Periodistas

de todo el mundo llegan a Cergy Pontoise, poblado cercano a Par¨ªs, para interesarse por el joven Frank Fontaine, que afirma haber sido secuestrado por un ovni (objeto volante no identificado) el pasado 26 de noviembre y que fue devuelto al planeta Tierra el d¨ªa 3 de este mes. Varios periodistas americanos. editores y escritores ya le han ofrecido sustanciosas cantidades de dinero a cambio de la narraci¨®n de sus vivencias en ?el m¨¢s all¨¢?. Pero, de momento, Frank se niega.En una conferencia de prensa ofrecida ayer. afirm¨®: ?Poco a poco empiezo a recordar los detalles de mi viaje de una semana. Ahora veo con m¨¢s claridad y tengo la impresi¨®n de que aquello era muy agradable.? Pero lo dicho: el muchacho no revela detalle alguno de su viaje y de esas experiencias tan agradables. Frank, como los dos amigos que le acompa?aban en el momento en que fue secuestrado por una burbuja de fuego, se quejan de la polic¨ªa y de los vecinos del pueblo, que les toman a broma, y de los periodistas, que les asedian con preguntas insidiosas.

?Para contar mi viaje?, ha dicho Frank. ?deben cumplirse dos condiciones: primera. que haya recordado todo lo que me ocurri¨® durante la semana en que transcurri¨®, y segunda, que la justicia se convenza de que mis amigos y yo no hemos intentado enga?ar a nadie.? La polic¨ªa, por su parte, cree cada vez m¨¢s en ?una broma, genial, a fin de cuentas?. porque en caso contrario estima que Frank deb¨ªa explicarse. De momento, el mozo ?venido del m¨¢s all¨¢? y sus amigos lo pasan mal. Han tenido que abandonar su profesi¨®n de vendedores ambulantes, por ahora al menos, ?porque si vamos a los mercados?, dice Frank, ?la gente se nos echar¨¢ encima, pero no para comprar la mercanc¨ªa, sino para hacernos preguntas?. Pero hasta que el mundo entero no se convenza de que no son ni granujas ni locos. Frank asegura y jura que no dir¨¢ nada de su periplo fant¨¢stico ni aceptar¨¢ un c¨¦ntimo de nadie.