Irene Paredes: ¡°Ganar nos sirvi¨® para callar muchas de las bocas que hemos tenido que aguantar¡±
La capitana de la selecci¨®n repasa el duro camino que han recorrido las secciones femeninas de f¨²tbol hasta poder pensar solo en f¨²tbol. Espa?a se juega este viernes estar en la final de la Liga de las Naciones
Nacida un 4 de julio, Irene Paredes (Legazpi, Gipuzkoa, 32 a?os), jugadora del Barcelona, capitana de la selecci¨®n y una de las veteranas del equipo que en agosto de 2023 alz¨® la primera Copa de un Mundial femenino de f¨²tbol para Espa?a, no ha perdido ni una pizca de intensidad. Ni de convicci¨®n. O confianza. Tras ganar en Australia y Nueva Zelanda y hacer globales sus reivindicaciones tras el beso del ya expresidente Rubiales a la futbolista Jenni Hermoso, las jugadoras de la selecci¨®n buscan ahora su segundo t¨ªtulo, este continental. La Liga de las Naciones est¨¢ en su fase final: cuatro equipos, dos semifinales y una final. Se juega en Sevilla, donde este viernes (a las 21.00, La1) les espera Pa¨ªses Bajos.
Unos d¨ªas antes de este primer partido clave, tambi¨¦n para obtener una plaza en los Juegos de Par¨ªs, Paredes se sienta a la charla nada m¨¢s terminar el entrenamiento con sus compa?eras en Las Rozas. Y 15 minutos despu¨¦s sale corriendo, (largas) piernas para qu¨¦ os quiero, apremiada por la hora de la comida y por la multa con que se amenaza a las tardonas (o a las ocupadas) ¨D50 euros, y la pena va subiendo por cada minuto que pasa¨D; regresa al cabo de una hora, todav¨ªa vestida de corto, con la coleta y la cinta para apartar el pelo de la cara. Est¨¢ helada. Pero sonr¨ªe al sol de febrero. Y se arma de paciencia. Ya no hay m¨¢s multas. Y los 15 minutos de charla han cundido. Ella tiene las ideas claras y es de palabra fluida. Ha vivido los mejores y los peores d¨ªas del f¨²tbol espa?ol jugado por mujeres. Ha pasado de tener poco m¨¢s que un bal¨®n a generar una expectaci¨®n planetaria.
Paredes fue campeona de liga con el Athletic, en 2016, antes de ayer, cuando nadie las conoc¨ªa. Guarda buenos recuerdos de entonces, de la ¡°gente top¡± con la que coincidi¨®, ¡°de esa gente que es dif¨ªcil encontrar en la vida, en el trabajo¡±. Pero no a?ora aquellos tiempos. ¡°Hemos mejorado. La Liga ha ido a m¨¢s, los clubes, las condiciones de la futbolista han ido a mejor¡±. Muchas, como ella, se han ido dando cuenta de todo lo que quedaba por mejorar en Espa?a al salir fuera, Par¨ªs, en su caso. ¡°Lo que m¨¢s me choc¨® fue el aspecto f¨ªsico. La francesa es una liga muy f¨ªsica. Tambi¨¦n me di cuenta de que se pod¨ªa mejorar mucho a nivel de clubes, aunque en otros pa¨ªses la situaci¨®n de la mujer futbolista es similar a la de Espa?a. Hay mucho que hacer, tambi¨¦n desde el punto de vista de las infraestructuras, las leyes, los convenios¡ Todos los pa¨ªses deben mejorar las condiciones en que trabajan y compiten las futbolistas para que las ligas crezcan¡±, asegura.
No vale decir que no somos rentables, si no se hace nada para que lo seamos
A la Liga F y a las futbolistas les preocupa hacer del f¨²tbol jugado por mujeres una inversi¨®n rentable. Y saben que es el momento. ¡°En el Bar?a se ha conseguido. Obviamente, hay que hacer una inversi¨®n inicial, pero si tienes las personas adecuadas que trabajen para la secci¨®n femenina, eso se acaba dando. No vale decir que no somos rentables, que cuando hay un problema nos quiten de en medio, y que no se haga nada para que seamos rentables. As¨ª, no¡±, sentencia.
No est¨¢ claro, sin embargo, si el dominio del Barcelona en la Liga F har¨¢ bien al f¨²tbol. ¡°No es bueno para nosotras, las jugadoras. Porque en muchos partidos encontramos que no tenemos esa dificultad que te hace mejorar¡±, asume Paredes. ¡°En cambio, creo que es bueno, porque as¨ª todos los equipos tienen alguien en quien fijarse. Mucha gente nos hace comentarios: ¡®Pero, ?no os aburr¨ªs? Vaya faena¡¯. Y no, vaya faena, no. El problema lo tiene el resto de clubes que ni apuestan ni hacen nada para que su secci¨®n femenina mejore. Todav¨ªa hay equipos en situaciones muy precarias y esto a d¨ªa de hoy no se puede permitir¡±.
De tolerancia cero sabe mucho Irene Paredes. Lleg¨® a la selecci¨®n absoluta cuando el vestuario sufr¨ªa a un Ignacio Quereda atornillado al banquillo de seleccionador. En aquellas concentraciones hab¨ªa insultos, vejaciones y maltrato. ¡°Era un vestuario que ten¨ªa la misma ilusi¨®n que las que est¨¢n ahora. Que solo quer¨ªa dedicarse al f¨²tbol y no pudo. No hab¨ªa manera de estar tranquilas jugando. Ni siquiera pod¨ªamos quedarnos en la Ciudad del F¨²tbol, porque ten¨ªamos que dormir fuera. Simplemente por ser mujeres no se nos permit¨ªa dormir en la residencia. Aquellas jugadoras son gente con mucha capacidad, con mucho talento, que simplemente naci¨® en una ¨¦poca en la que no se le dio nada para que se dedicaran al f¨²tbol. Tengo contacto con muchas de ellas y me da pena que no est¨¦n viviendo esto y que no lo hayan disfrutado¡±, lamenta. Porque algunas de aquellas, por edad, habr¨ªan llegado a hoy en activo, como Vero Boquete, Vicky Losada, Marta Torrej¨®n... Pero se fueron porque no lo soportaron. ¡°Algunas ten¨ªan mi edad o incluso eran m¨¢s j¨®venes, pero no siguieron porque era insostenible. Ganas y talento ha habido mucho desde siempre¡±, se?ala. Ella es una superviviente de aquel equipo, junto a Alexia Putellas y Jenni Hermoso, el coraz¨®n de la selecci¨®n de hoy, el n¨²cleo duro que, tras iniciarse en el f¨²tbol con Quereda, levant¨® la voz contra el exseleccionador Jorge Vilda. Todo curte, asume la capitana. ¡°Luego est¨¢ tu manera de entender las cosas, tus inquietudes, tus objetivos, pero quiero pensar que vivir aquello me ayud¨®. Me hubiese gustado que desde el primer momento hubi¨¦semos tenido los recursos humanos y materiales para dedicarnos ¨²nicamente al f¨²tbol. Pero no ha sido as¨ª, por eso hemos ido haciendo lo que hemos podido¡±.
Y lo que pudieron acab¨® siendo una revoluci¨®n que sacudi¨® los cimientos de la Federaci¨®n Espa?ola de F¨²tbol y alcanz¨® una dimensi¨®n mundial con el #seacab¨®. Paredes, estudiante de INEF y formada en inteligencia emocional, fue, seg¨²n el relato de sus compa?eras, clave en el despertar social del grupo. Aunque ella dice que no tuvo que hacer mucha labor de concienciaci¨®n. ¡°El vestuario lo tuvo claro enseguida. Ayuda si tienes conocimiento y has tenido contacto con diferentes personas; los estudios te ayudan a abrir la mente, a conocer, tambi¨¦n depende de los valores que tengas, de c¨®mo te hayan criado en tu casa. Y, por suerte, las que coincidimos ten¨ªamos muy claro que eso no se pod¨ªa dejar pasar¡±.
Muchos no entendieron (o no quisieron entender) sus demandas desde la conocida como crisis de las 15 a la crisis de Rubiales. Hoy tienen, al fin, las herramientas b¨¢sicas para trabajar a gusto y en condiciones. ¡°Nosotras trasladamos a la federaci¨®n todo lo que se necesitaba. Hay cosas que toman m¨¢s tiempo. Hay gente nueva que ha entrado para mejorar la secci¨®n tambi¨¦n [como Markel Zubizarreta, nuevo director de f¨²tbol]. Dentro de poco hay elecciones, y entendemos que van a ser unos meses de muchos cambios. La gente que no lo quiso entender en ese momento seguir¨¢ sin entenderlo. Pero nosotras solo hemos reclamado poder ejercer nuestro trabajo y una disciplina profesional con todo lo que eso engloba. Y dentro de esas cosas hay much¨ªsimos detalles, y para esos much¨ªsimos detalles hay mucha gente en la federaci¨®n y confiamos en que se vayan dando¡±.
Muchas veces seguimos flipando de que seamos campeonas del mundo
Pasada la tormenta, les cost¨® disfrutar de lo logrado el pasado verano. ¡°Muchas veces seguimos flipando de que seamos campeonas del mundo, tambi¨¦n de no haberlo podido disfrutar. Pero la estrella nos la vemos todos los d¨ªas en el pecho y eso nos enorgullece. Nos centramos mirando al futuro. Esperamos poder alargar este legado¡±. El camino que tratan de culminar estos d¨ªas empez¨® en septiembre, en plena revoluci¨®n. Viajaron a Gotemburgo sin haber dormido apenas m¨¢s de cuatro horas en las ¨²ltimas semanas. Y ganaron a Suecia (2-3). ¡°Fue una liberaci¨®n ganar aquel partido. Jugarlo, no tanto. Se vio muy bien el rendimiento que dimos; el cuerpo de cada jugadora pudo rendir no s¨¦ muy bien c¨®mo: las condiciones no eran las mejores. Y no nos dimos cuenta hasta el final del partido de la importancia que ten¨ªa ganar para callar muchas de las bocas y las voces que hemos tenido que aguantar¡±.
Este viernes tienen en la Liga de las Naciones otra magn¨ªfica oportunidad. Pelean por estar en los Juegos Ol¨ªmpicos y por jugar otra final, el mi¨¦rcoles pr¨®ximo. Son, adem¨¢s, un equipo mejor, especialmente sin bal¨®n. ¡°Durante el Mundial tambi¨¦n tuvimos aprendizaje. A ninguna se nos olvida la derrota contra Jap¨®n. Y las diferentes situaciones que se nos dieron y que gestionamos muy bien. Hoy el equipo es m¨¢s maduro. Adem¨¢s, ganar un Mundial y a equipos potentes te da seguridad. Lo has conseguido una vez, sabes que eres capaz de repetirlo. Esa confianza est¨¢ ah¨ª¡±. Y de ella viven estos d¨ªas. De su profesionalidad y su talento, tambi¨¦n. Ahora que, por fin, pueden pensar solo en el bal¨®n.
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