La Comisi¨®n de Justicia del Congreso comienza a debatir el tema del divorcio

El ministro de Justicia, I?igo Cavero, calific¨® ayer el proyecto de ley de reforma del matrimonio, que incluye el tema del divorcio, presentado por el Gobierno a las Cortes como ?una norma equilibrada, prudente y flexible, adaptada a las exigencias de la sociedad espa?ola?, en un discurso de 35 folios que ley¨® durante una hora de forma atropellada -hasta el punto de que lleg¨® a aludir al ?matrimonio por mero disenso?-, ante la Comisi¨®n de Justicia del Congreso. El ministro, que hizo reiteradas alusiones al derecho can¨®nigo, present¨® as¨ª el proyecto, al que se han formulado ocho enmiendas a la totalidad y m¨¢s de trescientas al articulado. Hoy se iniciar¨¢ el debate de las enmiendas a la totalidad de devoluci¨®n al Gobierno.

Cavero destac¨® que el proyecto contempla modificaciones sobre el matrimonio, separaci¨®n, nulidad y causas de disoluci¨®n, por lo que designarlo ?simplemente como ley de Divorcio, salvadas las l¨®gicas consideraciones de inter¨¦s meramente period¨ªstico, supondr¨ªa falta de un m¨ªnimo rigor jur¨ªdico y pol¨ªtico?. El ministro atac¨® a quienes piensan que la misma voluntad que hace a los c¨®nyuges contraer matrimonio deber¨ªa poder llevarles a disolverlo, porque, dijo, ?del contrato o pacto conyugal surge, con entidad propia y superior, un estado matrimonial institucionalizado, con un contenido esencial en sus fines, efectos jur¨ªdicos, estabilidad y disoluci¨®n sustra¨ªdo al mero poder dispositivo de las partes y a la autonom¨ªa de la voluntad de los propios contrayentes?.El ministro de Justicia se mostr¨® tambi¨¦n en contra del matrimonio civil obligatorio frente al matrimonio can¨®nico con efectos civiles, que ha quedado aceptado a ra¨ªz de la firma de los acuerdos con la Santa Sede, en defensa, seg¨²n afirm¨®, del principio de libertad religiosa, porque, a su juicio, ?el sistema de un estatuto matrimonial personal en funci¨®n de las religiones? escindir¨ªa a los ciudadanos, que, ?aunque despu¨¦s del matrimonio hayan cambiado de religi¨®n o abandonado la que profesaban, siguen sometidos al ordenamiento jur¨ªdico de la religi¨®n que pueden ya no profesar?. Defendi¨® por ello que la posibilidad de disoluci¨®n del matrimonio afecte tambi¨¦n a quienes lo contraigan can¨®nicamente, dentro del principio de igualdad ante la ley y el derecho de cada persona a utilizar o no el divorcio, seg¨²n sus creencias.

Ante las acusaciones de que en el proyecto de UCD se apreciaba una considerable influencia del Derecho can¨®nico, como incluir la simulaci¨®n del matrimonio entre las causas de nulidad, I?igo Cavero anunci¨® que el grupo parlamentario centrista ha planteado una enmienda de supresi¨®n de dicha causa, por lo que el tema, de acuerdo con las sugerencias de otros grupos, puede replantearse en el seno de la ponencia y de la comisi¨®n.

El ministro de Justicia reiter¨® la creencia centrista de que el divorcio no es un derecho fundamental de la persona, mientras que s¨ª lo es el contraer matrimonio, y opin¨® que apoyar la tesis contraria a la suya conducir¨ªa ?a aceptar como v¨¢lido no s¨®lo el matrimonio (quiso decir el divorcio) por mero disenso, sino tambi¨¦n el repudio y la ruptura unilateral del v¨ªnculo, lo que no se acepta en ninguna legislaci¨®n divorcista del mundo occidental?. En todo momento defendi¨® lo que llam¨® ?divorcio de constataci¨®n de la ruptura irreparable de la comunidad conyugal?.

I?igo Cavero reiter¨® el contenido del proyecto de divorcio de UCD, la necesidad de la separaci¨®n previa, los plazos y la necesidad de mantener el concepto de culpabilidad de uno de los c¨®nyuges. Precisamente habl¨® de la propuesta comunista de ?exclusi¨®n de cualquier referencia culpabil¨ªstica? y e mantenimiento de la quiebra irreparable del matrimonio como ¨²nica causa gen¨¦rica objetiva para solicitar el divorcio, y dijo que ?tal planteamiento conduce a consecuencias, a mi julcio, absolutamente inmantenibles?.

El ministro consider¨®, no obstante, un error ?reducir todos los supuestos de fracasos matrimoniales en t¨¦rminos de culpabilidad?, porque llevar¨ªa a las ?comedias judiciales?, en virtud de las cuales los propios c¨®nyuges se pondr¨ªan de acuerdo para repartirse los papeles, como, seg¨²n I?igo Cavero, ha sucedido ?en los pa¨ªses en que se ha implantado como modelo ¨²nico el divorcio-sanci¨®n?. El ministro opina que ello no implica que deba desaparecer totalmente el sistema de la separaci¨®n por hechos imputables a un c¨®nyuge, pues ser¨ªa, a su juicio, desconocer la propia realidad de las cosas.

Este reconocimiento del mantenimiento de la culpabilidad en el proceso de disoluci¨®n del matrimonio responde por s¨ª mismo a algunas fuentes del Ministerio de Justicia y del propio Grupo parlamentario Centrista, que, en diferentes ocasiones, han querido mantener que el proyecto de UCD desterraba la necesidad de culpa de uno de los c¨®nyuges en el proceso de separaci¨®n. El hecho de que el proyecto eluda, desde el punto de vista terminol¨®gico, toda referencia al c¨®nyuge culpable, pero utilice otros conceptos equivalentes, hizo, no obstante, matizar al ministro Cavero, con respecto al divorcio, que ?no aparece entre las causas referencia alguna a elementos culpabil¨ªsticos? y afirmar que ?se mantiene as¨ª el principio del divorcio sin culpa?, aunque a continuaci¨®n manifestara que ?tal principio quiebra de cierta forma indirecta en aquellos casos en los que la separaci¨®n se haya producido por unas causas originadas por hechos imputables notoriamente a uno de los c¨®nyuges y solamente para dilatar el plazo previo al ejercicio de la acci¨®n?.

Acciones contra Fuerza Nueva

Con anterioridad al tema del divorcio, la Comisi¨®n de Justicia, presidida por el centrista P¨ªo Cabanillas, estudi¨® una proposici¨®n no de ley de los socialistas para que el Gobierno instara al ministerio fiscal para llevar a cabo investigaciones tendentes a interponer acciones de oficio sobre actuaciones y supuestos hechos delictivos de miembros de Fuerza Nueva. El diputado Blas Pi?ar, presidente de este partido, afirm¨® que ?Fuerza Nueva sufre la violencia m¨¢s que la ejerce?,

UCD y Coalici¨®n Democr¨¢tica propusieron sendas enmiendas transaccionales de sustituci¨®n a la redactada por los socialistas y al final la refundieron en una, que fue aprobada por dieciocho votos a favor, uno en contra y catorce abstenciones. La enmienda qued¨® redactada as¨ª: ?Que el Gobierno inste al ministerio fiscal para llevar a cabo las investigaciones precisas a fin de poder interponer ante la autoridad judicial competente la acci¨®n de oficio que le corresponde de conformidad con la legislaci¨®n vigente, respecto a aquellos partidos pol¨ªticos o asociaciones en general que, por sus fines o actividades, puedan infringir lo establecido en los art¨ªculos 6? y 22 de la Constituci¨®n?. Fue derrotada por quince votos a favor, diecisiete en contra y una abstenci¨®n la propuesta de Gregorio Peces-Barba de a?adir ?al partido Fuerza Nueva?.

Los representantes de la Minor¨ªa Catalana, comunistas, socialistas y Bandr¨¦s, del Grupo Mixto, criticaron la. actitud de UCD de querer diluir las propuestas contra Fuerza Nueva y convertirlas en un ?echar sobre los partidos pol¨ªticos la duda de la sospecha?, seg¨²n dijo el catal¨¢n Roca. El que Pi?ar pidiera ?que se proyecten todas las luces sobre nosotros? hizo a?adir al socialista Peces-Barba que ?UCD ha impedido el planteamiento de un hecho concreto, siendo m¨¢s papista que el Papa?.