Calvo Sotelo negociar¨¢ con la Comunidad Econ¨®mica Europea la ampliaci¨®n del acuerdo de 1970

Los problemas de gesti¨®n del acuerdo comercial de 1970, la confirmaci¨®n del estatuto de la futura Oficina de Informaci¨®n de la CEE en Madrid y la preparaci¨®n del escenario para las negociaciones de adhesi¨®n de Espa?a a las Comunidades Europeas figurar¨¢n, probablemente, en el temario de asuntos a discutir en la jornada del pr¨®ximo viernes entre Leopoldo Calvo Sotelo, ministro espa?ol encargado de las Relaciones con la CEE, y sus hom¨®logos comunitarios. Quedar¨¢n de lado, por una vez, los cl¨¢sicos litigios sectoriales (textil, siderurgia y pesca), resueltos estos ¨²ltimos meses con acuerdos restrictivos para Espa?a, que mantiene cierto statu quo para las exportaciones de textil, pierde 100.000 toneladas de productos sider¨²rgicos para sus ventas a la CEE (900.000 en 1978, 800.000 en 1979) y ve reducidas sus licencias para la pesca de altura de 240 a doscientas, m¨¢ximo 210, con aplicaci¨®n de los ¨ªndices correctores. Cifras que no han impedido una presentaci¨®n triunfalista por parte de los responsables espa?oles en las relaciones con la Europa de los nueve del Mercado Com¨²n.

La apertura oficial de negociaciones para el ingreso de Espa?a a la CEE, celebrada en Bruselas el pasado 5 de febrero, abre, al margen de los asuntos comerciales, el camino hacia la gran negociaci¨®n. Prepararla y mantener un ?modus vivendi? hasta el momento del ingreso parece ser el objetivo prioritario, tanto para espa?oles como para comunitarios. Naturalmente no siempre coinciden los puntos de vista, radicalizados por parte de la CEE desde que, en 1978, la balanza comercial de intercambios Espa?a/CEE se inclina a favor de Madrid.

Quejas comunitarias

Los comunitarios quer¨ªan una ampliaci¨®n del acuerdo comercial Espa?a/CEE de octubre de 1970. Espa?a rechaz¨® la idea en varias ocasiones con argumentos v¨¢lidos, ante la necesidad de pensar en la adhesi¨®n y dejar tal cual el viejo acuerdo negociado por el embajador Alberto Ullastres. La comisi¨®n, presionada por los Estados miembros y por buen n¨²mero de empresas comunitarias exportadoras hacia Espa?a, nos espera a la vuelta de la esquina y piensa apretar los tornillos, cuando menos, con una r¨ªgida aplicaci¨®n de lo dispuesto en el acuerdo de 1970. La reuni¨®n de la comisi¨®n mixta del mencionado acuerdo, en su ¨²ltima edici¨®n del 24 de enero de este a?o, no aport¨® soluciones a las ?quejas? comunitarias de discriminaci¨®n fiscal, de subvenciones a la exportaci¨®n y de retrasos en la concesi¨®n de licencias que perjudican las ventas de productos ?made en CEE? al mercado espa?ol. Hoy se ha pasado balance a la situaci¨®n y los comunitarios solicitan una nueva reuni¨®n de la comisi¨®n mixta para mediados de mayo, a fin de obtener concesiones de parte espa?ola sobre lo que consideran deber¨ªa ser la filosof¨ªa de apertura del mercado hispano, con vistas al ingreso. Existen m¨¢s de trescientas peticiones de empresarios CEE que se quejan contra Espa?a. Las ?lamentaciones? van desde las galletas hasta los autom¨®viles, pasando por varias decenas de productos.

Otro punto de mira de la CEE se dirige a conseguir la derogaci¨®n de leyes espa?olas restrictivas a la importaci¨®n y, sobre todo, la r¨¢pida entrada en vigor en Espa?a de un nuevo sistema fiscal que se inspire en el IVA (impuesto sobre el valor a?adido), practicado por la CEE. No faltan las alusiones o presunciones de pr¨¢cticas de dumping en las exportaciones de ciertos productos espa?oles hacia Europa.

En resumen, todo un temario de quejas comunitarias, dif¨ªciles de defender en algunos casos cuando por otra parte se reducen las ventajas espa?olas en pesca y siderurgia.

Negociaciones sin escollos

En el marco pol¨ªtico de las relaciones actuales Espa?a-CEE, el ministro Calvo Sotelo podr¨¢ confirmar a sus interlocutores en Bruselas, el presidente Jenkins y el vicepresidente Natali, en particular, que queda resuelto el viejo escollo del estatuto de la Oficina de Informaci¨®n y Prensa de la CEE en Madrid. Tema que resuelve el Ministerio espa?ol de Asuntos Exteriores, con posterior aprobaci¨®n del Gobierno, dando un estatuto asimilable al diplom¨¢tico. Rango al que inicialmerite Madrid pon¨ªa ciertas reservas, as¨ª como a la de algunos candidatos a su direcci¨®n, funcionarios de la Comisi¨®n Europea. Finalmente el ministro Calvo Sotelo ser¨¢ informado del escenario cl¨¢sico de las futuras negociaciones para el ingreso. Las mismas debutar¨¢n con una sesi¨®n, a nivel de embajadores, el pr¨®ximo mes de junio y pasar¨¢n a lo serio del tema a partir de oto?o. Negociaciones sobre las que no deber¨¢n pesar escollos como la aplicaci¨®n del acuerdo de 1970 u otros, puesto que ser¨¢n ya bastante complejas por s¨ª solas.