: si no arriesgas, ?d¨®nde est¨¢n tus l¨ªmites? Es el estilo de Imanol. Los jugadores tenemos muy interiorizado lo que ¨¦l quiere desde hace cinco o seis a?os; y as¨ª lo transmitimos. Estamos encantados de asumir esos riesgos. A veces salimos pasando el bal¨®n dentro de nuestra ¨¢rea y si haces un pase malo te pueden hacer gol. Cuando el portero nos da la pelota te salta el rival y tienes que saber c¨®mo aprietan y d¨®nde est¨¢ tu hombre libre para evitar pases malos. Tienes que estar muy vivo, y si te dejan salir tienes que conducir para fijar al rival. No jugamos as¨ª para hacerlo m¨¢s bonito. Lo hacemos para hacer da?o al rival llegando lo m¨¢s r¨¢pidamente posible a su porter¨ªa.
P. ?No deber¨ªan hacer una excepci¨®n con el PSG, probablemente el equipo de Europa con atacantes m¨¢s veloces, y no ir a presionarlos tan arriba?
R. Presionar arriba nos ha llevado a estar donde estamos. Lo que funciona no hay que cambiarlo. Da igual qui¨¦n est¨¦ enfrente. Siempre depender¨¢ de nosotros. Hay que seguir apretando.
P. Ellos tampoco saben jugar de otra manera: van arriba, con ritmo de circulaci¨®n, presionan, intentan ser verticales¡
R. Nos gustan los rivales que juegan como nosotros. Se nos dan mejor porque nos sentimos muy fuertes apretando arriba: Benfica, Inter, Leipzig¡ intentaron jugar la pelota y les hicimos muchos goles que vinieron de apretarlos. Luego el Mallorca en la Copa nos puso las cosas muy dif¨ªciles esper¨¢ndonos. A veces el intercambio de golpes te ayuda a estar concentrado.
P. ?No ser¨ªa m¨¢s f¨¢cil defender metido en su ¨¢rea?
R. A veces piensas que lo m¨¢s seguro es defender en bloque bajo. Pero se nos da peor que apretando arriba. Otros se repliegan y se sienten m¨¢s c¨®modos. Para nosotros es mejor tirar la l¨ªnea a mitad de campo, defender adelantando nuestra posici¨®n y atacando el bal¨®n todos juntos antes de que le llegue al rival. Haciendo eso le podemos hacer da?o a cualquiera. Esa es nuestra gran identidad: dejar a los rivales sin tiempo ni espacio.
P. Si la mente es tan importante para defender, y la concentraci¨®n es vital para jugar en campo rival, ?en qu¨¦ parte del juego debe fijar m¨¢s su atenci¨®n cuando tiran la l¨ªnea tan arriba? ?En marcar a su hombre o en vigilar al que le puede pasar la pelota?
R. Nunca le debes dar la espalda al bal¨®n, pero si miras demasiado al bal¨®n el rival te puede coger la espalda. Si te atacan y ves que no llegas tienes que recular. Si rebasan a Zubimendi muchas veces nos toca correr. Por eso el m¨ªster nos pide que el rival no pase: si se puede parar el juego, se corta. Lo m¨¢s duro para nosotros es correr hacia atr¨¢s. Pero sabemos que los cuatro defensas somos r¨¢pidos y eso nos da confianza: si nos pillan con un pase a la espalda confiamos en que podemos llegar.
P. ?C¨®mo entrena la anticipaci¨®n?
R. Lo primero es estar 100% conectado al partido. No te tienes que ir ni un segundo porque te pasan. Y luego confiar en uno mismo: ¡°Voy a hacer esto, lo puedo hacer, aunque mida 1,81 y sea m¨¢s bajo que el atacante siento que soy ganador por arriba y por abajo¡±. Si piensas que en una situaci¨®n no tienes nada que hacer est¨¢s vendido antes de luchar.
Yo me siento ganador. Si sales al campo y piensas: ¡°A m¨ª no me va a ganar nadie¡¡±. Yo pienso que ganar¨¦ cualquier disputa
P. ?Alguacil les inyecta esa convicci¨®n?
R. Es un motivador nato. Tiene el don. Pero los duelos dependen de cada uno. ?l te puede decir: ¡°Haz esto¡±. Pero si el jugador no est¨¢ mentalmente preparado da igual. Es el jugador el que tiene que dar el paso: ¡°Estoy en el verde y a m¨ª no me van a rebasar¡±. Con los a?os aprendes a ser m¨¢s competitivo. Yo me siento ganador. Si sales al campo y piensas: ¡°A m¨ª no me va a ganar nadie¡¡±. Yo pienso que ganar¨¦ cualquier disputa. Luego igual el rival te gana, pero nunca despu¨¦s de que t¨² hagas lo que tienes que hacer. Si sales con miedo, o con dudas, o piensas que vas a sufrir¡ Sufrir siempre vas a sufrir.
P. ?Usted se prepara psicol¨®gicamente antes de cada partido?
R. Tengo mis man¨ªas, mis rutinas. Mi visualizaci¨®n. Imagino c¨®mo puede ir, lo que puede pasar, como si tuviera un examen: parte por parte. En ataque, pum, pum, pum. En defensa, pum, pum, pum. Lleva cinco minutos. Imaginas que est¨¢s en el campo y eso te conecta al juego. Me ayuda. Si repaso lo que tengo que hacer salgo tranquilo. Pienso que tengo un examen y me lo s¨¦ todo.
P. ?Recuerda la primera vez que vio a Mbapp¨¦?
R. No. Y ahora tampoco le veo mucho. En general no veo mucho f¨²tbol. A m¨ª lo que me gusta es jugar, y cuando no hago mi trabajo desconecto. Me ayuda estar con los amigos, pasear con el perro, en la naturaleza, estar con mi familia, lo b¨¢sico. El club te manda v¨ªdeos individuales para que sepas si tal o cual delantero es zurdo o diestro, y los movimientos que hace. No puedes interiorizar todo. Pero hay detalles que te sirven: si es un delantero de ruptura, si es m¨¢s de bajar, si es de chocar...
P. Mbapp¨¦ es el jugador m¨¢s r¨¢pido del mundo ?C¨®mo hacer para que no pueda desarrollar velocidad?
R. Nunca he jugado contra ¨¦l y estoy con ganas para probarme a m¨ª mismo. Su desmarque corto es bestial. En pocos metros alcanza su velocidad punta. Igual le tienes que dejar m¨¢s distancia, no estar a la misma altura, o no ir tan a mitad de campo sabiendo que, si va a tu espalda, hagas lo que hagas no le pillar¨¢s. Tambi¨¦n puedes parar el juego. O replegar antes de lo normal cuando su compa?ero tiene opciones de golpear el bal¨®n para meterle el pase. Cuando te enfrentas a atacantes de desmarque, m¨¢s importante que el asistente es el estilo del equipo rival, si su juego es directo, si se asocian m¨¢s, si prefieren combinar. De eso depende d¨®nde pones tu l¨ªnea: si sabes que van a golpear no tiras la l¨ªnea a mitad de campo y regulas m¨¢s. Si combinan nos sentimos fuertes apretando arriba.
P. La velocidad de reacci¨®n de los centrales es la vida o la muerte de los equipos que defienden arriba. ?Qu¨¦ piensa cuando se queda mano a mano con el delantero y va al corte?
R. No tienes tiempo de pensar. Conf¨ªas en lo que sientes. Si te pones a pensar pierdes el tiempo. Lo entrenas, adquieres automatismos, y luego sale naturalmente. Si te va conduciendo da cara, y dependiendo de si es diestro o zurdo, lo puedes orientar hacia su pierna mala. ?Para saber eso te sirven los v¨ªdeos!
Puedes seguir a EL PA?S Deportes en Facebook y X, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.