No dan una
Estamos -y no descubrimos nada nuevo- en que la seriedad de un festejo taurino depende en gran medida del palco. Cuando en ¨¦l se sientan presidentes con afici¨®n, conocedores del reglamento, y dotados de criterio, no hay ning¨²n problema.As¨ª ocurri¨® en las dos primeras corridas de la feria, que presidieron los comisarios Corominas y Pajares. Pero el lunes, con Mantec¨®n, ya vino el l¨ªo. Y ayer, al nuevo presidente, cuyo nombre sentimos no conocer, se le, advirtieron unas desigualdades y un variante criterio francamente peligroso para estas tareas.
Porque si bien devolvi¨® al corral el toro cojo sin necesidad de que se armara la marimorena, envi¨® un aviso puntual a Ortega Cano mientras se los perdonaba con mucho a D¨¢maso Gonz¨¢lez, aunque rebas¨® en bastantes segundos el tiempo reglamentario en dos ocasiones. Y deneg¨® una oreja pedida por buena parte del p¨²blico -no mayor¨ªa, desde luego- para concederla en otro toro con a¨²n mucha menor petici¨®n.
Unos por otros, est¨¢n en el palco que no dan una. Y como cada presidente trae sus preferencias, ni la afici¨®n, ni los toreros, puede ser que ni los ganaderos ni la empresa misma, saben a qu¨¦ atenerse.
Lo cual plantea una vez m¨¢s la necesidad de que se institucionalice, de una vez, el colegio nacional de presidentes. No importar¨ªa que fueran, como hasta ahora, funcionarios de polic¨ªa, pero su designaci¨®n no deber¨ªa quedar al arbitrio del juez superior, o del director general de Seguridad, sino responder a unas especificaciones mediante las que estuviera garantizada la competencia. Y adem¨¢s habr¨ªan de estar sujetos a premios y sanciones.
No es normal que haya un reglamento rico en sanciones, incluso pecuniarias, para todos cuantos intervienen en el espect¨¢culo cuando infringen el articulado, con la sola excepci¨®n de los presidentes que son, precisamente, quienes tienen la mayor responsabilidad en el exacto cumplimiento de ese mismo reglamento.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.