"La unidad entre los socialistas espa?oles, condici¨®n imprescindible para la democracia"
Durante m¨¢s de una hora, el primer ministro portugu¨¦s, Mario Soares, convers¨® con el enviado especial de EL PAIS, , en su residencia oficial del palacio de Sao Bento. ? Sigo con la mayor atenci¨®n la pol¨ªtica espa?ola. M¨¢s que con atenci¨®n yo dir¨ªa con esperanza y con pasi¨®n, y considero que la democracia en Espa?a es ineluctable. El hecho de que Espa?a se transforme en una verdadera democracia es un enriquecimiento para Europa y para la comunidad internacional, ya que es una gran naci¨®n y los espa?oles un extraordinario pueblo?, dijo Soares en otras cosas, en la primera entrevista que concede a un diario espa?ol desde que asumi¨® las funciones de primer ministro.
En su reciente discurso por la televisi¨®n, usted habl¨® de la crisis econ¨®mica portuguesa. ?Cu¨¢les son las principales dificultades del pa¨ªs en este campo? ?De qu¨¦ forma el Gobierno socialista piensa solucionarlas?Tenemos dificultades de varios tipos. En primer lugar, tenemos problemas de tipo financiero que est¨¢n relacionados con nuestra balanza de pagos. Existe un d¨¦ficit que se viene agravando y que hasta ahora fue cubierto con el recurso a las divisas portuguesas, principalmente con nuestras reservas de oro. Comienza a ser peligroso seguir recurriendo a estas reservas de oro porque llegar¨ªamos, a corto plazo a tener un grave problema financiero.
Despu¨¦s tenemos un problema de fondo, un problema esencialmente econ¨®mico: la producci¨®n, en t¨¦rminos globales del pa¨ªs, es inferior, bastante inferior al consumo. Creemos que hay que aumentar la producci¨®n, tenemos que equilibrar nuestra balanza comercial incrementando las exportaciones y disminuyendo las importaciones. Por otro lado tenemos que reducir por medios directos o indirectos, o recurriendo a esquemas de ahorro forzado, el consumo. Finalmente, hemos de controlar los precios y aumentar las inversiones reproductivas.
Esta es en general la situaci¨®n del pa¨ªs, que es bastante grave en el plano financiero, pero otros pa¨ªses se encuentran en situaciones no muy diferentes de la nuestra. Sin conocer muy bien la situaci¨®n espa?ola, pienso que tampoco es muy brillante. Creo que si hay determinaci¨®n y coraje, los problemas pueden resolverse, y por eso puse el acento t¨®nico de mi discurso en los problemas de trabajo, en el aumento de la productividad y la disciplina, en la reducci¨®n de las horas extraordinarias y de las faltas al trabajo. Tambi¨¦n es importante la autoridad del Estado, ya que sin autoridad del Estado existe una cierta disgregaci¨®n y ¨¦sta puede facilitar conflictos sociales que ser¨ªan aprovechados por fuerzas extremistas... de izquierda y de derecha.
-Algunos observadores profetizan en Lisboa que su Gobierno puede no llegar a 1977. Hace unos d¨ªas, el doctor Sa Carneiro, secretario general del Partido Popular Democr¨¢tico, declar¨® en Londres que en dos meses se sabr¨¢ si su Gobierno ha tenido ¨¦xito o no. En todo caso, ?cree que su actual Gabinete aguantar¨¢ sin remodelaciones los cuatro a?os que la constituci¨®n dispone?
-Cuatro a?os es un plazo demasiado largo para poder decirle si habr¨¢ reajustes. Le puedo decir, sin embargo, que no habr¨¢ reajustes antes de 1977. El equipo gubernamental que comenz¨® a trabajar hace un mes y medio es homog¨¦neo. Ello no excluye divergencias en cierto tipo de opiniones, que son naturales dentro de un partido democr¨¢tico y que hasta son fecundas.
Tenemos una orientaci¨®n colectiva com¨²n, que no es contestada y la determinaci¨®n de actuar, como ya estamos haciendo. El Gobierno est¨¢ tomando medidas desde que se instal¨® y dar¨¢n resultados. Cuando estos resultados se vuelvan evidentes para el pa¨ªs los profetas de la desgracia que prev¨¦n la ca¨ªda del Gobierno a corto plazo se ir¨¢n desilusionando.
Ayuda externa
-Para superar las dificultades econ¨®micas del pa¨ªs son necesarias inversiones extranjeras. La actual estrategia de su Gobierno, dirigida hacia la integraci¨®n en la CEE, ?se basa en la ayuda masiva de los pa¨ªses occidentales?-La estrategia para resolver nuestras dificultades depende en parte de la ayuda externa, que es una condici¨®n necesaria, pero no suficiente, como se dice en lenguaje matem¨¢tico. Lo fundamental es la determinaci¨®n de los portugueses, para a trav¨¦s de reformas internas, trabajar duramente y resolver sus problemas. Pero el Gobierno portugu¨¦s tiene, efectivamente, un buen ambiente internacional y goza de cr¨¦dito exterior. Hemos experimentado receptividad en todos los pa¨ªses aliados, de Portugal e incluso actitudes de comprensi¨®n y simpat¨ªa de pa¨ªses de los m¨¢s variados, que pertenecen a latitudes y longitudes bastante diferentes.
Puedo decirle tambi¨¦n que se avecina una ofensiva diplom¨¢tica del Gobierno portugu¨¦s para la integraci¨®n en el Mercado Com¨²n. El d¨ªa 20 de este mes vamos a firmar la ¨²ltima parte del tratado preferencial con el Mercado Com¨²n y a partir de ah¨ª entramos en una nueva fase de nuestras relaciones con la CEE, que nos lleva a pedir la integraci¨®n, aunque estaremos sujetos como en el caso de Grecia, a un esquema que presupone un cierto per¨ªodo , de transici¨®n hasta que podamos cumplir todas las obligaciones del Tratado de Roma. Encontramos receptividad en los pa¨ªses de los nueve, pr¨¢cticamente en todos y contamos con s¨®lidas amistades entre esos pa¨ªses que patrocinar¨¢n nuestra entrada en la Comunidad Econ¨®mica Europea, o la apertura de negociaciones en ese sentido. Por otro lado, estamos recibiendo, ayuda econ¨®mica de Estados Unidos, que es importante. Los pa¨ªses de la EFTA y los pa¨ªses escandinavos tienen tambi¨¦n relaciones de cooperaci¨®n muy estrecha con Portugal.
La apertura de nuevos mercados, como consecuencia de la pol¨ªtica de independencia de Portugal, particularmente en los pa¨ªses del Este y del Tercer Mundo, hace que tengamos hoy un conjunto de relaciones internacionales suficientemente diversificadas para poder contar con ayudas de varios lados.
Finalmente, estamos realizando un gran esfuerzo para normalizar nuestras relaciones diplom¨¢ticas con los pa¨ªses africanos de expresi¨®n portuguesa, sobre todo Angola, y Mozambique, y esperamos que esto tambi¨¦n tenga influencia para aumentar nuestras relaciones comerciales con estos pa¨ªses.
Una pol¨ªtica de no alianzas
-Evidentemente, los partidos situados a la derecha del Partido Socialista (Partido Popular Democr¨¢tico y Centro Democr¨¢tico Social) esperan desempe?ar pronto una cartera ministerial. ?Su partido va a mantener a toda costa su pol¨ªtica de no alianzas ni a la derecha ni a la izquierda?-Es ¨¦sta una pregunta que me hacen repetidamente desde hace muchos meses. Cuando comenzamos la campa?a electoral para las elecciones legislativas, los periodistas extranjeros y portugueses no cre¨ªan que nosotros fu¨¦ramos a cumplir nuestra pol¨ªtica de no alianzas. Despu¨¦s pretendieron que no ?pas¨¢ramos? en la Asamblea de la Rep¨²blica y ahora, despu¨¦s de un mes y medio de Gobierno, todav¨ªa vuelven a proponernos esta pol¨ªtica.
Mi respuesta es siempre la misma: nos comprometimos con el electorado a no hacer una pol¨ªtica de alianzas y respetaremos nuestro compromiso. Fuimos elegidos con la condici¨®n de que gobernar¨ªamos solos y honraremos nuestro compromiso ante el electorado.
-En las pr¨®ximas elecciones municipales de diciembre es posible una alianza entre el Partido Popular Democr¨¢tico (centro) y el Centro Democr¨¢tico (derecha). ?Los socialistas no har¨¢n alianzas ni siquiera a nivel local?
-Ya definimos en la ¨²ltima reuni¨®n del Partido Socialista, hace una semana, una estrategia para las elecciones, municipales. Para las ?Asambleas municipales? y Ayuntamientos presentaremos listas del Partido Socialista. Para las ?Asambleas de fregues¨ªa (barrios)?, la ley permite la presentaci¨®n de listas no partidarias, es decir, de personalidades regionales, los llamados ?hombres buenos? de cada regi¨®n. El PS apoyar¨¢ listas de este tipo cuando est¨¦n integradas por personas con las que pueda y deba cooperar, independientemente de sus posiciones partidarias. Sin perjuicio de que en algunas parroquias importantes podamos presentar listas PS, particularmente en las grandes ciudades.
-En su discurso de presentaci¨®n del programa gubernamental en la Asamblea de la Rep¨²blica, usted dijo: ?Cunhal no mud¨® y no mudar¨¢ jam¨¢s? . ?Significa esto que es imposible una alianza entre socialistas y comunistas portugueses?
-Mientras el doctor Cunhal no cambie y sea dirigente del Partido Comunista Portugu¨¦s, es efectivamente eso lo que significa. Nosotros s¨®lo admitir¨ªamos revisar nuestra posici¨®n cuando nos convenci¨¦semos de que el Partido Comunista Portugu¨¦s se hab¨ªa convertido a la democracia pol¨ªtica. Para nosotros la democracia pol¨ªtica es una exigencia absoluta sin la que no podremos cooperar con eI PCP en t¨¦rminos globales. Ello no excluye que ocasionalmente realicemos una unidad de acci¨®n con este o aquel partido, independientemente de su estrategia global. Pero, globalmente, nosotros, para cooperar con el PCP tendr¨ªamos que convencernos previamente, y no es el caso, de que este partido respetar¨ªa la democracia pol¨ªtica y las libertades fundamentales.
El Partido Comunista Portugu¨¦s tiene una estrategia completamente diferente a la de los otros partidos de Europa Occidental: desprecia al eurocomunismo, en el que no cree, y a la democracia. parlamentaria, como recientemente manifest¨® Cunhal en una entrevista a un peri¨®dico de Belgrado. En el fondo, el PCP vive con la peligrosa ilusi¨®n de instalar en Portugal, una ?democracia popular? de estilo checo, y el pueblo portugu¨¦s, al contrario que Cunhal, no cree en las ?virtudes? de una tal ?normalizaci¨®n?.
-En las ¨²ltimas semanas se han producido en el pa¨ªs importantes cambios en la jerarqu¨ªa militar. El Consejo de la Revoluci¨®n fue tambi¨¦n remodelado. ?Hay en Portugal una real supremac¨ªa del poder civil sobre el poder militar?
-Sin duda que la elecci¨®n del presidente de la Rep¨²blica por sufragio directo y universal, y siendo la misma persona el presidente del Consejo de la Revoluci¨®n, representa en principio, la supremac¨ªa del poder civil sobre el poder militar. Adem¨¢s, los militares portugueses respetan hoy la Constituci¨®n y est¨¢n integrados en ella.
La constituci¨®n marca un per¨ªodo transitorio de cuatro a?os durante el cual existe el Consejo de la Revoluci¨®n, que tiene fundamentalmente dos grandes funciones: ¨®rgano de consejo del presidente de la Rep¨²blica y garante de la constitucionalidad de las leyes. Este ¨®rgano es transitorio, como indica la constituci¨®n. Un ¨®rgano de este tipo no existe en las democracias europeas pero ello se justifica en Portugal por las caracter¨ªsticas de nuestra revoluci¨®n en la actual fase.
-Usted defini¨® en cierta ocasi¨®n a la Constituci¨®n portuguesa como semipresidencialista. En este sentido, el presidente Eanes, ?podria ejercer poderes semejantes al del presidente franc¨¦s? ?Hay peligro de ?nasserismo? en el futuro portugu¨¦s?
-No veo ning¨²n peligro de ese tipo, porque el presidente Ramalho Eanes es, por encima de todo un dem¨®crata. Jur¨® cumplir la Constituci¨®n y la cumplir¨¢ integralmente.
La Constituci¨®n no apunta en ese: sentido, sino en el de la estricta separaci¨®n de los poderes. El presidente de la Rep¨²blica es el garante de la unidad nacional; es el representante superior del Estado portugu¨¦s. El ejecutivo es ejercido por el Gobierno, que tiene que ser simult¨¢neamente de confianza del presidente de la Rep¨²blica y de la Asamblea de la Rep¨²blica.
-Frecuentemente se habla de divergencias entre los socialistas portugueses de diversas alas. Seg¨²n los estatutos del Partido, ?alguna de estas alas podr¨ªa reivindicar su derecho de organizaci¨®n aut¨®noma en el pr¨®ximo Congreso?
-Seg¨²n los estatutos del partido, y creo que no ser¨¢n revisados en el pr¨®ximo congreso, en este particular las facciones est¨¢n prohibidas. Es normal que as¨ª sea pues, la existencia de facciones organizadas corno tales es una forma, de debilitar a los partidos socialistas. Esto no significa que queramos instalar el monolitismo en el partido, sino todo lo contrario, porque nosotros nos enorgullecemos de ser un partido pluralista.
Hay diferencias entre nosotros, diferentes sensibilidades y tendencias. Divergencias que asumimos y que son fecundas porque de su s¨ªntesis nace el fortalecimiento del partido, que es por su implantaci¨®n y por la expresi¨®n de sus votos, el mayor partido portugu¨¦s, con diferencia.
Estamos convencidos de que no habr¨¢ facciones, pero nuestro congreso ser¨¢ un congreso vivo, donde habr¨¢ un debate democr¨¢tico pleno. Estoy convencido de que se llegar¨¢ a una s¨ªntesis que refleje las opiniones del partido en su conjunto y contribuir¨¢ para su cohesi¨®n, tan necesaria a la experiencia gubernamental en curso.
-?C¨®mo se desarrollan en este momento las relaciones entre Espa?a y Portugal? M¨¢s all¨¢ de las declaraciones formales de ?amistad y no ingerencia en los asuntos internos?, ?su Gobierno ha previsto una mayor cooperaci¨®n econ¨®mica con Espa?a? ?Piensa fomentar la inversi¨®n espa?ola en Portugal?
-Pienso que el afirmar y respetar el principio de no ingerencia en los asuntos internos no es una declaraci¨®n formal. En estos dos a?os posteriores a la revoluci¨®n de abril ha sido una pr¨¢ctica efectiva y fecunda, entre los dos pa¨ªses.
Las relaciones existentes son buenas, independientemente de las diferencias pol¨ªticas y sociales entre los dos pa¨ªses. Estas relaciones incluso se han estrechado. Son deseables todas las formas de cooperaci¨®n, muchas de ellas ya existen, pero deben ser desarrolladas.
Yo he dicho ya varias veces que el Pacto Ib¨¦rico es un instrumento absoluto y que es necesario establecer un tratado entre Portugal y Espa?a que vuelva m¨¢s ¨ªntima la cooperaci¨®n entre dos pa¨ªses peninsulares, en una perspectiva de integraci¨®n en Europa a la que ambos pa¨ªses pertenecen.
Por otro lado no hay nada que impida las inversiones de los empresarios espa?oles en Portugal y de los portugueses en Espa?a. Adem¨¢s, las anunciadas reformas en el C¨®digo de Inversiones Extranjeras va a permitir y facilitar estas inversiones no s¨®lo de espa?oles sino de todos los extranjeros. Por otro lado las facilidades se refieren a inversores p¨²blicos y privados.
- ?Tiene prevista alguna entrevista con el presidente espa?ol Su¨¢rez, o alguna visita a Espa?a?
-No tengo prevista ninguna visita a Espa?a ni encuentro alguno con el presidente espa?ol, pero, evidentemente, tendr¨ªa mucho gusto en entrevistarme con ¨¦l y ciertamente de ello podr¨ªa resultar algo positivo.
-Volviendo, al tema del Pacto Ib¨¦rico, ?el Gobierno portugu¨¦s tiene alguna propuesta concreta para sustituir el Pacto Ib¨¦rico?
-Por conducto diplom¨¢tico hemos tenido varios cambios de impresiones sobre el tema. Por esta v¨ªa llegaremos r¨¢pidamente a concreciones importantes.
-El Partido Socialista Portugu¨¦s mantiene relaciones con dos partidos socialistas espa?oles: el Partido Socialista Obrero Espa?ol y el Partido Socialista Popular. Por otro lado, Santiago Carrillo asisti¨® al congreso de su partido en diciembre de 1974. ?Qu¨¦ tipo de relaciones mantiene con estos partidos?
-Nosotros estamos con el PSOE en la Internacional Socialista, y eso nos crea relaciones de gran fraternidad y proximidad, desde hace muchos a?os. En los ¨²ltimos tiempos he intensificado las relaciones con Felipe Gonz¨¢lez al que considero un dirigente socialista de gran futuro; un hombre al que incumbir¨¢n grandes responsabilidades en Espa?a a corto plazo.
Por otro lado, yo tengo viejas relaciones de amistad con el profesor Tierno Galv¨¢n y con Ra¨²l Morodo, pero el Partido Socialista Popular no est¨¢ en la Internacional Socialista. Nos gustar¨ªa y lo hemos dicho muchas veces, que si no puede haber unidad entre estos dos partidos, hubiese al menos una coordinaci¨®n. Consideramos que la unidad entre los socialistas es una condici¨®n del desarrollo a corto plazo de la democracia en Espa?a.
Evidentemente nuestra pol¨ªtica en t¨¦rminos partidarios es la de respetar a nuestros partidos hermanos y de no intervenir en sus problemas, aunque somos solidarios con los socialistas espa?oles en su esfuerzo por encontrar una coordinaci¨®n y una unidad.
Por otro lado existen relaciones con el Partido Comunista Espa?ol. Hasta a nivel personal. Yo mismo, con Santiago Carrillo, mantengo relaciones. Hemos dicho varias veces, no es una sorpresa, que siempre hemos encontrado por parte de Santiago Carrillo una comprensi¨®n en relaci¨®n a los problemas portugueses. Igual ocurre con el l¨ªder de los comunistas italianos, Berlinguer. Esta comprensi¨®n, desgraciadamente, no la encontramos en los comunistas portugueses.
-?Estos partidos espa?oles ser¨¢n invitados al congreso del Partido Socialista Portugu¨¦s que se celebrar¨¢ a finales de octubre?
-Efectivamente, tuvimos que adelantar un mes la celebraci¨®n de nuestro congreso, al tener conocimiento de la fecha de las elecciones municipales de diciembre.
El Partido Socialista Obrero Espa?ol ser¨ªa por supuesto invitado y si este partido no ve inconveniente, nos gustar¨ªa que asistiesen Tierno Galv¨¢n, Ra¨²l Morodo y otros dirigentes del Partido Socialista Popular. Tambi¨¦n nos gustar¨ªa tener en nuestro congreso representantes del Partido, Comunista de Espa?a ya que siempre hemos mantenido buenas relaciones.
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