Dif¨ªcil soluci¨®n

Con el final del Tour se ha producido un nuevo esc¨¢ndalo en el debatido tema del doping. Al tratarse de la primera prueba por etapas del mundo, aunque tenga ya tantos problemas como cualquier otra, es posible que al menos haya servido para llenar un poco m¨¢s el vaso de una situaci¨®n a punto de desbordarse.La dif¨ªcil, sin embargo, es c¨®mo se va a solucionar algo tan complicado. En principio, y fundamentalmente, porque el ciclismo en la actualidad gira alrededor de la publicidad y el dinero. Ello trae como consecuencia que la dureza del deporte se debe mantener para darle inter¨¦s y los corredores, como poco, se tendr¨¢n que seguir estimulando o ?sobrealiment¨¢ndose? para resistirlo.

Entonces se llega al punto de d¨®nde termina el estimulante y d¨®nde comienza el drogarse. Con el agravante, adem¨¢s, de que la Uni¨®n Ciclista Internacional tiene entre sus productos prohibidos algunos que entran normalmente en los jarabes m¨¢s simples para curar catarros o bronquitis, que puede sufrirlas hasta un ni?o y no digamos un ciclista, al realizar un esfuerzo tremendo a la intemperie. La necesidad, pues, de un an¨¢lisis cuantitativo, parece evidente. Un miligramo de efedrina no es lo mismo que un gramo en el organismo.

Ahora bien, aparte ya de los trucos que siempre han utilizado los ciclistas para eludir el control antidoping; aparte de que los modestos o sin posibilidades siempre salen m¨¢s perjudicados que los ?grandes?, como ha ocurrido en el reciente Tour; aparte del descontrol, sin m¨¦dicos, con que muchos corredores se administran estos productos, con sus graves consecuencias posibles e incluso aparte de la discriminaci¨®n en la realizaci¨®n del control antidoping, en el ciclismo, con respecto a otros deportes -aunque precisamente su dureza no se puede olvidar que lo ha hecho l¨®gico-, el gran problema es que ese an¨¢lisis cuantitativo tambi¨¦n llegar¨ªa ahora tarde. Hay ya demasiados ?est¨ªmulos? nuevos -el Powels, por ejemplo- y los controles se pueden convertir, a este paso, en eternos. ?A qu¨¦ carta quedarse ya?