Via libre, para las nacionalizaciones brit¨¢nicas
Ya no hay obst¨¢culos para que el Gobierno brit¨¢nico nacionalice las industrias de construcci¨®n naval y aeron¨¢utica. La ley que lo permita puede estar aprobada antes de que acabe la presente sesi¨®n parlamentaria.El Gobierno ha sobrepasado un obst¨¢culo puesto por los conservadores y que ha causado durante m¨¢s de un mes una situaci¨®n de crisis en el Parlamento.
Los conservadores alegaron que el texto de la ley conten¨ªa un fallo t¨¦cnico que la convert¨ªa en una legislaci¨®n ?h¨ªbrida?. Seg¨²n ello, los debates que se hab¨ªan celebrado, hasta el momento, deb¨ªan ser anulados para someter la ley a un comit¨¦ especial.
Para superar esa cuesti¨®n t¨¦cnica, los Comunes han debido votar dos veces. En la primera ocasi¨®n, hace un mes, la postura del Gobierno de seguir con la ley sin atender a los detalles expuestos por la oposici¨®n gan¨® por un solo voto.
Los conservadores protestaron entonces ruidosamente por supuestas irregularidades en el procedimiento de la votaci¨®n. El primer ministro decidi¨® anular el resultado a ra¨ªz de la guerra de guerrillas parlamentarias que le declar¨® la l¨ªder conservadora, Margaret Thatcher.
El martes por la noche, la victoria del Gobierno fue mucho m¨¢s holgada: obtuvo 114 votos, m¨¢s que la oposici¨®n. La ley seguir¨¢ su curso, y ya su aprobaci¨®n es una pura cuesti¨®n de tr¨¢mite.
Los conservadores no se han opuesto a la marcha normal de la ley s¨®lo por cuestiones legalistas. Para ellos, cada nueva industria nacionalizada requiere a¨²n m¨¢s gasto p¨²blico; de ese modo, dicen, se sigue desequilibrando la econom¨ªa inglesa.
Para evitar las nacionalizaciones, la oposici¨®n contaba en el Parlamento con los nacionalistas escoceses, que en principio iban a votar en contra del Gobierno porque ?preferimos que nuestros astilleros sean regidos por hombres de negocios escoceses que por pol¨ªticos del Gobierno de Londres?. En un movimiento de ¨²ltima hora, Michael Foot, que es el ministro encargado de los asuntos de la devoluci¨®n parlamentaria para Escocia y Gales, explic¨® a los nacionalistas que el Gobierno estaba dispuesto a dejar que fueran los propios escoceses los que controlaran las industrias uue se nacionalicen ahora.
Ante esa perspectiva, los nacionalistas escoceses se abstuvieron, y lo que hubiera sido una victoria m¨ªnima del Gobierno se convirti¨® no s¨®lo en un triunfo holgado, sino en el logro pol¨ªtico m¨¢s considerable de la Administraci¨®n de James Callaghan.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.