"El C¨®digo Penal Espa?ol desconoce importantes derechos del hombre"
?El centro de importancia del derecho penal, ya no es el delito ni el delincuente, sino la delincuencia considerada como un todo complejo, distinto de la suma de esos dos elementos. La delincuencia, incluye principalmente las estructuras (econ¨®micas, sociales y pol¨ªticas) injustas de la sociedad. De esas leyes injustas, se ocupan las declaraciones de los derechos humanos, cuando piden que se establezca un r¨¦gimen de Derecho, a fin de que el hombre no se vea compelido al supremo recurso de la rebeli¨®n contra la tiran¨ªa y la opresi¨®n. No son justas las leyes que no respeten los derechos del hombre y adem¨¢s no representan la justicia ni la voluntad del pueblo, que es la base de la autoridad, sino al grupo de presi¨®n que las elabora, las promulga y las impone?, manifest¨® el profesor Antonio Berista¨ªn, jesuita, director del departamento de Derecho penal de la facultad de Derecho de San Sebasti¨¢n.El profesor Berista¨ªn, promotor del Instituto Vasco de Criminolog¨ªa (Ivac), dio recientemente, una conferencia en Pamplona sobre la pena de muerte. En su conversaci¨®n con EL PAIS, resalt¨® el desfase del Derecho Penal espa?ol, afirmando que ?no s¨®lo viola sino que desconoce importantes derechos del hombre en algunos puntos de los principios b¨¢sicos (legalidad, culpabilidad y humanitarismo) de la parte general -el delito, la pena y las medidas penales- y de la parte especial, sobre todo de los art¨ªculos relativos a las libertades pol¨ªticas y a derechos sociales, tan fundamentales como la propiedad, la econom¨ªa p¨²blica, la libertad sexual, la de asociaci¨®n y reuni¨®n, etc¨¦tera?.
?La legislaci¨®n penal y sus controles sociales, son frutos de la historia y de las convenciones sociales refrendadas por la clase dirigente y dominante. ?Por qu¨¦ no se considera delictiva la venta de alcohol y si la venta de drogas? ?Por qu¨¦ se considera delito a cualquier relaci¨®n sexual de la mujer casada, pero no la del marido, ni a ciertos negocios de algunas sociedades an¨®nimas con excesos lucrativos, ni el mantener secreta las listas de tributaci¨®n fiscal? El delito es una realidad hist¨®rica y convencional. El aborto, la blasfemia, el uso de anticonceptivos, ha dejado de ser delito en muchos pa¨ªses. Hay otras acciones que son delitos -no convencionales- pero no se persiguen. Ah¨ª est¨¢n las acciones de ciertas personas que usan del poder y ejercen delictivamente la autoridad, las torturas policiales, los fraudes fiscales, la especulaci¨®n del suelo, etc¨¦tera. Los controles sociales de muchos Estados, no tipifican de hecho esas sanciones como delitos, en contra de lo que pudi¨¦ramos llamar c¨®digo de los Derechos Humanos.?
Factores pol¨ªticos
Para Berista¨ªn, el delito no es s¨®lo la conducta del delincuente, sino principalmente la confluencia de factores pol¨ªticos, sociales y econ¨®micos. ?Hay que disminuir -a?ade- el n¨²mero de delitos tipificados en las leyes. Hoy en d¨ªa padecemos de hipertrofia de legislaci¨®n penal. Urge reducir y cambiar los controles sociales, apoy¨¢ndolos en los derechos humanos m¨¢s que en las leyes de cada pa¨ªs. Urge, tambi¨¦n, lograr la unidad de la administraci¨®n penitenciaria, excluyendo las administraciones penitenciarias especiales, como la can¨®nica, la militar, la empresarial. Para esclarecer los problemas referentes a las sanciones, privativas de libertad, he solicitado la celebraci¨®n del IV Congreso Nacional. El ¨²ltimo tuvo lugar en 1920.?
En relaci¨®n a la actitud de la Iglesia con respecto a la pol¨ªtica, Berista¨ªn, afirma que est¨¢ con la postura de Jos¨¦ Mar¨ªa D¨ªez Alegr¨ªa. ?Creo que se puede ser cat¨®lico y socialista, e incluso marxista, a un tiempo. Marx y el marxismo tienen mucho que ense?ar a ciertos cristianos, por ejemplo, a los que se limitan a o¨ªr misa. Estoy de acuerdo con Helder C¨¢mara, cuando le escrib¨ªa a Garaudy: ?Nosotros los cristianos debemos proclamar p¨²blicamente que el capitalismo es intr¨ªnsecamente perverso, pero no el socialismo. La revoluci¨®n no tiene un v¨ªnculo esencial, sino s¨®lo hist¨®rico, con el materialismo y el ateismo. La revoluci¨®n es consustancial al cristianismo... ?
Por lo que respecta al Instituto Vasco de Criminolog¨ªa, del que Berista¨ªn es uno de sus promotores, afirm¨® que pretende colaborar para la formaci¨®n de la futura Universidad vasca, para lo cual ya est¨¢ colaborando con las instituciones universitarias que existen en Euzkadi. ?La Universidad vasca, concluy¨®, tiene que ser el v¨ªnculo que una a los vascos, eliminando todas las luchas sociales y pol¨ªticas que en estos momentos dividen a Euzkadi.?
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