"La Constituci¨®n es un hito progresista de la tradici¨®n liberal espa?ola"

Joaqu¨ªn Satr¨²stegui, senador electo por Madrid, es presidente del Partido Liberal Progresista, y durante el franquismo defendi¨® sin descanso la restauraci¨®n de la Monarqu¨ªa democr¨¢tica. En su opini¨®n, la Constituci¨®n sometida a refer¨¦ndum es un producto, que se distingue por su progresismo, de la tradici¨®n liberal espa?ola.

Pregunta. ?Qu¨¦ aporta esta Constituci¨®n a la tradici¨®n constitucional liberal?Respuesta. Esta Constituci¨®n es liberal, y como tal, hija leg¨ªtima de las dem¨¢s constituciones espa?olas de los siglos XIX y XX. Pero yo dir¨ªa que se diferencia de aquellas por su car¨¢cter progresista. Ello es debido a que ha sido elaborada despu¨¦s de la promulgaci¨®n en el orden internacional de la Declaraci¨®n Universal de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, la Convenci¨®n Europea de los Derechos del Hombre y la Carta Social Europea. Todos estos documentos protegen las libertades fundamentales de la persona, en el orden pol¨ªtico y en el orden social, y esos derechos han sido recogidos en nuestra futura Constituci¨®n, algunas veces en los mismos t¨¦rminos en que son proclamados por aquellos documentos. Tanto es as¨ª, que en el art¨ªculo 10 se declara que ?las normas relativas a los derechos fundamentales y a las libertades que la Constituci¨®n reconoce se interpretar¨¢n de conformidad con la Declaraci¨®n Universal de los Derechos Humanos y los tratados y acuerdos internacionales sobre las mismas materias, ratificados por Espa?a?. Todas esas normas son de un marcado signo progresista.

P. Desde ciertos sectores se afirma que alg¨²n precepto de la Constituci¨®n atenta contra el principio de la libertad econ¨®mica de empresa, uno de los fundamentales del liberalismo. ?Esas cr¨ªticas tienen fundamento?

R. A mi juicio no lo tienen, pues el art¨ªculo 38 reconoce la libertad de empresa en el marco de la econom¨ªa de mercado. Esto no era necesario reconocerlo, pues yo no conozco ninguna Constituci¨®n del mundo occidental que se refiera a ese marco de la econom¨ªa de mercado, y sin embargo, es evidente que en los pa¨ªses de Occidente ese es el tipo de econom¨ªa que existe. Yo, como liberal, trat¨¦ de convencer a los que pretend¨ªan ese reconocimiento en nuestra Constituci¨®n que ello era innecesario y, en cierto modo, ser¨ªa una peculiaridad de nuestra parte fundamental. Pero como se empe?aron en que constara tal reconocimiento, lo han logrado, si bien con una matizaci¨®n de sentido contrario, consistente en que en el mismo art¨ªculo se menciona la posibilidad de la planificaci¨®n por parte de los poderes p¨²blicos. Creo, en consecuencia, que lo establecido por nuestra Constituci¨®n est¨¢ en l¨ªnea con lo que es hoy la econom¨ªa de los pa¨ªses occidentales, en los que se conjuga la libertad de empresa con una cierta planificaci¨®n y la existencia de un sector p¨²blico.

P. En sentido contrario, ?la Constituci¨®n puede obstaculizar una pol¨ªtica econ¨®mica m¨¢s progresista?

R. Pienso que los mayores progresos de la sociedad moderna se han logrado a trav¨¦s de la libertad de empresa, y de la libertad de sindicaci¨®n de los trabajadores. Con la inventiva y los descubrimientos que propicia el esp¨ªritu, empresarial para poner a disposici¨®n de las mujeres y hombres el m¨¢ximo n¨²mero de bienes de todas clases, la realidad es que las sociedades occidentales han logrado un crecimiento constante de los niveles de vida de todos, y una igualdad cada vez mayor entre los diversos sectores que intervienen en el proceso productivo.