La autoridad, ¨²nica responsable de las suspensiones

Dos festejos taurinos se suspendieron ayer a pretexto de que hab¨ªa llovido. El art¨ªculo 58 del vigente Reglamento Taurino dice al respecto lo siguiente: ?Cuando la lluvia ca¨ªda con posterioridad al apartado de las reses haya puesto en mal estado el piso del redondel se oir¨¢ la opini¨®n de los espadas y en su virtud el presidente acordar¨¢, atendiendo a la mayor¨ªa de criterio expuesto por aqu¨¦llos, si procede o no suspender el espect¨¢culo, levant¨¢ndose al efecto, en. uno u otro caso, el acta correspondiente.?No est¨¢ clara la redacci¨®n del art¨ªculo pues se presta a interpretaciones sobre si el presidente debe suspender la corrida cuando los toreros lo pidan por mayor¨ªa, o si s¨®lo la suspender¨¢ cuando esta mayor¨ªa exista. Pero lo que no tiene duda alguna es que nada m¨¢s hay cuesti¨®n en los casos en que el ruedo est¨¦ en malas condiciones. Y ¨¦ste no era, en absoluto, el caso de Alcal¨¢ de Henares ayer, donde no se vio ni un solo charco, y medio ruedo estaba totalmente seco, ni el de Bilbao donde, seg¨²n explica Alfonso Saiz Valdivielso, tampoco hab¨ªa charcos y adem¨¢s existe el precedente de que siete d¨ªas antes se celebr¨® la corrida de abono en circunstancias de ruedo mucho peores.

No est¨¢ el espect¨¢culo taurino tan boyante que admita caprichos de esta especie en los que la consecuencia inmediata y peor es que se defrauda al p¨²blico. La responsabilidad de estas suspensiones dichas no es de los toreros que hab¨ªan de actuar, por mucho que presionaran, sino de la autoridad, cuyo criterio debe prevalecer sobre el de las partes interesadas. Por mucho que dijeran los rejoneadores de Alcal¨¢ o El Viti en Bilbao, si los respectivos ruedos estaban en condiciones, la autoridad dej¨® de ser competente cuando prest¨® o¨ªdos a sus injustificadas reclamaciones.