Los democristianos tienden la mano a sus m¨¢s enconados rivales
La Democracia Cristiana (DC) salvadore?a tendr¨¢ que compartir el poder con el Partido de Conciliaci¨®n Nacional (PCN) para alcanzar la mayor¨ªa en la nueva Asamblea Constituyente. No le bastan los dos o tres esca?os que pueda sacar Acci¨®n Democr¨¢tica, un partido de centroderecha no vinculado a la represi¨®n, y parece impensable una alianza con la ultraderechista ARENA.El presidente de la DC, Julio Rey Prendes, ya tendi¨® su mano, en la madrugada de ayer, a quienes han sido sus enconados contendientes durante la campa?a. Del PCN dijo que durante sus dieciocho a?os de gobierno hab¨ªa sido un conglomerado pol¨ªtico que daba cabida desde la extrema derecha hasta el centro, pero que en la nueva situaci¨®n sus peores elementos hab¨ªan sido absorbidos por ARENA, para quedarse con dirigentes valiosos que han presentado un programa de tipo populista y con los que cabe alg¨²n entendimiento.
En las primeras horas poselectorales destaca la moderaci¨®n del ex mayor Roberto d'Aubuisson, que ha admitido el triunfo de los democristianos sin el consabido recurso al fraude.
El mismo hombre que no ces¨® de insultar a Duarte y a sus seguidores a lo largo de dos meses de campa?a civiliz¨® ayer su discurso para pedir un Gobierno de unidad nacional que permita salvar a su pa¨ªs de una bancarrota econ¨®mica que, a su juicio, llegar¨¢ en otro caso dentro de un plazo m¨¢ximo de cuatro meses.
D'Aubuisson reclama la cuota de poder que corresponde a sus diecisiete diputados en una Asamblea de sesenta. En el colmo de los virajes ideol¨®gicos, proclama que la Aamblea Constituyente debe reorientar las reformas sociales instrumentadas por la Junta, pero sin dar marcha atr¨¢s a la reforma agraria o a nacionalizaciones de la banca y el comercio exterior.
Anunci¨® que su partido presentar¨¢ un proyecto de amnist¨ªa para que "la guerrilla sepa a qu¨¦ atenerse", aunque se pronunci¨® en contra de cualquier negociaci¨®n. Rechaz¨® la expresi¨®n de "exterminar a la guerrilla", para sustituirla por una "expulsi¨®n de la invasi¨®n castrosovi¨¦tica".
Unicamente se mostr¨® contrario a que la Asamblea ratifique en su cargo de presidente a Jos¨¦ Napole¨®n Duarte, de quien dijo que servir¨ªa mejor al pa¨ªs fuera de ¨¦l, por su buena imagen internacional.
Se neg¨® a admitir que una posible presencia de ARENA en el Gobierno forzara a los norteamericanos a retirar su ayuda econ¨®mica.
Como prueba de ello, el ex mayor acababa de sostener en el hotel Camino Real, como si se tratara de que lo supiera la Prensa, una reuni¨®n informal con el embajador Deane Hinton.
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