Callaghan y Schmidt se re¨²nen hoy en Londres

La entrevista que Schmldt y Callaghan sostendr¨¢n hoy en la residencia de descanso del primer ministro brit¨¢nico se inscribe en la serie de contactos que ambos estadistas est¨¢n llevando a cabo.En esta ocasi¨®n, el encuentro cobra una significaci¨®n nueva. Servir¨¢ para que Callaghan haga resumen de lo que ha supuesto para su pa¨ªs la ayuda econ¨®mica que en los ¨²ltimos tiempos le ha prestado el Gobierno del canciller Schmidt. Sin su.Intervenci¨®n en los momentos en que el Fondo Monetario internacional decidi¨® la concesi¨®n de un cr¨¦dito de 4.000 millones de d¨®lares al Reino Unido, y sin el benepl¨¢cito de la Administraci¨®n de Ford, aquel cr¨¦dito se hubiera pospuesto, a pesar de las garant¨ªas dadas por el gabinete de Callaghan en cuanto a la reducci¨®n de su gasto p¨²blico.

El efecto que sobre la econom¨ªa brit¨¢nica ha tenido esa ayuda ya se ha comenzado a manifestar. La firmeza de la libra esterlina ha hecho que el.Banco de Inglaterra reconsidere el tipo de inter¨¦s que hab¨ªa impuesto en octubre para evitar la fuga alarmante de divisas. En aquella ocasi¨®n, el tipo de inter¨¦s bancario se situ¨® en un 15 %, que era una cifra que no ten¨ªa precedentes. El lento regreso a la normalidad de la econom¨ªa de Gran Breta?a le ha permitido al banco principal del Reino Unido una nueva reducci¨®n, que deja aquel tipo de inter¨¦s en un 13-1/4%.

Sin embargo, la inflaci¨®n sigue su curso ascendente. En diciembre subi¨® en un 1 % con respecto al mes anterior. Ahora est¨¢ situada en un 15,2 %. La culpa fue, sobre todo, del precio de los alimentos, que subieron de modo alarmante durante el per¨ªodo de Navidades.

La gratitud brit¨¢nica

El incremento del ¨ªndice de inflaci¨®n durante estos meses hab¨ªa sido prevista por la Administraci¨®n brit¨¢nica y, por tanto, esta perspectiva no va a ensombrecer el d¨ªa que Schmldt y Callaghan van a pasar juntos, acompa?ados, entre otros, de sus ministros de Defensa y de Econom¨ªa. La gratitud de Gran Breta?a hacia el Gobierno de Schmidt facilitar¨¢el cumplimiento del deseo del canciller alem¨¢n, que quiere que estos contactos con su aliado londinense se intensifiquen, sobre todo en un per¨ªodo en el que, como ha dicho el propio Schrrildt y ha explicado Walter Mondale, ?la llegada de Carter a la presidencia norteamericana reclama un replanteamiento de la pol¨ªtica econ¨®mica corriunitaria?.Este de hoy es el primer encuentro que tiene Schmldt con Callaghan desde que el canciller alem¨¢n visit¨® en Espa?a al Rey don Juan Carlos y al presidente Su¨¢rez. El primer ministro brit¨¢nico habl¨® hace menos de dos meses de las esperanzas que tiene su Gobieno de ver cuanto antes c¨®mo se establece en Madrid una democracia. Fue la primera vez que un primer ministro laborista de la posguerra se refer¨ªa a Espa?a en aquel sentido. Se puede suponer ahora que Callaghan aprovechar¨¢ el conocimiento que Schmidt tiene del tenia para confirmar si sus esperanzas ten¨ªan alg¨²n fundamento.