Inglaterra, una selecci¨®n de cambios

El equipo de Inglaterra se sab¨ªa de carrerilla en la pasada Eurocopa, toda vez que la seleccionadora Sarina Wiegman aline¨® el mismo once en los seis encuentros que le llevaron al laurel final. Sin excepci¨®n, sin variaciones. Un a?o m¨¢s tarde, cuatro de las 11 titulares se han ca¨ªdo ¡ªtres de ellas atacantes¡ª, penalizadas por las lesiones. Ausencias que rebajan la euforia y en parte la candidatura de las pross; un giro para mal en un equipo que ma?ana abrir¨¢ boca ante Hait¨ª y que tendr¨¢ la prueba del algod¨®n contra Dinamarca y China. Pero Inglaterra, altavoz y Pepito Grillo, tambi¨¦n logr¨® el mejor de los cambios.

Resulta que despu¨¦s de conquistar la Eurocopa en Wembley ¡ª2 a 1 frente a Alemania¡ª, de los v¨ªtores y consecuentes festejos, la selecci¨®n envi¨® un mail al candidato y ahora primer ministro Rishi Sunak, tambi¨¦n a su predecesora Liz Truss. Era un grito de socorro ideado por la defensa Lotte Wubben-Moy, un mensaje de concienciaci¨®n social, un comunicado firmado por todas las jugadoras de Inglaterra y verbalizado por la capitana Leah Williamson en la que expresaban su preocupaci¨®n por dejar un legado tras su triunfo. Solicitaban que todas las ni?as pudieran jugar a f¨²tbol en las escuelas y no se repitieran los errores con las que ellas convivieron en su infancia. ¡°Le pedimos a usted y a su gobierno que se aseguren que todas las ni?as tengan acceso a un m¨ªnimo de dos horas a la semana de educaci¨®n f¨ªsica. No solo deber¨ªamos ofrecer f¨²tbol a todas las ni?as, sino que tambi¨¦n debemos invertir y apoyar a las maestras de educaci¨®n f¨ªsica¡±, rezaba el escrito. M¨¢s que nada porque los gr¨¢ficos se?alaban que s¨®lo el 63% de las ni?as pod¨ªan jugar a f¨²tbol en sus clases de educaci¨®n f¨ªsica.

Siete meses m¨¢s tarde, despu¨¦s de muchas horas de di¨¢logo entre las jugadoras, la Asociaci¨®n de F¨²tbol (FA) y las instituciones gubernamentales, se lleg¨® al acuerdo, al punto de que el Gobierno anunci¨® una inversi¨®n mastod¨®ntica en el deporte escolar y en las actividades extraescolares. En n¨²meros, casi 700 millones de euros para que todas las ni?as del pa¨ªs reciban un m¨ªnimo de dos horas de educaci¨®n f¨ªsica semanales que garanticen que todas tengan igual acceso a todos los deportes, incluso el f¨²tbol, y que fomente la pr¨¢ctica deportiva femenina. ¡°La magia de la victoria en la Eurocopa puede vivir con un legado que tiene la capacidad de cambiar el futuro del f¨²tbol femenino e impactar positivamente en la sociedad¡±, afirm¨® Mark Bullingham, director ejecutivo de la FA.

Una medida aplaudida por la sociedad que aparcaba el machismo, pues hasta 1971 las mujeres ten¨ªan prohibido jugar al f¨²tbol en los recintos de los clubes de la FA. Decisi¨®n aprobada por la instituci¨®n en 1921 porque, entend¨ªan los mandamases retr¨®grados de la ¨¦poca, el f¨²tbol femenino era demasiado popular. Un siglo m¨¢s tarde, sin embargo, eran las mejores de Europa en un Wembley copado por 87.192 espectadores. Queda por ver si tambi¨¦n del mundo, ahora que la alineaci¨®n tipo ha quedado notablemente desfigurada.

En la defensa est¨¢ la baja capital de Williamson, que en ocasiones hac¨ªa las veces de mediocentro. Pero una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha en abril le priv¨® del brazalete y del Mundial. Y aunque el centro del campo se mantiene intacto con Stanway y Walsh ¡ªmejor jugadora de la final europea¡ª, el ataque se ha descascarillado por completo, s¨®lo con la extremo Hemp en pie. Ninguna baja tan expresiva como la de Beth Mead, mejor jugadora y m¨¢xima goleadora de la Eurocopa, tambi¨¦n castigada por una rotura de los ligamentos cruzados de la rodilla izquierda. Aunque tambi¨¦n echar¨¢ en falta el equipo la llegada y el trampol¨ªn en las transiciones que supon¨ªa Fran Kirby, que desde febrero luchaba contra otra lesi¨®n rebelde en la rodilla. Lo intent¨® con plasma rico en plaquetas pero, tras ver que no mejoraba, el cuerpo m¨¦dico del Chelsea le aconsej¨® la intervenci¨®n quir¨²rgica. La ¨²ltima bala perdida, aunque en este caso porque colg¨® las botas tras el triunfo europeo, es la de la delantera Ellen White. Demasiada falta de gol para un equipo que cambi¨® el f¨²tbol femenino en Inglaterra.

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