Palmete, barriada ilegal, pide soluciones al Ayuntamiento

, Tras unos meses de relativo silencio, se ha vuelto a dinamizar la vieja pol¨¦mica sobre la barriada ilegal sevillana de Palmete. El mayor esc¨¢ndalo urban¨ªstico de los ¨²ltimos cuarenta a?os en una ciudad millonaria en experiencias de este tipo, como consecuencia del empeoramiento de las condiciones de vida de los 20.000 habitantes de la barriada asentados en una superficie de 600.000 metros cuadrados y que infringen el plan general de ordenaci¨®n urbana y todas las disposiciones oficiales sobre la materia, al haber edificado, las 5.000 familias residentes en la zona, sus viviendas sobre un terreno calificado como r¨²stico, sin la obligada licencia de obras y, por tanto, sin el m¨¢s leve equipamiento de servicios.

La edificaci¨®n de las primeras casas y por consiguiente el inicio de una pol¨¦mica p¨²blica que ha producido infinitos comentarios y art¨ªculos en la prensa local, incoaci¨®n de expediente administrativo por un importe superior a los 550 millones de pesetas en multas y ceses y dimisiones en el Ayuntamiento. Se inici¨® en 1968: como consecuencia de la di¨¢spora rural hacia las grandes concentraciones urbanas, signo de aquellos tiempos. Familias enteras de los pueblos vecinos arribaban a Sevilla para probar fortuna en pos de una vida mejor, encontr¨¢ndose, por desgracia para ellos, con una ciudad que presentaba un impresionante d¨¦ficit de viviendas que imposibilitaba la absorci¨®n de este movimiento migratorio interno. Hacinados aqu¨ª y all¨¢, un d¨ªa descubrieron que los hermanos Torres Calvi, propietarios de una finca llamada Palmete ubicada en el extremo Este de la ciudad, vend¨ªan parcelas de setenta metros cuadrados al precio de 390 pesetas por metro cuadrado. All¨ª acudieron y adquirieron sus parcelas, en cuya superficie seg¨²n las disposiciones vigentes, s¨®lo se pod¨ªan realizar plantaciones agr¨ªcolas, y a pesar de que la ley del suelo proh¨ªbe que se vendan menos de 2.500 metros cuadrados de una finca r¨²stica, que es la m¨ªnima unidad de cultivo de una superficie agr¨ªcola. Por tanto, en contra de lo que alegaron los propietarios a la hora de las responsabilidades, las parcelas no pod¨ªan ser destinadas a la faena agr¨ªcola. Evidentemente, ning¨²n comprador de parcela pens¨® nunca dedicarse a las tareas agr¨ªcolas en aquella extensi¨®n de setenta metros. Comenzaron a edificar sus viviendas ellos mismos, trabajando siempre de noche, sin la m¨¢s leve racionalizaci¨®n urban¨ªstica, y cuando el Ayuntamiento, sevillano quiso reaccionar, oficialmente m¨¢s de quinientas viviendas que albergaban a 2.000 personas se hab¨ªan levantado en el lugar. Estall¨® el esc¨¢ndalo, pero el ¨ªndice de construcci¨®n segu¨ªa aumentando, y la familia propietaria de la finca vendi¨® parcelas de setenta metros cuadrados a 27.300 pesetas la unidad, lo que le produjo unos ingresos superiores a los 150 millones de pesetas.Cuando estall¨® el esc¨¢ndalo, el Ayuntamiento comenz¨® a sancionar a los constructores-propietarios de las viviendas al tiempo que denunciaba al Ministerio de Obras P¨²blicas la actuaci¨®n de los hermanos Torres Calvi.

En el a?o 1971, la Delegaci¨®n Provincial del Ministerio inicia los expedientes sancionadores por un importe de veinti¨²n millones de pesetas que deber¨¢n pagar los propietarios de Palmete con motivo de las parcelaciones. Tras un largo per¨ªodo de tiempo en el cual insistentemente el Ministerio recaba una informaci¨®n m¨¢s amplia por parte del Ayuntamiento y que trae como consecuencia la apertura de un expediente a un funcionario municipal, que era el encargado de facilitar dicha informaci¨®n. El 15 de abril de 1974 se diligencia el primer expediente sancionador, por valoraci¨®n de costos y beneficios, as¨ª como por da?os y perjuicios, por importe de 197.317.757 pesetas y referido al sector Palmete Padre P¨ªo. Inmediatamente despu¨¦s se suceden los restantes, que representan la cantidad de 101.441.368 pesetas para el sector de La Doctora, 249.580.138 pesetas para San Jos¨¦ de Palmete y finalmente, un total de 28.239.568 pesetas para el sector La Negrilla. En total, el Ministerio exige de los vendedores de las parcelas unas responsabilidades materializadas en 567 millones de pesetas en multas.

Una vez aprobadas por el Consejo de Ministros las sanciones propuestas por el Ministerio, los hermanos Torres Calvi adujeron que desconoc¨ªan cuando vendieron las parcelas y el empleo que los compradores proyectaban hacer de los terrenos. Contra las sanciones, los inculpados interpusieron recurso contencioso administrativo ante el Tribunal Supremo, el cual est¨¢ pendiente de fallo.

Condiciones humanas

Mientras este contencioso legal se produc¨ªa, los habitantes de Palmete han vivido unas condiciones f¨¢cilmente imaginables. Desprovistos de los m¨¢s elementales servicios, sin pavimentaci¨®n en las calles, carencia de escuelas, sin agua, la barriada ha sido desde su nacimiento un foco de enfermedades infecciosas, del que es v¨ªctima la poblaci¨®n infantil al consumir como agua potable la contenida en el cami¨®n cisterna que distribuye el l¨ªquido elemento, por concesi¨®n del Ayuntamiento tras numerosas gestiones de los vecinos, y es que el municipio sevillano, oficialmente, ha ignorado otras numerosas gestiones y durante a?os, la existencia de Palmete.Actualmente, todas las tensiones acumuladas durante estos a?os han alcanzado una vigorizaci¨®n como consecuencia del paro que se abate sobre Sevilla y el estado calamitoso de los cuatro sectores de que consta la barriada, debido a las abundantes lluvias registradas en las ¨²ltimas semanas.