Ariza y Pi?edo, nuevos hombres fuertes de CC OO
En una reuni¨®n de cuadros sindicales del partido comunista, presidida por Santiago Carrillo y celebrada el lunes 4 de mayo, habr¨ªa sido acordada la composici¨®n del secretariado confederal de CC OO que resultar¨¢ elegida en el pr¨®ximo congreso de dicha central, convocado del 18 al 21 de junio en Barcelona, seg¨²n ha podido saber EL PAIS.Como consecuencia de dicha reuni¨®n, los opositores a los criterios sindicales de Santiago Carrillo habr¨ªan iniciado ya contactos con el fin de presentar al congreso una direcci¨®n alternativa. Seg¨²n informaron algunos asistentes a la reuni¨®n, discrepantes de lo acordado, la futura direcci¨®n de CC OO, de consolidarse, ?representa una mayor burocratizaci¨®n, con las consiguientes p¨¦rdidas de democracia interna, y una liquidaci¨®n de los sectores cr¨ªticos del PCE, de los sindicalistas vasquistas de Euskadi y de todas las Comisiones Obreras catalanas?. Santiago Carrillo, consultado anoche por EL PAIS, afirm¨® no conocer esta reuni¨®n.
La reuni¨®n mencionada se celebr¨® en la sede del Comit¨¦ Central del PCE, en la madrile?a calle de la Sant¨ªsima Trinidad. Asistieron unos veinticinco dirigentes sindicales del PCE y de CC OO. Entre ellos, Santiago Carrillo, Marcelino Camacho, Juli¨¢n Ariza, Adolfo Pi?edo, Nicol¨¢s Sartorius y Tom¨¢s Tueros. En un momento determinado de la reuni¨®n, Nicol¨¢s Sartorius propuso una lista con las personas que, en su opini¨®n, deber¨ªan ser elegidas en Barcelona para la pr¨®xima secretar¨ªa de la central sindical. En ella, Marcelino Camacho seguir¨ªa como secretario general y le acompa?ar¨ªan personas como Juli¨¢n Ariza (secretario de organizaci¨®n), Adolfo Pi?edo (acci¨®n sindical), Adolfo Pastor (t¨¦cnicos y profesionales), Antonio Guti¨¦rrez (informaci¨®n), Le¨®nidas Montero (emigraci¨®n), Seraf¨ªn Aliaga (internacional), Jos¨¦ Mar¨ªa Corell (empleo) y Agust¨ªn Moreno (relaciones unitarias).
Otras versiones sit¨²an a F¨¦lix P¨¦rez Carrasco, hombre de Ariza en el Pa¨ªs Vasco, en la secretar¨ªa de organizaci¨®n, mientras que este ¨²ltimo pasar¨ªa a relaciones unitarias. Abandonar¨ªan la direcci¨®n de CC OO, Bego?a San Jos¨¦, al suprimirse la secretar¨ªa de la mujer, y Agust¨ªn Moreno.
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El PCE ha designado ya el secretariado que deber¨¢ elegir el pr¨®ximo congreso de CC OO
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Sartorius ocupar¨ªa un puesto sin funciones determinadas, uniendo as¨ª el aparato del partido con el Parlamento y el sindicato. Carrillo, seg¨²n esta versi¨®n, crear¨ªa dos vicepresidencias en el PCE (una de ellas para Sartorius), con lo que desarmar¨ªa toda oposici¨®n dentro del partido a corto plazo. La argumentaci¨®n de toda esta batalla estar¨ªa en atribuir a Camacho y a sus hombres m¨¢s fieles, la responsabilidad de que CC OO no hubiera suscrito el acuerdo-marco interconfederal.
En total habr¨ªa doce secretar¨ªas. Corell, procedente de USO y miembro de la ¨²nica tendencia oficialmente reconocida dentro de CC OO -la "socialista autogestionaria"-, ser¨ªa el miembro, en solitario, del nuevo secretariado que no perteneciese al PCE. Tambi¨¦n perder¨¢ su cargo Francisco Garc¨ªa Salve, actual responsable de formaci¨®n, que no asisti¨® a la reuni¨®n en cuesti¨®n. Algunas fuentes sindicales destacaron a este peri¨®dico la continuidad en la secretar¨ªa de relaciones internacionales, de Seraf¨ªn Aliaga, que durante veinte a?os fue funcionario de la Federaci¨®n Sindical Mundial, de signo prosovi¨¦tico, en estos momentos en que CC OO pretende entrar en la Confederaci¨®n Europea de Sindicatos.
Seg¨²n las mismas informaciones, el criterio de la direcci¨®n del PCE ser¨ªa que el futuro secretariado confederal de Comisiones Obreras estuviese formado ¨²nicamente por los responsables de las secretar¨ªas, desapareciencio las actuales vocal¨ªas. De confirmarse este aspecto no formar¨¢n parte del secretariado los dirigentes de las principales organizaciones de nacionalidad o regi¨®n. En este sentido adquiere relevancia el dato de que a la reuni¨®n del pasado d¨ªa 4 no estuvo invitado ning¨²n sindicalista catal¨¢n, ni tampoco est¨¢ prevista la presencia de ninguno de ellos en el secretariado entrante. Preguntado por este peri¨®dico sobre la reuni¨®n en cuesti¨®n, Antonio Guti¨¦rrez D¨ªaz, antiguo secretario general del PSUC, afirm¨® no saber nada de ella, pese a pertenecer al Comit¨¦ Central del PCE.
Camcho, en precario
En la reuni¨®n apareci bastante expl¨ªcita la tendencia a marginar a Marcelino Camacho en un segundo plano. Carrillo desear¨ªa poder sustituir ahora a Camacho, pero ante su popularidad optar¨ªa por mantenerle como secretario general, aunque vaciando el cargo de responsabilidades. "En la pr¨¢ctica", se nos ha dicho. "Camacho pasar¨¢ a ser una figura decorativa, como lo es la Pasionaria en el PCE". El nuevo hombre fuerte de CC OO ser¨ªa o Juli¨¢n Ariza o Adolfo Pi?edo.
Nicol¨¢s Sartorius, para muchos hasta ahora n¨²mero dos de CCOO, no aparece en la soluci¨®n citada. Hace unas semanas se habr¨ªa concretado un acuerdo por el cual Sartorius abandonar¨ªa su papel de cerebro gris de la central para pasar a convertirse referentemente en dirigente del PCE. Como contrapartida, y siempre en el marco de ?un pacto entre caballeros?, Ariza se habr¨ªa comprometido a apoyar a Sartorius en lo que respecta a la actuaci¨®n de ¨¦ste dentro del PCE. Adem¨¢s se habr¨ªa propuesto la conveniencia de buscar una f¨®rmula que permitiese que Nicol¨¢s Sartorius pudiese tambi¨¦n formar parte del nuevo ejecutivo, argument¨¢ndose su condici¨®n de miembro destacado del secretariado saliente.
En lo que respecta a la comisi¨®n ejecutiva, habr¨ªa un cambio radical del equilibrio interno. As¨ª, zonas geogr¨¢ficas muy representativas estar¨¢n con una presencia inferior a la que les corresponder¨ªa. Las uniones provinciales de Madrid, Catalu?a y Andaluc¨ªa pasar¨ªan a contar ¨²nicamente con un representante cada una. Actualmente, por ejemplo, Catalu?a cuenta en la comisi¨®n ejecutiva confederal con cinco representantes.
Una minor¨ªa de los asistentes a la reuni¨®n de dirigentes sindicales comunistas habr¨ªa protestado muy airadamente por el car¨¢cter del encuentro. Este sector habr¨ªa expuesto su oposici¨®n al procedimiento, que implicaba la voluntad de no respetar la ?independencia sindical?. ?Con la supresi¨®n de las vocal¨ªas, el incremento de la centralizaci¨®n, la p¨¦rdida de fuerza de las federaciones y los territorios?, afirm¨® uno de los discrepantes, ?se acentuar¨¢ el poder del aparato, dependiente de un secretariado muy monocolor, de hecho carrillista puro?. El gran peligro de la operaci¨®n es que CC OO se convierte, cada vez m¨¢s profundamente, en la central sindical de un partido que cuenta con la preferencia de s¨®lo un 12 % del cuerpo electoral (el PCE). Con esta operaci¨®n, Santiago Carril lo pretender¨ªa, en opini¨®n de los informantes, marginar al sector cr¨ªtico del PCE y las Comisiones Obreras de Catalu?a, con lo cual debilita de paso al d¨ªscolo PSUC. Tanto en las CC OO catalanas como en el PSUC domina la tendencia denominada leninista, cuyos planteamientos coinciden en gran parte con los propios de los cr¨ªticos del PCE.
Otro punto de inter¨¦s concierne a la situaci¨®n dentro del comunismo vasco. En efecto, el posible secretario de finanzas o de organi,zaci¨®n, F¨¦lix P¨¦rez, pertenece, igual que Tom¨¢s Tueros, al sector espa?olista del comunismo vasco, opuesto a la l¨ªnea vasquista de Roberto Lertxundi. F¨¦lix P¨¦rez es una de las personas de mayor confianza de Juli¨¢n Ariza.
?Carrillo?, indic¨® uno de los informantes, ?desea asegurarse su reelecci¨®n en el pr¨®ximo congreso del PCE. De hecho esta versi¨®n es la que explica toda la operaci¨®n con respecto al II Congreso de CC OO, que se celebrar¨¢ tan s¨®lo un mes antes del X Congreso del PCE. Si sale, seg¨²n sus designios, el primero, su victoria en el segundo est¨¢ asegurada?.
Existen ya contactos formales entre los cr¨ªticos y dirigentes de CC OO de Madrid, Catalu?a, Pa¨ªs Vasco, Galicia y Andaluc¨ªa -todos ellos militantes comunistas- con el fin de preparar una propuesta de candidatura alternativa a la comisi¨®n ejecutiva, que es el ¨®rgano dirigente que elige el congreso. Posteriormente, dicha comisi¨®n elige en su seno al secretariado confederal.
En el I Congreso de CC OO, llevado a cabo hace tres a?os, s¨®lo se present¨® una candidatura, en forma de lista cerrada y bloqueada. En el Il Congreso puede producirse un fen¨®meno similar al acaecido con motivo del congreso de Uni¨®n Provincial de Madrid, celebrado hace pocos meses. En este congreso fue reelegido el cr¨ªtico Fidel Alonso.
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