Messi y el esp¨ªritu del asado
Argentina, con un f¨²tbol en mate, afronta las semifinales ante Croacia agarrado al car¨¢cter colectivo, su hinchada mayoritaria y los fogonazos del 10, ahora tambi¨¦n desafiante en gestos
Antes de viajar a Doha, la selecci¨®n argentina debi¨® resolver un asunto log¨ªstico imprescindible para su convivencia: c¨®mo hacer los asados en su residencia de la Universidad de Qatar. La federaci¨®n encarg¨® a una empresa cuatro parrillas de dos metros y medio, y un fog¨®n donde se pudieran colgar hasta piezas enteras. Todo a medida para que cupiera en el avi¨®n y fabricadas en trabajo intensivo una semana antes del vuelo. Y entre la ropa, las botas y el resto del material deportivo, 2.600 kilos de carne. Cinco semanas fuera de casa ¡ªen el mejor de los escenarios (al que se ha llegado)¡ª sin un asado era demasiado para un argentino, incluso para un deportista de alto nivel. Una vez instalados en la nueva residencia, a mediados de noviembre, apenas tardaron unas horas en destensar el ambiente con una raci¨®n de vac¨ªo.
De momento, el camino hacia las semifinales del Mundial del equipo albiceleste (las segundas en tres d¨¦cadas) remite mucho al esp¨ªritu de grupo, al cierre de filas tras el trompazo inicial contra Arabia Saud¨ª y la comuni¨®n alrededor de Messi m¨¢s que a un juego coral arrebatador, o siquiera notable en muchos momentos. Su gran reacci¨®n en la segunda parte de la pr¨®rroga en cuartos ante Pa¨ªses Bajos despu¨¦s del golpe que supuso el empate en el minuto 101, consolid¨® la veta corajuda por encima de la est¨¦tica en una selecci¨®n a la que no le sobra la experiencia en estas latitudes (19 son debutantes).
¡°Tiene el esp¨ªritu de afrontar las situaciones de cada momento. Sabe qu¨¦ tiene que hacer seg¨²n las necesidades¡±, valor¨® Lionel Scaloni despu¨¦s de escapar vivo de los penaltis contra Holanda. ¡°Sabemos sufrir¡±, sentenci¨® este lunes Nicol¨¢s Tagliafico. Este martes (20.00, La 1 y Gol Mundial), les espera Croacia, un conjunto que, al margen de la receta infinita de Modric, ha hecho de la resistencia su v¨ªa al ¨¦xito.
En esa rebeli¨®n albiceleste frente a los oranje, empujada por una hinchada monopolizadora del anfiteatro, nada sorprendi¨® m¨¢s que un Messi desatado y desafiante con los rivales, una imagen que lo argentiniz¨®, lo acerc¨® m¨¢s a su grada y, sobre todo, lo enfrent¨® con la idea que durante muchos a?os se hab¨ªa construido de ¨¦l en todas sus etapas. En todos los batacazos europeos que acumul¨® en su ¨²ltimo periodo en el Barcelona, nunca falt¨® la foto del 10 solo en el c¨¦sped y sin capacidad de evitar los desastres que se fueron sucediendo. Lo mismo le ocurri¨® en marzo en el Santiago Bernab¨¦u con la camiseta del PSG y tampoco con la selecci¨®n hab¨ªa encontrado la llave en muchas situaciones de crisis. Su reinado lo construy¨® con f¨²tbol puro y duro, y muy poco con gestos y palabras.
La advertencia de Scaloni
Esta vez, en su ¨²ltimo Mundial, quiz¨¢s en el ¨²ltimo torneo en el que realmente le vaya toda la vida en ello, La Pulga, adem¨¢s de goles y pases, tambi¨¦n se ha mostrado retador y canchero para acaudillar un grupo de j¨®venes que no disimula su entrega y admiraci¨®n al l¨ªder. La consecuencia es un equipo en mate que funciona a golpe de ri?¨®n y de fogonazos de la estrella. As¨ª lleg¨® a semifinales. La inc¨®gnita es si Messi podr¨¢ culminar su gran obra acaparando casi en exclusiva el ataque
Surgi¨® Enzo Fern¨¢ndez en un centro del campo que se qued¨® en el aire por la baja de Lo Celso, aport¨® Juli¨¢n ?lvarez para suplir a un Lautaro sin huella y Dibu Mart¨ªnez se consolid¨® como un parapenaltis, pero no hubo hasta la pen¨²ltima estaci¨®n mucho m¨¢s rastro extraMessi de la cuadrilla de Lionel Scaloni que el orden y la cautela. De momento, le funciona: Argentina es la escuadra que menos remates a puerta ha concedido (1,2 por encuentro) y ha ido sacando m¨¢xima rentabilidad a las puntadas con hilo de su estrella, buen gestor de los esfuerzos que se puede permitir y consciente de las zonas m¨¢s da?inas que puede pisar.
El t¨¦cnico de Pujato ya advirti¨® hace semanas que no siempre las mejores selecciones levantan el Mundial, ni las que avasallan y est¨¢n siempre en campo contrario; sino las inteligentes que se adaptan a lo que les conviene. Justo la v¨ªa que ha recorrido su vestuario hasta ahora, h¨¢bil para obtener tajada de lo que pone sobre la mesa.
Juega de local
El exjugador del Depor, Racing y Mallorca ha hablado en p¨²blico 10 veces en las ¨²ltimas semanas, antes y despu¨¦s de cada choque, y cuesta encontrar disertaciones futbol¨ªsticas m¨¢s all¨¢ del esp¨ªritu y la identificaci¨®n que, seg¨²n sus declaraciones, despiertan sus muchachos por los valores de entrega y sacrificio que transmiten. Este lunes, eso s¨ª, despu¨¦s del bronco desenlace contra Pa¨ªses Bajos, se emple¨® a fondo en asegurar que su equipo ¡°sabe ganar y perder¡±.
En paralelo al ascenso de la Albiceleste hasta las semifinales, ninguna selecci¨®n ha marcado tanta distancia en las gradas y en las calles como ella. Pese a estar a 13.000 kil¨®metros de Doha, una masa de miles y miles de aficionados le ha acompa?ado hasta Qatar. Mientras la afici¨®n europea apenas se ha desplazado (precios muy caros y un tipo de ocio fuera de los estadios poco atractivo para el occidental medio), Messi y compa?¨ªa se ha acostumbrado a disputar cada partido como local. Cada victoria deriva en una fiesta con sus hinchas, como si ya hubieran obtenido el t¨ªtulo. Una ventaja en el empedrado que ha ido reforzando el alma emocional del conjunto sudamericano. Grada, esp¨ªritu, asados y Messi, la f¨®rmula argentina para las distancias cortas de un Mundial.
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