La Ford negocia una inversi¨®n en Espa?a de 500 millones de d¨®lares
Fuentes pr¨®ximas a la compa?¨ªa Ford confirmaron ayer que la segunda empresa automovil¨ªstica del mundo est¨¢ estudiando la posibilidad de realizar una fuerte inversi¨®n en Espa?a de la envergadura de la que en estos ¨²ltimos cuatro a?os se ha llevado a cabo en Almusafes.Seg¨²n fuentes de la propia empresa y de algunos sectores gubernamentales, la multinacional americana ha expuesto recientemente deseos de ampliar sus inversiones en Espa?a con objeto de aumentar su capacidad de fabricaci¨®n de autom¨®viles, que actualmente es de unas 280.000 unidades anuales. La inversi¨®n realizada por la Ford en su planta de Almusafes (Valencia) supera los quinientos millones de d¨®lares, y la inversi¨®n proyectada podr¨ªa ser de similar cuant¨ªa e incluso superior.
Las conversaciones entre representantes de la empresa y del Gobierno se centran en estos momentos en analizar la posibilidad de revocar los obst¨¢culos legales y de otro tipo que se oponen al proyecto de nueva inversi¨®n de la Ford en Espa?a. Las negociaciones que preludiaron la instalaci¨®n de Ford en Espa?a se iniciaron en el a?o 1971, y la autorizaci¨®n oficial para que la empresa invirtiera fue con cedida en los ¨²ltimos d¨ªas del a?o 1972.
La legislaci¨®n que se aprob¨® en aquella fecha preve¨ªa la entrada de nuevos fabricantes de autom¨®viles en el pa¨ªs siempre que reunieran una serie de condiciones, entre las que destacaban la exigencia de un fuerte porcentaje dedicado a la exportaci¨®n y un elevado grado de nacionalizaci¨®n en los veh¨ªculos fabricados, de forma que las piezas importadas para producirlos deber¨ªan reducirse a porcentajes muy bajos.
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El Gobierno estudia una mayor liberalizaci¨®n del sector del autom¨®vil
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?stas dos limitaciones (concretamente la Ford no puede vender en el mercado interior m¨¢s del 10% de los veh¨ªculos matriculados en el pa¨ªs el a?o anterior), constituyen un serio obst¨¢culo para la empresa, seg¨²n fuentes de Ford en Espa?a.
La remoci¨®n de estos obst¨¢culos legales supone instrumentar unas nuevas disposiciones, que modifiquen el marco en que se desenvuelve la industria automotriz espa?ola, en unos momentos en que varias compa?¨ªas multinacionales intentan tomar participaciones o ampliar las ya existentes en el pa¨ªs. El cambio de legislaci¨®n podr¨ªa responder, seg¨²n fuentes del sector, a una mayor internacionalizaci¨®n del sector del autom¨®vil en nuestro pa¨ªs, abandonando la concepci¨®n nacionalista en favor de una m¨¢s estrecha dependencia de las filiales espa?olas respecto a las casas matrices y licenciatarias del exterior.
Seg¨²n medios del sector, un segundo grupo de obst¨¢culos que se opondr¨ªan a la entrada de Ford con esta nueva inversi¨®n radica en la actitud que el Instituto Nacional de Industria mantenga en sus empresas participadas dentro del sector automotriz. La salida completa del INI de SEAT ser¨ªa bien vista por la Ford, seg¨²n una persona vinculada a esta ¨²ltima empresa, ya que vendr¨ªa a demostrar el inter¨¦s del Gobierno por mantener una mayor neutralidad ante este sector industrial y las empresas que en ¨¦l act¨²an, sin relaciones privilegiadas.
Fuentes pr¨®ximas a Ford han asegurado, por otra parte, que la compa?¨ªa necesita planear una fuerte inversi¨®n para aumentar su presencia en los mercados europeos de cara a los pr¨®ximos a?os y que existen diversas localizaciones alternativas para la inversi¨®n proyectada. El hecho de que se piense una vez m¨¢s en Espa?a viene a demostrar que los dirigentes de la Ford consideran a nuestro pa¨ªs como una base id¨®nea para la estrategia de esta empresa de cara al mercado europeo. La futura integraci¨®n espa?ola en la Comunidad no afecta sustancialmente a estos prop¨®sitos.
En cuanto al tipo de producciones que abordar¨¢ Ia Ford con su nueva inversi¨®n, fuentes consultadas no han querido pronunciarse debido al incipiente estado de las negociaciones con el Gobierno espa?ol, pero parece que se incrementar¨ªa la fabricaci¨®n del Fiesta y se abordar¨ªa la producci¨®n de nuevos modelos de mayor cilindrada.
En medios gubernamentales se ha podido constatar una notable satisfacci¨®n ante la posibilidad de una nueva operaci¨®n inversora de la multinacional americana, ya que se estima que contribuir¨ªa con su anuncio a estimular las decisiones de inversi¨®n tanto por parte de empresas extranjeras como por las espa?olas, de cara a un a?o durante el cual la variable de inversi¨®n deber¨¢ comportarse, seg¨²n las esperanzas gubernamentales, con car¨¢cter fuertemente expansivo.
En estas condiciones, se se?ala por otra parte que la posici¨®n oficial podr¨ªa ser bastante receptiva a los prop¨®sitos de la Ford y de otras empresas multinacionales que estudian la posibilidad de invertir en Espa?a en estos momentos. Por este motivo, la respuesta de los responsables del Gobierno podr¨ªa ser incluso m¨¢s abierta que la que ya en 1972 permiti¨® una parcial liberalizaci¨®n del mercado espa?ol del autom¨®vil a las firmas multinacionales que no hab¨ªan estado presentes en la primera oleada de inversiones automovil¨ªsticas de los a?os cincuenta.
Uno de los aspectos que no han podido precisar las fuentes informantes se refiere a la localizaci¨®n del nuevo proyecto. Todo parece indicar que no se realizar¨¢ en Almusafes (Valencia), en donde la empresa tiene instaladas actualmente sus cadenas de montaje y la f¨¢brica de motores.
La nueva operaci¨®n de Ford podr¨ªa estar en cierta medida relacionada con las dificultades que la empresa americana tiene en Inglaterra desde hace a?os, y que se han recrudecido en las ¨²ltimas semanas. Aunque se descarta por completo un trasvase de instalaciones desde este pa¨ªs, parece que las nuevas inversiones de Ford en Europa estar¨ªan destinadas, si las negociaciones actuales prosperan, a nuestro pa¨ªs. Sin embargo, la Ford parece contar con alguna otra alternativa en el continente europeo como baza de negociaci¨®n con las autoridades espa?olas.
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