Se prepara un "pucherazo" para la asamblea extraordinaria

La asamblea extraordinaria que la Federaci¨®n Espa?ola celebrar¨¢ el pr¨®ximo d¨ªa 1 de marzo ha levantado una fuerte y dura pol¨¦mica a trav¨¦s de las respectivas asambleas que reglamentariamente tienen que celebrar las distintas federaciones provinciales, pese a que se duda que muchas de ellas ni siquiera las celebren o, al menos, no remitan las actas de dichas asambleas. En el caso concreto de la Castellana se produjo un importante esc¨¢ndalo, que llev¨® a que el Complutense de Alcal¨¢ de Henares impugnara la asamblea. Parece evidente que con la convocatoria de esta asamblea extraordinaria la Federaci¨®n Espa?ola prepara, una vez m¨¢s, un buen pucherazo.El tema que en esta ocasi¨®n ha puesto el problema sobre el tapete es el de la reestructuraci¨®n de la Primera Divisi¨®n femenina, que se quiere dividir en dos grupos. Esta es la ponencia de la Espa?ola, pero curiosamente, al menos, once de los doce clubes que la integran est¨¢n disconformes, por lo que se hace dif¨ªcil. entender el inter¨¦s de la Federaci¨®n en que se produzca el cambio, sobre todo si se tiene en cuenta que a partir de la pri¨¢xima temporada no habr¨¢ ninguna subvenci¨®n para esta categor¨ªa. Es decir, los clubes no van a poder jugar con su dinero la competici¨®n que ellos quieren, sino la que la Federaci¨®n les dicta. Y se la dicta porque dicha reestructuraci¨®n, que es evidentemente un tema espec¨ªfico, llegar¨¢ a la asamblea como tema general, por lo que se votar¨¢ junto con otros temas que nada tienen que ver.

Lo primero que habr¨ªa que preguntarse es el por qu¨¦ de esta asamblea extraordinaria, en la que adem¨¢s se pretende hacer una amplia reestructuraci¨®n que va desde la modificaci¨®n de edades a los cambios en las distintas competiciones. Nunca una asamblea extraordinaria se convoc¨® con estos fines, pero en este caso concreto a¨²n tiene mucha menos raz¨®n de ser, ya que las elecciones est¨¢n en puertas. Resulta absurdo que la actual Federaci¨®n haga y deshaga a su gusto, cuando posiblemente dentro de unos meses sea otra completamente distinta la que est¨¦ al frente del baloncesto. Resulta igualmente incoherente que se les deje hecho todo a los hombres que pueden en breve ocupar esos cargos. No se debe en ning¨²n caso celebrar una samblea extraordinaria en esta situaci¨®n.

Por otro lado, nadie o casi nadie est¨¢ de acuerdo con los cambios que la Federaci¨®n quiere hacer, encaminados a hacer retroceder de nuevo al baloncesto, y se puede llegar, incluso, a pensar que se busca el fracaso de los que puedan venir. De otra manera, la cosa no tiene ni pies ni cabeza. Adem¨¢s, las competiciones empezaron con unas normas y no terminar¨ªan con las mismas, ya que la intenci¨®n es que las medidas que se tomen en esta asamblea empiecen a regir inmediatamente.

Los clubes femeninos est¨¢n dispuestos a llegar hasta el final e incluso a separarse de la Federaci¨®n y hacer una competici¨®n de acuerdo con cualquier otra organizaci¨®n de la mujer. Fausto Rodr¨ªguez del Coso, portavoz del Complutense, impugn¨® la asamblea de la Castellana, y adem¨¢s pide la desconvocatoria de la asamblea extraordinaria. Evidentemente una y otra federaciones van de la mano, y la Castellana est¨¢ dispuesta a apoyar incondicionalmente a la Espa?ola para que se lleve a cabo el pucherazo y, por ejemplo, un club de Tercera o una federaci¨®n provincial que no tenga ning¨²n club en Primera Divisi¨®n femenina, votar¨¢n acerca de c¨®mo se tiene que jugar esta competici¨®n.

No obstante, a este respecto, conviene recordar que el a?o pasado ya se celebr¨® la asamblea ordinaria de la Espa?ola bajo la ilegalidad, pues no hubo asambleas previas en las provinciales. El Askatuak y la Federaci¨®n Guipuzcoana hicieron la debida impugnaci¨®n para que?o se celebrase, pero de nada sirvi¨®, y adem¨¢s casi nadie apoy¨® lo que desde Guip¨²zcoa se ped¨ªa: estar dentro de lo legal.

Por ¨²ltimo, hay que apuntar como fuerte rumor que, una vez terminados los Juegos Ol¨ªmpicos, Raimundo Saporta y gran parte de su equipo, entre ellos Juan Tamames, dejar¨¢n la Federaci¨®n. Sin embargo, se apunta que Ernesto Segura de Luna se presentar¨¢ a la reelecci¨®n al mismo tiempo que en muchos c¨ªrculos se teme que se busque su nombramiento por aclamaci¨®n.