Espa?a, novena tras ganar a Finlandia
Espa?a ha cerrado este campeonato de ingrato recuerdo con la victoria m¨¢s clara conseguida en ¨¦l, pero nada puede remediar la p¨¦sima actuaci¨®n a lo largo de los siete encuentros disputados. Ayer se consigui¨® un resultado normal porque el equipo jug¨® el baloncesto m¨¢s puro: tirar y tirar, desechando las t¨¢cticas y los sistemas; y como tanto individualmente como en bloque los finlandeses son infinitamente inferiores a los espa?oles, el resultado no pod¨ªa ser otro que el que registr¨® el marcador al final del tiempo reglamentario.D¨ªaz Miguel se decidi¨® por dar oportunidad a los que no jugaron habitualmente, excepci¨®n hecha y no se comprende por qu¨¦- de Gonzalo Sagi-Vela, que apenas ha sido empleado. As¨ª, el partido lo mantuvieron De la Cruz, Fern¨¢ndez, Rull¨¢n, Margall y Corbal¨¢n, y luego entrar¨ªa Flores. El equipo funcion¨® bien desde el principio y aunque le cost¨® trabajo el despegarse en el marcador siempre se mantuvo un margen de cinco puntos al menos. As¨ª se lleg¨® al descanso con 48-43 favorable.
En la segunda mitad el contraataque, que siempre ha sido una de las armas m¨¢s eficaces del conjunto espa?ol y ahora pr¨¢cticamente olvidado por culpa de los sistemas que nos han perdido, rehabilit¨® al equipo y lo llev¨® hasta un triunfo merecido y justo que le da el noveno lugar en la clasificaci¨®n general, muy lejos del que se debiera ocupar. Espa?a ha terminado este nefasto XX Campeonato de Europa como la gran derrotada y acaso tambi¨¦n como la gran fracasada.
Yugoslavia, justa campeona
Yugoslavia ha vencido con todo merecimiento al equipo de la Uni¨®n Sovi¨¦tica por 74-61. Los yugoslavos han dominado durante todo un partido que se ha desarrollado con defensas muy fuertes, de ah¨ª el escaso tanteo habido. Comenz¨® el partido con unas defensas a ultranzas y el marcador se mantuvo durante los diez primeros minutos con ligeros vencimientos hacia uno y otro lado de dos puntos. A partir del minuto diez los yugoslavos tomaron el mando en el marcador con m¨¢s fuerza para no abandonarlo hasta el final del encuentro.
En la segunda parte se mantuvo la diferencia de quince puntos obtenida en la primera mitad y s¨®lo hubo un ligero acercamiento de los sovi¨¦ticos.
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