Doce artistas espa?oles buscan el relanzamiento del "constructivismo"
Celebran una exposici¨®n conjunta en la Universidad de Salamanca
Desde el pasado 10 de julio hasta el pr¨®ximo 10 de agosto, el claustro renacentista de las Escuelas Menores de Salamanca es el marco de una importante muestra colectiva titulada Espacio constructivo. Encuadrada dentro del programa de actos del XVIII Curso de Verano que organiza la Universidad de Salamanca, la exposici¨®n es una excelente oportunidad para apreciar las cotas expresivas logradas por el constructivismo en nuestro pa¨ªs. Pero tambi¨¦n ha servido para que sus componentes se pregunten algunos de los serios problemas que tienen planteados e inicien la reactivaci¨®n de la tendencia.
Mientras en la periferia santanderina se cultiva, a trav¨¦s de la monograf¨ªa y el estudio, el arte de la surrealidad, en el centro, en Salamanca, se vive un momento de tal vez singular importancia para la pl¨¢stica pura. Una docena de artistas han reunido sus obras en una exposici¨®n -Espacio constructivo- que busca ser el bander¨ªn de enganche para un nuevo relanzamiento del constructivismo. Pero, parad¨®jicamente, estos artistas encuentran en su propia madurez dentro de esta tendencia y, consiguientemente, en la diversidad de sus opciones los obst¨¢culos m¨¢s dif¨ªciles para una actividad programada y com¨²n. No obstante, el n¨²cleo que compone esta exposici¨®n y que reafirma esa voluntad de relanzamiento es: Amador, Waldo Balart, Juli¨¢n Casado, Carregal, Cruz Novillo, Tom¨¢s Garc¨ªa, Juli¨¢n Gil, G¨®mez Perales, Jos¨¦ Mar¨ªa Iglesias, Angel Mateos, Povedano y Santonja.Desde la c¨¦lebre exposici¨®n Forma y medida, en 1977, que recog¨ªa en amplio abanico la producci¨®n de los artistas espa?oles constructivos m¨¢s relevantes, no se hab¨ªa logrado otra concentraci¨®n como la actual de Salamanca. Y, de hecho, esta tendencia corre peligro, ya que se encuentra en la frontera de la marginalidad. Una de las razones de esta circunstancia reside, como comenta Waldo Balart, ?en la escasa audiencia del constructivismo?. Y, no sin iron¨ªa, el pintor Tom¨¢s Garc¨ªa a?ade: ?No est¨¢ de moda, aunque tiene una latencia de a?os?
Pero lo que parece estar afect¨¢ndole m¨¢s negativamente es la imagen que se ha tejido en torno suyo. ?Nuestra actividad?, apunta Cruz Novillo, ?ha quedado presa de la simplista dicotom¨ªa racionalismo-irracionalismo, lo cual no es cierto?. Esta imagen de un arte experimental e intelectualizado les hace enfrentarse, seg¨²n comentarios de varios de estos artistas, a otras valoraciones que, como la expresividad, la espontaneidad o lo cotidiano, est¨¢n m¨¢s en boga. En la mente de todos estos artistas est¨¢ la indudable capacidad expresiva y, por tanto, comunicativa de la tendencia. ?Aunque?, comenta Amador, ?nuestro arte tiene una lectura dif¨ªcil y no causa impacto?.
La consolidaci¨®n como grupo program¨¢tico no parece ser el objetivo m¨¢s pr¨®ximo de esta asociaci¨®n de artistas. Se vislumbra como m¨¢s oportuno y rentable aunar esfuerzos para la difusi¨®n tanto del vasto corpus te¨®rico y pl¨¢stico de la tendencia como de sus propias obras. ?Se trata de hacer un frente com¨²n cada vez m¨¢s amplio?, comenta Juli¨¢n Gil, ?y que se nos preste m¨¢s atenci¨®n?, apostilla el escultor Amador.
Por otra parte, la vigencia de esta tendencia puede quedar resumida en las posturas manifestadas por dos de sus miembros. Para Waldo Balart, ?la identificaci¨®n entre significante y singnificado abre nuestra tendencia a la utilizaci¨®n ponderada de cualquier material?. Y, para Tom¨¢s Garc¨ªa, ?los problemas del color no est¨¢n resueltos, En resolver esa dificultad hay una amplia labor?.
Entre las expectativas m¨¢s inmediatas de esta agrupaci¨®n de artistas est¨¢ la edici¨®n de un libro en colaboraci¨®n con la Universidad de Salamanca, continuar con las exposiciones colectivas por diversas ciudades e intentar el resurgimiento de una nueva exposici¨®n de Forma y medida que venga a plantear la nueva situaci¨®n de esta tendencia.
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