El Barcelona pas¨® apuros para derrotar al Rayo

Una vez m¨¢s, el Barcelona pas¨® apuros para derrotar a un te¨®rico ?facil¨®n?. El s¨ªndrome Maradona no sirvi¨® nada m¨¢s que de tema preferente de conversaci¨®n en el palco y en la grada. Los jugadores barcelonistas siguen igual de mal. Para su suerte, Mora tuvo una mala tarde -los nervios, dicen- y no se luci¨® como deseaba, fallando en el primer gol y provocando el penalti que dio la victoria al Barcelona. Quiz¨¢ por ello la calidad, que apenas hubo, la puso el Rayo, con contraataques muy bien llevados por Morena, Manolo o Marian, buscando siempre la posici¨®n de Clares, a quien casi nunca encontraban.El Barcelona parec¨ªa no necesitar los puntos tanto como el Rayo; el Barca busca la UEFA, y el Rayo, la salvaci¨®n. Quiz¨¢ la diferencia entre estos dos equipos habr¨¢ que buscarla en la mentalizaci¨®n, equipos que jugaron sin ambici¨®n, uno, el rico, y sin acierto, el otro, el pobre.

En la segunda parte ya no habr¨ªa goles, pero s¨ª mayor parsimonia en los catalanes y m¨¢s alegr¨ªa en los castellanos, que fueron convencidos por Iriondo de que pod¨ªan empatar de nuevo el encuentro. No pudo ser. La lluvia ca¨ªa cada vez con m¨¢s intensidad y el Barcelona se conformaba con el 2-1 y, en consecuencia, no arriesgaba, por el cansancio o por la falta de ganas. Artola sigui¨® en su l¨ªnea ascendente, al igual que Migueli, y para desgracia del Rayo el domingo no fue una excepci¨®n. As¨ª, las ocasiones que provoc¨® el entusiasmo rayista en la segunda parte del encuentro se quedaron s¨®lo en eso, en ocasiones sin m¨¢s.

El Rayo ya no ?mata gigantes?, pero todav¨ªa los asusta a domicilio, y as¨ª deber¨ªa seguir siendo la pr¨®xima temporada. El Rayo demostr¨® en Barcelona que merece permanecer en la divisi¨®n de honor. Al menos, ganas no le faltan; pero el hecho fue que desaprovech¨® la oportunidad de puntuar y no le quedan m¨¢s que dos, problem¨¢ticas, como al H¨¦rcules, aunque con la ventaja de superarle en caso de empate com¨²n.

El Barcelona, en cambio, pese a su mal juego, sum¨® dos puntos m¨¢s, que pueden resultarle preciosos. El domingo volver¨¢ a jugar en casa, donde recibir¨¢ al Espa?ol, ya casi libre del peligro de descenso, si punt¨²a en Burgos, y despu¨¦s viajar¨¢ a Almer¨ªa, otro modesto, debutante en Primera, al que Maguregui ha mantenido.