Los negocios privados perdieron al pr¨ªncipe Bernardo

El pr¨ªncipe Bernardo de Holanda, esposo de la reina Juliana, dimiti¨® de su cargo de inspector general de las Fuerzas Armadas y ha renunciado a sus restantes cargos oficiales, inform¨® ayer al Parlamento el primer ministro holand¨¦s, Joop Den Uyl.El primer ministro hizo p¨²blica la dimisi¨®n del pr¨ªncipe en la misma sesi¨®n en la que revel¨® el contenido del informe elaborado por una comisi¨®n especial de tres miembros sobre la presunta culpabilidad del consorte real, acusado a principios de este a?o de recibir m¨¢s de un mill¨®n de d¨®lares por facilitar la venta de aviones de la compa?¨ªa Lockheed en Holanda.

El informe se?ala que no ha podido ser probado que el pr¨ªncipe Bernardo haya aceptado el soborno de la multinacional norteamericana, pero critica severamente las relaciones del pr¨ªncipe con los medios de negocios y sus contactos con algunos banqueros y financieros extranjeros.

La dimisi¨®n del pr¨ªncipe Bernardo de sus importantes cargos oficiales constituye aparentemente una especie de pacto t¨¢cito entre el Gobierno y la reina Juliana con el objeto de evitar una crisis constitucional.

Dicho pacto se habr¨ªa formalizado en las conversaciones mantenidas en los ¨²ltimos d¨ªas por la reina Juliana, que interrumpi¨® dos veces sus vacaciones en Italia, con el primer ministro Joop Den Uyl.

En un principio, la reina rechaz¨® la propuesta del Gobierno de que el pr¨ªncipe dimitiese de sus cargos, seg¨²n revelaba ayer el diario De Telegraaf de Amsterdam, pero finalmente accedi¨® a los prop¨®sitos del gabinete con el objeto de evitar una crisis provocada por una casi forzada abdicaci¨®n de la reina Juliana.

Reacia la princesa Beatriz a aceptar la sucesi¨®n en esas condiciones, la corona habr¨ªa ido a parar al pr¨ªncipe Alejandro, que cuenta s¨®lo con nueve a?os y cuya sucesi¨®n habr¨ªa necesitado del nombramiento de un regente.

Las conclusiones del informe

De acuerdo con la investigaci¨®n realizada por los jueces Holtrop, Donner y Peschar, el pr¨ªncipe no tuvo influencia directa en la decisi¨®n gubernamental de adquirir aviones Starfighter de la Lockheed, pero ?se mostr¨® accesible a propuestas inadmisibles?.

Al informar sobre estas conclusiones al Parlamento, el primer ministro holand¨¦s afirm¨® ayer que el consorte real hab¨ªa aceptado "iniciativas que le colocaban a ¨¦l y al Gobierno holand¨¦s en una perspectiva bastante dudosa".

Las conclusiones de la investigaci¨®n estuvieron en el centro de las conversaciones secretas mantenidas esta semana entre el primer ministro y la reina Juliana. Esta sosten¨ªa que, una vez que el informe absolv¨ªa a su esposo de la acusaci¨®n concreta de soborno en relaci¨®n con la Lockheed, las recomendaciones del Gobierno deber¨ªan.estar desprovistas de cualquier otra cr¨ªtica, impl¨ªcita o abierta, a la actuaci¨®n del pr¨ªncipe Bernardo.

Den Uyl y su Gobierno insistieron, sin embargo, en que las cr¨ªticas estaban justificadas, en vista de los resultados de la investigaci¨®n, y convenci¨® finalmente a la reina sobre la necesidad de la dimisi¨®n de su esposo.

Las ?amistades? del pr¨ªncipe

El pr¨ªncipe Bernardo, de origen alem¨¢n, y 65 a?os de edad, adem¨¢s de ostentar diversos cargos oficiales, preside el Fondo Mundial para Defensa de la Naturaleza, es miembro del consejo de administraci¨®n de la compa?¨ªa a¨¦rea holandesa KLM y su nombre est¨¢ vinculado a m¨¢s de 300 distintas organizaciones.

Entre sus amistades se encuentran el representante en Suiza de la Lockheed, el holand¨¦s C. Fred Meuser, que fue identificado por un antiguo empleado de la compa?¨ªa, como el intermediario que habr¨ªa sobornado al pr¨ªncipe. Las acusaciones fueron rechazadas tanto por ¨¦ste como por Meuser.

Otro de los amigos del pr¨ªncipe es el suizo Tibor Rosenbaum, director del Banco de Cr¨¦dito Internacional, que facilit¨® la venta de la mansi¨®n de la madre de Bernardo, la princesa Irmgaard, en 1974. El banco, que quebr¨® el a?o pasado, era depositario, entre otros, de los fondos de Meyer Lansky, dirigente del sindicato del crimen, y est¨¢ en este momento sometido a una investigaci¨®n en Suiza.

El nombre del pr¨ªncipe Bernardo est¨¢ ligado tambi¨¦n al del financiero norteamericano Robert Vesco, huido en estos momentos de su pa¨ªs y que, en determinada altura, recibi¨® la ayuda del pr¨ªncipe Bernardo para abrir en Holanda una sociedad de inversiones extranjeras, de acuerdo con la prensa holandesa.

Otro de los personajes vinculados a Bernardo, es el jeque Ali Ahmed, misterioso financiero residente en Londres.

En relaci¨®n con el soborno de la Lockheed, el representante de la compa?¨ªa en Suiza, Meuser, se neg¨® a prestar declaraci¨®n ante el subcomit¨¦ del Senado de los Estados Unidos que investiga el caso. Sin embargo, el ex vicepresidente de la Lockheed, A. C. Kotchian, declar¨® que la suma de 1.100.000 d¨®lares hab¨ªa sido pagada a ?un alto funcionario gubernamental de Holanda?.