EL Partido Comunista lucha por el liderazgo en Comisiones Obreras de Navarra
La decisi¨®n del consejo confederal de CC OO de Euskadi de cesar al secretariado provincial de Navarra, por entender que estaba siguiendo una pol¨ªtica sindical apartada de la l¨ªnea preconizada por el sindicato, ha abierto una profunda crisis de consecuencias imprevisibles. De hecho, uno de los sectores m¨¢s combativos del movimiento obrero de Navarra -que hasta la actualidad dominaba en CC OO- ha quedado marginado del sindicato, si bien por el momento permanecen como simples afiliados. La lucha del PCE por hacerse con las riendas de CC OO de Navarra, hasta ahora dirigidas por afiliados a EMK, puede ser la clave de la cadena de destituciones iniciada en el sindicato de mayor implantaci¨®n en la provincia.
La historia de CC OO de Navarra est¨¢ ¨ªntimamente ligada a la historia del movimiento obrero de los ¨²ltimos a?os en la provincia. Despu¨¦s de que la Acci¨®n Sindical de Trabajadores (AST), que a?os m¨¢s tarde se convertir¨ªa en la Organizaci¨®n Revolucionaria de Trabajadores (ORT), mantuviera contactos con USO e incluso con ETA, en enero de 1966 nac¨ªan las CC OO de Navarra. En un manifiesto hecho p¨²blico. el 31 de enero de aquel a?o, titulado Ante el futuro del sindicalismo, CC OO hac¨ªa una declaraci¨®n de principios en la que manifestaba que ?CC OO no son hoy, ni pretenden serlo ma?ana, un sindicato y menos todav¨ªa una asociaci¨®n pol¨ªtica. CC OO son ¨²nica y exclusivamente un instrumento unitario de acci¨®n de la clase obrera y un movimiento independiente de cualquier ideolog¨ªa pol¨ªtica o religiosa, para la defensa de los intereses de la clase obrera?. Cuatro a?os m¨¢s tarde, la implantaci¨®n de CC OO en Navarra comenzaba a consolidarse. Super Ser, Potasas de Navarra, Authi, Imenasa, Bendib¨¦rica y Eaton, entre otras grandes empresas de la provincia, ten¨ªan ya sus comit¨¦s de CC OO, formados por independientes, militantes de ORT, Partido Carlista y el grupo Komunistak, que m¨¢s tarde pasar¨ªa a ser el Movimiento Comunista de Euskadi (EMK).Los primeros conflictos fuertes en Navarra, a principios de la d¨¦cada de los setenta, est¨¢n capitaneados por CC OO. La huelga de la plantilla de Eaton (510 trabajadores), que dur¨® 47 d¨ªas; los veinte d¨ªas de paro de los 1.700 obreros de Potasas de Navarra o los 36 de la plantilla de embutidos La Pamplonica, marcan la l¨ªnea de actuaci¨®n de CC OO dentro del incipiente movimiento obrero en la provincia hasta el punto de que el Consejo de Empresarios de Navarra, ante el aumento de la conflictividad laboral en el viejo reino, dirige una carta al vicepresidente, del Gobierno, almirante Carrero Blanco, exponi¨¦ndole su preocupaci¨®n al respecto.
En esta din¨¢mica se produce, en enero de 1973, el secuestro del industrial navarro Felipe Huarte por un comando de ETA militar, como respuesta de esta organizaci¨®n a la huelga de 48 d¨ªas que manten¨ªa una de sus empresas, Torfinasa, por motivos salariales.
El secuestro motiv¨® que la plantilla entrara a trabajar sin condiciones, despu¨¦s de 48 d¨ªas en paro, mientras la familia de Felipe Huarte entregaba cincuenta millones de pesetas en los dos puntos de Francia y Suiza que hab¨ªa exigido ETA. Para CC OO de Navarra el secuestro fue un error pol¨ªtico que perjudicaba los intereses de la clase obrera, ya que la ¨²nica manera de acabar ?con el Estado fascista no es el terrorismo individual, sino la violencia revolucionaria de las masas?. Unos meses m¨¢s tarde, en junio, los trabajadores de Navarra pasaban otra prueba de fuego: la larga huelga en Motor Ib¨¦rica provocaba la convocatoria, por parte de CC OO, de una huelga general en la provincia, respaldada ampliamente en medio de un despliegue policial sin precedentes en Pamplona. Es en 1974, despu¨¦s de la continuada huelga de Authi, cuando CCOO de Navarra tiene el primer enfrentamiento con CC OO de Euskadi, a causa de que el Consejo Nacional de CC OO de Euskadi (Cone) no acepta que Navarra entre a formar parte de la Cone, por considerar que, hist¨®ricamente, hab¨ªa quedado fuera del ¨¢mbito vasco en 1936, una vez promulgado el Estatuto vasco de Autonom¨ªa en plena guerra civil. Ante esta decisi¨®n, las CC OO de Navarra se vinculan, a nivel de trabajo, con la coordinadora de Euskadi de CC OO (CECO), formada, en su mayor¨ªa, por afiliados a EMK y LKI.
Sin embargo, todas las fuerzas se a¨²nan de cara a la convocatoria de una huelga general en Navarra, motivada por la delicada situaci¨®n en Potasas de Navarra, con 47 trabajadores encerrados en la mina y la plantilla en paro. En 1974, el panorama laboral navarro ofrec¨ªa un aspecto dram¨¢tico: en pocos d¨ªas hab¨ªan sido despedidos unos 1.500 trabajadores en empresas como Eaton, Bendib¨¦rica, AP Ib¨¦rica, Inepsa, Ufesa y otras. En esta situaci¨®n, y con el grave problema de Potasas, CC OO lanza la convocatoria de una huelga general el 15 de enero, que durante dos d¨ªas paraliz¨® casi por completo la provincia. En la capital navarra, absolutamente tomada por la Polic¨ªa Armada, aparecen por primera vez en Espa?a los fusiles lanza-pelotas de goma, que producen los primeros heridos. La represi¨®n policial es importante y a pesar de que Potasas de Navarra vuelve al trabajo, muchos l¨ªderes sindicales pasan por la comisar¨ªa o acaban en la c¨¢rcel.
Con el movimiento obrero navarro organizado, en julio de 1976 se celebra en Barcelona el congreso estatal de CC OO, en el que los dirigentes deciden convertir el movimiento en un sindicato de clase. Esta posici¨®n no es compartida por los miembros de la ORT, que unos meses m¨¢s tarde abandonan CC OO para formar el Sindicato Unitario, dirigido por un trabajador navarro, Jes¨²s Ibarrola, antiguo miembro del secretariado estatal de CC OO.
Con esta escisi¨®n, CC OO de Navarra inicia, el 9 de octubre de 1977, su primer congreso provincial. De las tres listas que se presentan para el secretariado, propuestas por EMK, LKI y PCE, resultan elegidos once miembros de EMK, cinco de LKI y tres del PCE, as¨ª como dos independientes. A partir de entonces, los enfrentamientos entre el consejo confederal de CC OO de Euskadi y el secretariado de Navarra son continuos, ya que, mientras el PCE domina el primero (a pesar de que los delegados navarros ya formaban parte de ¨¦l), son los afiliados a EMK, los que marcan la l¨ªnea sindical en Navarra.
Hasta el momento de su destituci¨®n, el secretariado de Navarra de CC OO forma un frente com¨²n con los sectores m¨¢s combativos de la izquierda en todos los sectores sindicales. Con una fuerte implantaci¨®n en la provincia, CC OO llega a convertirse en el coco de los empresarios a la hora de negociar convenios, as¨ª como en uno de los principales impulsores de las huelgas generales de 1978 y 1979 en Navarra.
Sin embargo, a ra¨ªz de una denuncia ante el consejo confederal de Euskadi de CC OO, por parte de varios miembros del secretariado navarro afiliados al PCE, se decide la destituci¨®n oficial de todo el secretariado, sustituy¨¦ndolo por otro formado, en su totalidad, por miembros del PCE. Las razones que adujo Tom¨¢s Tueros, secretario de CC OO de Euskadi, para disolver el secretariado de Navarra se basaban en las notables discrepancias surgidas en los dos ¨²ltimos a?os en temas como los pactos de la Moncloa, la Constituci¨®n, la violencia en Euskadi y el Estatuto de Guernica. ?El secretariado de Navarra?, se?al¨® Tueros, ?ha protagonizado continuos ataques al proceso constitucional y a la Constituci¨®n, no han hecho ninguna defensa de la postura decidida que adopt¨® la confederaci¨®n en contra del terrorismo y han protagonizado acuerdos con sindicatos marginales o con las gestoras pro amnist¨ªa, en lugar de hacerlo con UGT o USO.?
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