El n¨²mero de sacerdotes en el mundo tiende a aumentar

La crisis de las vocaciones ser¨¢ el objeto de un congreso internacional que ma?ana inaugura en Roma Juan Pablo II. Esta reuni¨®n, que viene prepar¨¢ndose desde 1978, sucede al congreso celebrado en 1973, momento en el que el descenso del n¨²mero de vocaciones alcanz¨® su cota m¨¢s baja.Seg¨²n las estad¨ªsticas, la Iglesia se encuentra ante un aumento, aunque ligero, de vocaciones. En efecto, si a finales de 1978 el n¨²mero total de sacerdotes del clero diocesano era de 258.451, un a?o despu¨¦s se constata un crecimiento de 212, siendo la primera vez que desde 1973 aumenta, en lugar de disminuir.

La evoluci¨®n de las cifras no es homog¨¦nea en todos los lugares: si en Centroam¨¦rica el aumento ha sido constante, en el conjunto de Am¨¦rica del Sur la tendencia es a la baja hasta 1975, produci¨¦ndose un aumento notable en 1979 (14.469 sacerdotes diocesanos, es decir, 1.809 m¨¢s que en 1978).

La crisis parece m¨¢s aguda entre los sacerdotes religiosos, que no han dejado de disminuir desde hace quince a?os: a finales de 1979 eran 157.733, esto es, 145 menos que en 1978 y 8.115 menos que en 1973. Otro tanto ocurre con los religiosos no sacerdotes y las religiosas. Los primeros pasaron de 83.743 en 1973 a 73.891 en 1979. Las religiosas, que sumaban 1.037.807 en 1973, eran 964.742 en 1979.

Un sector creciente desde el Concilio Vaticano ll es el de los di¨¢conos permanentes. En 1973 eran 1.239 en todo el mundo (de ellos, 254 en Am¨¦rica Latina), y a finales de 1979 pasaron a ser 6.676. Tambi¨¦n los agentes laicos de pastoral al servicio de la Iglesia cat¨®lica registran un aumento constante: si en 1978 eran 173.895, el n¨²mero aumentaba en 24.532 un a?o despu¨¦s. S¨®lo en Centroam¨¦rica y Am¨¦rica del Sur se advierte disminuci¨®n del n¨²mero.