Los torneos de dos semanas saturan al tenis: ¡°?Descansar? Descansar es dormir en tu casa¡±

Sirva de ejemplo el ex¨®tico cartel de las semifinales masculinas de este Masters 1000 de Roma, donde no hab¨ªa rastro alguno de los Djokovic, Sinner o Alcaraz ¡ªlos dos ¨²ltimos, lesionados, ni siquiera han llegado a competir¡ª, ni tampoco de especialistas como Casper Ruud o Stefanos Tsitsipas. Entraba dentro de la l¨®gica la presencia de Alexander Zverev, pero llama (mucho) la atenci¨®n la n¨®mina restante. El estadounidense Tommy Paul, un pegador cuyo indiscutible h¨¢bitat es el cemento, nunca hab¨ªa superado la tercera ronda de un torneo de relevancia sobre tierra; el chileno Nicol¨¢s Jarry, en cambio, s¨ª sabe desenvolverse en la arcilla, pero el historial refleja que m¨¢s all¨¢ de los octavos alcanzados en Roland Garros el curso pasado, tampoco hab¨ªa conseguido brillar en una cita de estas caracter¨ªsticas, con la tercera ronda tambi¨¦n como l¨ªmite; y sorprende, por encima de todo, la m¨¢s que inesperada progresi¨®n de Alejandro Tabilo, un jugador pendiente en su d¨ªa de la b¨¢scula ¡ªdescendi¨® de 110 kilos a 65, problemas en ambos casos¡ª y que a sus 26 a?os no hab¨ªa logrado hasta ahora acceder al cuadro principal de ning¨²n gran torneo sobre arena.

Coincide este panorama extra?o ¡ªno en lo femenino, donde las finalistas Iga Swiatek y Aryna Sabalenka no aflojan¡ª con las recurrentes lesiones, las quejas y la monoton¨ªa. ¡°Estar tanto tiempo en los torneos est¨¢ convirti¨¦ndose en algo aburrido¡±, indicaba en el Foro It¨¢lico la kazaja Elena Rybakina. ¡°Mentalmente se hace un poco m¨¢s duro, porque ahora pasamos menos tiempo en casa, y eso significa que, en realidad tenemos menos tiempo para recuperarnos¡±, sostiene el ruso Andrey Rublev. ¡°S¨ª, te dicen que tienes un d¨ªa entre medias, que no tienes que jugar todos los d¨ªas, pero eso no es descansar; descansar es pasar tiempo en tu casa, durmiendo en tu propia cama y con tu familia, tus perros y tus hijos, ?verdad?¡±, prolonga a rega?adientes el alem¨¢n Zverev, refiri¨¦ndose, en la l¨ªnea de sus compa?eros, al progresivo asentamiento de los torneos (Masters y WTA 1000) de dos semanas; es decir, el doble del formato tradicional. La extensi¨®n comprime todav¨ªa m¨¢s un calendario de por s¨ª saturado y difumina la frontera con los Grand Slams.

No parece preocupar excesivamente a los rectores del circuito, ni tampoco a los organizadores de los torneos ni a los patrocinadores que se asocian con ellos. Sino m¨¢s bien todo lo contrario. La prolongaci¨®n supone mayor presencia, reforzar la imagen de marca e intentar colgarse el apelativo de Quinto Grand Slam, exprimir los ingresos ¡ªla zona VIP de la Caja M¨¢gica, por ejemplo, ha duplicado su actividad¡ª y obtener mayor tajada por la venta de los derechos de televisi¨®n. En consecuencia, tenis y m¨¢s tenis, negocio y m¨¢s negocio; del 1 de enero al 24 de noviembre. Los torneos se solapan y desaparece la transici¨®n entre unos y otros; a Nadal se le ve un d¨ªa en Barcelona, al siguiente en Madrid y dos despu¨¦s en el Foro It¨¢lico. Los tenistas de primer nivel, obligados por la normativa ¡ªque establece la obligatoriedad de competir, salvo contadas excepciones a las figuras de largo y productivo recorrido¡ª y tambi¨¦n por el funcionamiento del ranking ¡ªpara ganar puntos o retener los de la temporada anterior¡ª, apenas encuentran par¨¦ntesis y acusan la tensi¨®n sostenida. El bucle sigue y sigue, y el espect¨¢culo, en muchos casos, se resiente.

Este curso, el programa masculino no concede casi tregua y en 2025, la din¨¢mica ser¨¢ todav¨ªa peor, porque siete de los nueve Masters 1000 ser¨¢n de dos semanas. Al tradicional formato de los Grand Slams se sumaron Indian Wells y Miami a comienzos de los 2000; el a?o pasado, se incorporaron Madrid, Roma y Shangh¨¢i; y el pr¨®ximo, ser¨¢n Canad¨¢ y Cincinnati ¡ªen la franja veraniega previa al US Open¡ª los que ampliar¨¢n la extensi¨®n. De este modo, solo dos citas, Montecarlo y Par¨ªs-Bercy, mantendr¨¢n la duraci¨®n de una semana. En el caso femenino, siete de los 10 torneos de categor¨ªa 1000 ser¨¢n de dos semanas en 2025: Indian Wells, Miami, Madrid, Roma, Pek¨ªn, Cincinnati y Montreal.

Mayor esfuerzo, m¨¢s prolongado

Crecen los torneos y, l¨®gicamente, la exigencia. Los cuerpos, sometidos cada vez a sacrificios mayores y m¨¢s continuados, lo sufren. No parece que la concatenaci¨®n de lesiones responda a la casualidad, mientras las mejores raquetas del circuito contin¨²an cayendo. Madrid, s¨ªntoma reciente de la criba: Sinner, Medvedev, Lehecka. ¡°Las lesiones siempre han estado ah¨ª¡±, apuntaba Nadal a su llegada a la capital italiana. ¡°Cuando llevas tu cuerpo al l¨ªmite, al final te lesionas. Cuando el tenis es cada vez m¨¢s y m¨¢s r¨¢pido, te lesionas. Cuando juegas la mayor parte del a?o en pistas duras y las superficies son m¨¢s duras para el cuerpo, te lesionas. Esa es la respuesta sencilla. Y luego est¨¢ el otro mundo, el de los torneos; eso es negocio. Esa es otra conversaci¨®n. Al final, los jugadores quieren ganar dinero. El torneo quiere ganar dinero. Entonces es todo el ciclo que se junta. Nosotros aceptamos ese papel¡±, agregaba el espa?ol.

¡°Al a?adir m¨¢s d¨ªas, tienes que ser una especie de superh¨¦roe para ser consistente durante dos semanas seguidas. Todo esto perjudica al deporte. Empieza por lo mental y contin¨²a con lo f¨ªsico; hace que los jugadores nos lesionemos¡±, critica Tsitsipas. ¡°Cuando tienes un d¨ªa libre te ayuda mucho a estar preparado f¨ªsicamente para el siguiente partido, as¨ª que dir¨ªa que f¨ªsicamente es m¨¢s f¨¢cil recuperarse durante los torneos, pero mentalmente tienes que estar preparado porque en realidad no hay d¨ªas libres, porque incluso entre un partido y otro, normalmente venimos aqu¨ª y entrenamos, vemos las mismas caras y comemos lo mismo, as¨ª que no puedes desconectar del todo¡±, se pronuncia la n¨²mero uno, Swiatek. ¡°En general, el circuito est¨¢ volvi¨¦ndose m¨¢s exigente debido a la duraci¨®n de los torneos y a todas estas reglas obligatorias, tanto en ATP como en WTA. Veremos lo que pasa en el futuro, la planificaci¨®n ser¨¢ muy importante¡±, agrega la polaca. Y en la misma l¨ªnea intermedia se posiciona Aryna Sabalenka: ¡°Se hacen largos, pero yo prefiero tener un d¨ªa de descanso¡±.

Como contrapartida, el aumento de los d¨ªas conlleva un incremento de la cifra de participantes, por lo que se ampl¨ªa la horquilla de profesionales que pueden acceder a los cuadros. ¡°Son fant¨¢sticos para los que est¨¢n entre el top-50 y el top-100, pero no para los del top-10. As¨ª de sencillo¡±, se expresa Zverev, quien a su vez recalca que el llegar a las rondas finales termina penalizando al tenista, sometido a mayor presi¨®n, y obligado a ¡°trabajar mucho m¨¢s¡±. El alem¨¢n, finalista por tercera vez en Roma ¡ªund¨¦cima en un Masters 1000¡ª gracias a la remontada contra Tabilo (1-6, 7-6(4) y 6-2, en 2h 16m), entiende que el planteamiento actual es insostenible, dado que el margen de recuperaci¨®n es m¨ªnimo y que, esgrime, la preparaci¨®n afecta ¡°no solo a lo que entrenas en la pista o a cu¨¢nto juegas¡±, sino tambi¨¦n ¡°al esfuerzo en el gimnasio, al trabajo invisible¡± y a la correcta administraci¨®n de los descansos.

El domingo, Zverev se enfrentar¨¢ a Jarry, superior a Paul en un duelo equilibrado (6-3 y 6-7(3) y 6-3, tras 2h 47m). Ni el chileno ni el estadounidense lucen entre los m¨¢s fuertes ¡ª24? el ganador y 16? el vencido¡ª, pero han logrado abrirse paso en el maratoniano contexto de hoy. Tenis, todos los d¨ªas y a todas horas.

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