Temor en Gran Breta?a ante un nuevo estallido de violencia en el Ulster

El asesinato en Belfast de una prominente dirigente republicana ha aumentado en Gran Breta?a el temor a una campa?a violenta de los grupos paramilitares cat¨®licos y protestantes justamente cuando el Gobierno de Londres se dispone a presentar la pr¨®xima semana la en¨¦sima serie de propuestas sobre Irlanda del Norte.La nueva v¨ªctima de la violencia en el Ulster, Mirian Daly, lectora de Derecho en la Universidad de Queen's, era una de las fundadoras, junto con Bernadette Devlin, del Partido Republicano Socialista Irland¨¦s, la rama pol¨ªtica del Ej¨¦rcito Irland¨¦s de Liberaci¨®n Nacional, responsable, entre otros, del asesinato, el pasado a?o, del diputado conservador y portavoz para Irlanda del Norte, Airey Neavy.

El cad¨¢ver de la se?ora Daly, que presentaba varios impactos de bala en la cabeza y ten¨ªa las piernas atadas, fue encontrado por su hija, de diez a?os, en las cercan¨ªas de su casa, en West Belfast. La v¨ªctima se hab¨ªa distinguido por su participaci¨®n activa en el Comit¨¦ Nacional del Bloque H, que pretende la obtenci¨®n del estatuto de preso pol¨ªtico para los detenidos del IRA en la prisi¨®n de Maze. El pasado 4 de junio, otro miembro de ese comit¨¦, John Turnly, un protestante, era asesinado en el condado Antrim.

El Sinn Fein provisional, ala pol¨ªtica del IRA, ha acusado de las dos muertes a la organizaci¨®n paramilitar protestante Asociaci¨®n para la Defensa del Ulster, dos de cuyos miembros resultaron muertos este a?o, cuando intentaban colocar explosivos en zonas cat¨®licas de la provincia.

El incremento de la violencia en el Ulster coincide con la aprobaci¨®n, por parte del Gobierno conservador, de un nuevo paquete de medidas encaminado a devolver el autogobierno a la provincia, en la actualidad bajo el control directo del Parlamento de Westminster, y que ser¨¢ presentado a la C¨¢mara de los Comunes el martes o mi¨¦rcoles de la pr¨®xima semana.

La presentaci¨®n de las nuevas medidas ser¨¢ seguida de un debate parlamentario, que deber¨¢ terminar antes del 16 de julio, fecha en la que los Comunes deben decidir si se renueva el control directo de la provincia o si, por el contrario, se la devuelve el autogobierno.

Aunque no se conoce el contenido, parece que la propuesta gubernamental contiene varias opciones, y no un plan r¨ªgido de actuaci¨®n, que en el pasado ha dado muy pocos resultados. El sistema de represi¨®n proporcional, tanto en la elecci¨®n de una asamblea legislativa como en la de los comit¨¦s y del ejecutivo, parece que jugar¨¢ un papel trascendental.

Sin embargo, el nuevo plan del Gobierno tiene todas las trazas de nacer muerto, como sus antecesores. Los portavoces unionistas, James Molyneaux y el reverendo lan Paisley, no quieren o¨ªr hablar de otra cosa que no sea el Gobierno de la mayor¨ªa protestante, por temor de que los cat¨®licos, si se encuentran en una posici¨®n paritaria, vuelvan a plantear el tema de ?la dimensi¨®n irlandesa?.

Y, sin embargo, cualquier intento de encontrar una f¨®rmula de soluci¨®n para los problemas del Ulster que no pase por Dubl¨ªn est¨¢ condenado al fracaso. Hasta Londres se da cuenta de ello y cada vez se presta m¨¢s atenci¨®n a las declaraciones de los l¨ªderes de la Rep¨²blica de Irlanda.