Infernal es la palabra

Tengo entendido -porque no lo he le¨ªdo-, que Roger Zelazny es un interesante autor de ciencia-ficci¨®n. En cualquier caso, este Callej¨®n infernal, basado en su novela Damnation Alley, es un bodrio absolutamente deleznable. Seg¨²n Jack Smight, la destrucci¨®n del planeta no debe preocuparnos demasiado, si no es por el incremento de las cucarachas. Por lo dem¨¢s, casi todo permanecer¨¢ igual: los buenos, buenos; los malos, malos, y los tontos, tontos. Hasta la televisi¨®n seguir¨¢ funcionando. A los protagonistas de Callej¨®n infernal la tercera guerra mundial les deja fr¨ªos. No es que sean duros, no... Es que son unos absolutos est¨²pidos. En el m¨¢s puro estilo televisivo, Smight nos narra el viaje de un reducido grupo, supervivientes de una base de lanzamientos de misiles, a Albany, ¨²nica ciudad con vida que conocen. La escena de la llegada final es de una pobreza y una falta de imaginaci¨®n totales y provoc¨® una merecida pitada por parte del aburrido e irritado p¨²blico.