Trabas de Francia e Italia a la ampliaci¨®n de la CEE

A medida que se aproxima la eventual candidatura de Espa?a al ingreso en el Mercado Com¨²n, Francia e Italia agudizan su ofensiva para defender el sector agr¨ªcola de la CEE contra la ampliaci¨®n.El propio presidente franc¨¦s, Valery Giscard d'Estaing, lo record¨® anoche en su discurso de Carpentras: ?Francia est¨¢ dispuesta a ayudar a ciertos pa¨ªses a entrar en la CEE, pero sin sacrificar los intereses de los agricultores franceses.? A?adi¨® que Francia solicitar¨¢ una reforma de la ?Europa verde?, especialmente en los reglamentos que afectan a las producciones mediterr¨¢neas, frutos, legumbres y vinos, en particular.

En id¨¦ntico orden de ideas se hab¨ªa pronunciado, dos d¨ªas antes, el primer ministro franc¨¦s, Raymond Barre, ante los representantes de las federaciones agr¨ªcolas francesas, reunidos en su s¨¦ptima asamblea anual. Con mayor precisi¨®n que Giscard, Barre cit¨® el caso concreto de la candidatura griega, actualmente en negociaci¨®n en Bruselas. ?Francia se esforzar¨¢ para obtener medidas transitorias que protejan a los productores de los peligros de una perturbaci¨®n del mercado?, dijo el primer ministro franc¨¦s ante los agricultores.

La ?ofensiva? gala se coordina con otra italiana, m¨¢s radical si cabe, que la prevista por los pol¨ªticos franceses. Los representantes italianos presentaron el viernes a la comisi¨®n de las Comunidades Europeas, en Bruselas, un memor¨¢ndum para la reforma de la pol¨ªtica agr¨ªcola com¨²n de la CEE en el sector de productos mediterr¨¢neos. La tesis de Roma es que la ampliaci¨®n de la CEE s¨®lo puede aceptarse si Italia obtiene contra partidas para su agricultura.

Los italianos quieren que juegue la ?preferencia comunitaria? cuando los pa¨ªses del norte de la CEE deban aprovisionarse de productos agr¨ªcolas de origen mediterr¨¢neo (frutos y legumbres, agrios y vinos) y no aumenten sus importaciones originarias de pa¨ªses terceros. Italia se abastece exclusivamente de carne bovina, az¨²car, productos l¨¢cteos y cereales, producidos en pa¨ªses del norte de la CEE. El ejemplo debe ser seguido cuando se trate de suministro de productos de origen meridional.

El ?memorandum? italiano pide una revisi¨®n de varias organizaciones de mercado (de productos originarios del agro mediterr¨¢neo), un sistema de subvenci¨®n y primas para la transformaci¨®n de ciertos productos, una extensi¨®n de las subvenciones comunitarias a favor de los proyectos de modernizaci¨®n de estructuras agr¨ªcolas y de programas de regad¨ªo, y la aplicaci¨®n de medidas destinadas a estimular el consumo de vino en la CEE.

Desde un punto de vista pr¨¢ctico, los expertos agr¨ªcolas de la CEE temen que Italia y Francia mantendr¨¢n sus reservas y, en definitiva, su boicot a toda nueva concesi¨®n agr¨ªcola a pa¨ªses no miembros del Mercado Com¨²n, y no ceder¨¢n en materia de ampliaci¨®n si no obtienen contrapartidas.

Afortunadamente, el resto de pa¨ªses de la CEE, que tambi¨¦n cuentan a la hora de definir la pol¨ªtica de ampliaci¨®n, consideran que, a largo plazo, la extensi¨®n de la CEE hacia el sur ser¨¢ positiva para el conjunto del proceso de unificaci¨®n europea. Ser¨¢n ellos los ?aliados? de las candidaturas de Grecia, Espa?a y Portugal en el largo camino de estos tres pa¨ªses hacia el Mercado Com¨²n.