Un triste primer lugar

Andaluc¨ªa es la regi¨®n espa?ola que cuenta con mayor n¨²mero de parados, alcanzando cotas -hasta en las estimaciones oficiales, que siempre son muy inferiores a la realidad- de extrema gravedad. Mientras los niveles nacionales de desempleo se sit¨²an, seg¨²n los ¨²ltimos datos facilitados por el Ministerio de Trabajo, correspondientes a 31 de marzo ¨²ltimo, en el 5,85% de la poblaci¨®n activa, en todas las provincias andaluzas se superaba ampliamente el 10%.Las provincias con mayor tasa relativa de paro sobre su poblaci¨®n activa son Sevilla y M¨¢laga, seg¨²n las citadas fuentes, con el 14,7 % el 13,38%, respectivamente.

Las estimaciones de las centrales sindicales son a¨²n m¨¢s alarmantes Seg¨²n la Federaci¨®n de Trabajadores de la Tierra de UGT y con respecto al sector agrario, uno de los m¨¢s afectados por la crisis, el desempleo a finales de marzo en de 9.000 personas en Almer¨ªa, de 15.000 en C¨¢diz, de 16.000 el C¨®rdoba, de 11.000 en Granada de 5.500 en Huelva, de 20.000 en Ja¨¦n, de 9.000 en M¨¢laga y de 26.000 en Sevilla. En total, seg¨²n esta central, 111.500 jornaleros.

Por otra parte, el llamado paro registrado (inscripciones en las oficinas de empleo) demuestra -un incremento del 228% en el sector agrario entre enero de 1977 y enero de 1978 y en un 32% entre enero mayo del presente a?o.

La situaci¨®n de estos parados es a¨²n m¨¢s grave al discriminar la Seguridad Social agraria de determinados beneficios, especialmente los relativos a prestaciones de desempleo, a los trabajadores de este sector con respecto a los acogidos al r¨¦gimen general, y ello a pesar de existir una cotizaci¨®n efectiva y ser declarados en situaci¨®n de paro involuntario. Las ayudas que se les atribuyen bajo el llamado empleo comunitario -subvenciones para trabajos de inter¨¦s general (limpieza de acequias, arreglo de caminos, etc¨¦tera)- son insuficientes en cuant¨ªa y se agotan -de dos los niveles de paro- a los poco d¨ªas de concederse.

La grave crisis de la construcci¨®n, sector que tradicionalmente absorb¨ªa, junto con la emigraci¨®n, buena parte de los desempleados, del campo entre campa?as, por a¨²n tintas m¨¢s dram¨¢ticas a la situaci¨®n de los jornaleros. En el segundo trimestre del presente a?o seg¨²n estimaciones de UGT, en Espa?a habr¨¢ 184.500 parados agr¨ªcolas, de los que 113.500 corresponder¨¢n a las ocho provincias.