Garaikoetxea, partidario de medidas de reconciliaci¨®n en el Pa¨ªs Vasco

(Viene de primera p¨¢gina)Carlos Garaikoetxea a?adi¨®: ?Suger¨ª que todos ten¨ªamos la obligaci¨®n de entablar un di¨¢logo aun con los sectores m¨¢s antag¨®nicos para ver si la cr¨ªtica situaci¨®n pol¨ªtica que hoy vive Euskadi tiene una soluci¨®n pac¨ªfica, de reconciliaci¨®n. Este era el sentido de mis declaraciones, que se han visto tr¨¢gicamente desactualizadas por los ¨²ltimos acontecimientos.?

?Yo comprendo?, a?ade, ?que la palabra amnist¨ªa, aparte de los problemas que el t¨¦rmino en s¨ª ofrezca hasta desde una perspectiva constitucional, puede resultar incomprensible para muchos sectores, y mucho m¨¢s en la actualidad. Cuando hice las declaraciones al New York Times dec¨ªa que en los grandes momentos hist¨®ricos, como son, a mi entender, los que atravesamos hoy, se impone tener una perspectiva hist¨®rica. Por ello dec¨ªa al periodista que probablemente dentro de cuarenta a?os, nuestros sucesores, cuando miren atr¨¢s y contemplen esa reconciliaci¨®n, que pudiera producirse a trav¨¦s de un perd¨®n generalizado, encontrar¨¢n, con esa perspectiva hist¨®rica, muy natural que el pueblo vasco haya sido capaz de encontrar una f¨®rmula de reconciliaci¨®n. Yo a?ad¨ªa luego que no pod¨ªa ser una reconciliaci¨®n sobre cualquier base, que deb¨ªa ser una reconciliaci¨®n que exigiera una tesitura reconciliatoria de todas las partes implicadas.?

Para Carlos Garaikoetxea un alto el fuego por parte de ?quienes empu?an las armas? y medidas de gracia para los presos vascos, por parte del Gobierno, pueden ser, acaso, las condiciones necesarias para la reconciliaci¨®n.

?Muchos pensamos, tras los tr¨¢gicos atentados del Pa¨ªs Vasco y Madrid, que hablar de medidas de gracias hoy es un sarcasmo tr¨¢gico.

El propio Consejo General Vasco calificaba, a ra¨ªz de estos acontecimientos de "grave contradicci¨®n" la de aquellos que reivindican la amnist¨ªa y no son capaces de respetar la vida y los derechos de las personas.

Pero sin que las ramas nos impidan ver el bosque, desde una perspectiva hist¨®rica, creo que no debemos, ni siquiera hoy, abandonar la idea de reconciliaci¨®n.?

Recuerda Carlos Garaikoetxea c¨®mo en situaci¨®n menos dram¨¢tica que la actual declar¨® una y otra vez que para hablar de reconciliaci¨®n era imprescindible que todas las partes implicadas, y fundamentalmente ETA, observaran una actitud inequ¨ªvoca de receptibilidad y deseo de lograr el objetivo de la normalizaci¨®n.

?No es precisamente?, afirma, ?una actitud receptiva la que muestra ETA en estas fechas. Por ello creo que en las actuales circunstancias no se den las condiciones imprescindibles para que el tema sea abordado.?

?Aunque s¨¦ que es delicado decirlo, considero que hoy, si ETA diera muestras inequ¨ªvocas de que busca la paz, si ETA deja las armas, podr¨ªa propiciarse un ambiente adecuado para iniciar una negociaci¨®n, un di¨¢logo o comunicaci¨®n encaminados a lograr esa reconciliaci¨®n de la que hablo.?

Insiste el presidente del PNV y CGV en que del tema de la amnist¨ªa no se ha hablado con el Gobierno ?ni a otros niveles?. Se?ala el se?or Garaikoetxea que, al hacer la declaraciones a New York Times, ?me mov¨ª m¨¢s en el terreno de las ideas, de los objetivos deseados que en planes concretos?. Sin embargo, no es optimista sobre la eventualidad de que el Gobierno estudie seriamente la promulgaci¨®n de unas medidas de gracia generalizadas.

?Yo no me puedo poner en la piel del Gobierno, pero tengo la casi absoluta seguridad de que, hoy por hoy, el Gobierno juzga que se han colmado todas las posibilidades, toda capacidad de entablar una negociaci¨®n con ETA de cara a la reconciliaci¨®n.?

Para Carlos Garaikoetxea reconciliaci¨®n es sin¨®nimo de pacificaci¨®n, de normalizaci¨®n de la vida en Euskadi. Sin embargo, teme que unas nuevas medidas de gracia no traigan quiz¨¢ consigo la pacificaci¨®n definitiva del Pa¨ªs Vasco.

?Tenemos una triste experiencia en la anterior amnist¨ªa. Hay sectores que aducen que la normalizaci¨®n de la vida pol¨ªtica no se ha producido todav¨ªa en el Pa¨ªs Vasco. Yo creo que, efectivamente, la normalizaci¨®n completa de la vida pol¨ªtica en nuestro pa¨ªs se producir¨¢ cuando el autogobierno razonable invocado democr¨¢ticamente por el pueblo vasco se produzca, y, por consiguiente, esa nueva amnist¨ªa -de producirse-, tras esa normalizaci¨®n, podr¨ªa tener bastantes m¨¢s posibilidades de ser concluyente que la que se produjo en su d¨ªa con la anterior amnist¨ªa.?

?Pero esto, hoy por hoy, es hablar de futuribles. Creo que hoy quien habla en mis circunstancias tiene que sentir un tremendo escr¨²pulo para abordar este tema, porque lo m¨¢s pr¨®ximo que se siente en este momento es la tragedia, el drama de esas personas que se han visto afectadas por los atentados de los d¨ªas pasados.