Donald Trump y los cachorros de Elon Musk dinamitan el sistema desde dentro

Marko Elez es un ingeniero inform¨¢tico de 25 a?os especializado en inteligencia artificial que trabajaba en SpaceX y Starlink, las compa?¨ªas espaciales de Elon Musk. Era uno de los empleados que el hombre m¨¢s rico del mundo situ¨® en el Departamento del Tesoro de Estados Unidos para controlar el sistema de pagos federales, violando los protocolos y las garant¨ªas de privacidad. El jueves dimiti¨® tras salir a la luz unos tuits en los que se preciaba de ser ¡°racista antes de que estuviese de moda¡±. Un grupo de j¨®venes ingenieros como Elez han abordado otros departamentos y agencias federales. Son la punta de lanza de la ofensiva lanzada por Musk para ¡°hacer temblar el sistema¡±, como prometi¨® que har¨ªa por encargo de Donald Trump.

En menos de tres semanas, Trump ha iniciado una demolici¨®n sin complejos de parte de la Administraci¨®n que no tiene precedentes ni en el fondo ni en la forma. Primero congel¨® la financiaci¨®n federal a los Estados y las entidades sin ¨¢nimo de lucro, desafiando la Constituci¨®n y las competencias del Congreso, aunque dio marcha atr¨¢s despu¨¦s de provocar el caos en la Administraci¨®n y de que una jueza suspendiera la medida. Ahora el presidente est¨¢ desmantelando la agencia de ayuda al exterior (USAID), de la que esta semana unos operarios retiraban las letras, y la Oficina para la Protecci¨®n Financiera del Consumidor (CFPB).

Seg¨²n reconoci¨® este viernes Trump, ahora tiene en el punto de mira el Departamento de Educaci¨®n y el Pent¨¢gono. El equipo del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), dirigido por Musk, se ha presentado ya en muchos otros departamentos y agencias federales. Seg¨²n ha publicado The Wall Street Journal, la Administraci¨®n planea despidos masivos en el Departamento de Salud. En realidad, Trump y Musk est¨¢n presionando a todos los funcionarios para que dimitan. La zanahoria son unas bajas incentivadas de dudosa legalidad, y el palo, la amenaza de despido y el fin del teletrabajo. Unos 65.000 han decidido ya tirar la toalla, pero eso est¨¢ lejos del objetivo de recorte.

El asalto a agencias y departamentos federales viene acompa?ado adem¨¢s de una purga revanchista. Trump destituy¨® a la mayor¨ªa de los inspectores que supervisan a la Administraci¨®n, despidi¨® a los fiscales y empleados del Departamento de Justicia que lo investigaron a ¨¦l y suspendi¨® de empleo a los funcionarios de ¨¢reas que ha dejado vac¨ªas de contenido, incluidas las de diversidad, igualdad e inclusi¨®n. La persecuci¨®n se ha extendido a los agentes del FBI que investigaron el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, mientras Trump indultaba incluso a los condenados por los delitos m¨¢s graves.

El presidente encarg¨® a Musk acabar con ¡°el despilfarro y el fraude masivo¡± en la Administraci¨®n. Trump ha recurrido a bulos para ilustrar ese supuesto despilfarro, como los supuestos 50 millones de d¨®lares en condones que se iban a enviar a Ham¨¢s, una completa invenci¨®n. Hace una semana le preguntaron por el modo abrupto en que Musk estaba desembarcando en las agencias federales y le defendi¨®: ¡°Creo que Elon est¨¢ haciendo un buen trabajo. Es un gran recortador de gastos. A veces no estamos de acuerdo con ¨¦l. No ir¨¢ donde ¨¦l quiere ir. Pero est¨¢ haciendo un gran trabajo. Es un tipo inteligente... est¨¢ muy interesado en recortar el presupuesto de nuestro Gobierno federal¡±, contest¨®.

Cuando Elon Musk compr¨® Twitter, public¨® un mensaje en el que se le ve¨ªa reci¨¦n llegado a la sede de la empresa cargando un lavabo. Fue el preludio del recorte de costes, los despidos masivos, el desmantelamiento de las pol¨ªticas de moderaci¨®n de contenidos y la conversi¨®n de la red social en una plataforma para amplificar la desinformaci¨®n y los mensajes de odio. Con su desembarco en el Gobierno, el magnate parece dispuesto a lanzar por el desag¨¹e programas y empleados federales como si el Gobierno fuera una start-up de Silicon Valley.

El equipo de Elon Musk

El equipo de Elon Musk en el DOGE est¨¢ compuesto en parte por antiguos o actuales empleados y becarios de compa?¨ªas del multimillonario como Tesla, SpaceX, Starlink, The Boring Company, Neuralink o xAI. Uno de los empleados, Edward Coristine, tiene 19 a?os, acab¨® el instituto el a?o pasado y era becario de Neuralink. Fue despedido de la firma de ciberseguridad Path Network por filtrar informaci¨®n interna a un competidor, seg¨²n desvel¨® Bloomberg. Otro, de 21 a?os, viene de Palantir, presidida por el estadounidense crecido en Sud¨¢frica Peter Thiel, uno de los miembros de la llamada mafia de PayPal, como el propio Musk. Luke Farritor es un ingeniero inform¨¢tico de 23 a?os de Nebraska que ayud¨® a descifrar los papiros de Herculano, un gran misterio de la antig¨¹edad, utilizando inteligencia artificial y gan¨® un premio por ello. Musk y Thiel le dieron una beca. Otro ingeniero, Kevin Kliger, de 25 a?os, retuiteaba mensajes del supremacista blanco Nick Fuentes antes de borrar su cuenta en X. Los funcionarios cr¨ªticos con Trump han compartido en las redes sociales las identidades de varios m¨¢s y algunas de sus actuaciones.

Esos cachorros de Elon Musk, veintea?eros con vestimenta informal, que a veces se quedan a dormir en las propias oficinas gubernamentales, se han ido presentando en las agencias federales sin una habilitaci¨®n legal clara. Han pedido acceso a los sistemas inform¨¢ticos. En ocasiones han anunciado que habr¨ªa despidos masivos y se han puesto a entrevistar a funcionarios para preguntarles qu¨¦ habilidades tienen, a qu¨¦ se dedican y por qu¨¦ deber¨ªan conservar su trabajo. Cuando un usuario de X calific¨® este modo de proceder de segunda revoluci¨®n estadounidense, Musk afirm¨®: ¡°S¨ª, y muy necesaria¡±.

Adem¨¢s de USAID y de la CFPB, los enviados de Musk han acudido, entre otros, a los Departamentos del Tesoro, Educaci¨®n, Energ¨ªa, Vivienda, Salud y Asuntos de Veteranos, adem¨¢s de otras agencias gubernamentales. El viernes, Trump dijo en la Casa Blanca, en una rueda de prensa, que estaba ¡°muy orgulloso del trabajo que est¨¢ haciendo este grupo de j¨®venes, en general j¨®venes pero muy inteligentes¡±. ¡°Ser¨ªa mucho m¨¢s f¨¢cil no hacerlo, pero tenemos que desmontar algunas de estas cosas para encontrar la corrupci¨®n¡±, a?adi¨®.

¡°Sea lo que sea lo que est¨¦ haciendo el DOGE, no es democracia¡±, afirm¨® esta semana Chuck Schumer, l¨ªder de la minor¨ªa dem¨®crata del Senado. ¡°Esto no es una start-up tecnol¨®gica. Se trata de instituciones p¨²blicas que se ocupan de la Seguridad Social, Medicare, la defensa nacional, y velan por el bienestar del pueblo estadounidense. El pueblo tiene derecho a participar en ese debate¡±, subray¨®.

¡°En la primera Administraci¨®n de Trump hab¨ªa abogados generales, empleados federales e incluso algunos funcionarios pol¨ªticos que dec¨ªan que no har¨ªan cosas ilegales. En la segunda Administraci¨®n de Trump esos funcionarios ya no est¨¢n, los abogados generales aprobar¨¢n [las medidas] o ser¨¢n despedidos, y los servidores p¨²blicos ser¨¢n despedidos por resistirse¡±, indic¨® por correo electr¨®nico Donald Moynihan, profesor de pol¨ªticas p¨²blicas de la Universidad de Michigan.

Los jueces han frenado parte de la ofensiva. Una jueza limit¨® el acceso a los sistemas de pagos del Tesoro a solo dos miembros del equipo del DOGE y ¨²nicamente para lectura, impidi¨¦ndoles descargar los datos y compartirlos externamente con Musk y sus empleados. Este s¨¢bado, otro vet¨® el acceso por completo y orden¨® borrar el material descargado. Otro juez bloque¨® temporalmente la oferta de bajas incentivadas, y otro m¨¢s, los despidos masivos de casi todos los 10.000 empleados de USAID. En cambio, otro togado rechaz¨® una demanda de los sindicatos para impedir al DOGE el acceso a los sistemas del Departamento de Trabajo que contienen informaci¨®n confidencial sobre millones de trabajadores, incluidos aquellos que han presentado quejas contra sus empleadores. Los sindicatos dicen que tambi¨¦n hay informaci¨®n sobre investigaciones de las empresas de Musk y sobre secretos comerciales de la competencia.

El mayor triunfo en los tribunales consisti¨® en impedir la congelaci¨®n de los pr¨¦stamos, ayudas y subvenciones a los Estados y organizaciones no gubernamentales. Tras el caos creado y la decisi¨®n de la jueza que lo paraliz¨®, la oficina presupuestaria de la Casa Blanca dio marcha atr¨¢s a una maniobra que, en opini¨®n de los dem¨®cratas, invad¨ªa las competencias del Congreso. ¡°Si el presidente Trump quiere cambiar las leyes de nuestra naci¨®n, tiene derecho a pedir al Congreso que las cambie. No tiene derecho a violar la Constituci¨®n de Estados Unidos. No es un rey¡±, remarc¨® en un comunicado el senador por Vermont Bernie Sanders.

¡°Poder absoluto¡±

¡°Nuestro pa¨ªs se enfrenta a una crisis extraordinaria. Donald Trump est¨¢ intentando reclamar el poder absoluto de la presidencia¡±, denunci¨® Rosa DeLauro, representante dem¨®crata en la comisi¨®n presupuestaria de la C¨¢mara de Representantes. ¡°Trump ha dado a Elon Musk, un multimillonario irresponsable con inmensos conflictos de intereses, un acceso sin precedentes a las palancas del Gobierno y a informaci¨®n sensible y clasificada. Tal vez el trato fue que, a cambio de la contribuci¨®n de 280 millones de d¨®lares de Elon a la campa?a, ¨¦l podr¨ªa jugar a ser presidente. Parece que ese fue el trato¡±, a?adi¨® en un comunicado.

¡°Un Gobierno en la sombra no elegido est¨¢ llevando a cabo una toma de control hostil del gobierno federal. El DOGE no es una agencia gubernamental real. El DOGE no tiene autoridad para tomar decisiones de gasto. El DOGE no tiene autoridad para cerrar programas o ignorar la ley federal. No se puede permitir la conducta del DOGE. El Congreso debe tomar medidas para restablecer el Estado de derecho¡±, tuite¨® Schumer, l¨ªder dem¨®crata del Senado.

Con la metodolog¨ªa de Musk, muchas de sus acciones parecen inspiradas en el llamado Proyecto 2025, el programa de m¨¢ximos conservador elaborado por una fundaci¨®n privada para preparar el regreso al poder de los republicanos. Como candidato, Trump se desmarc¨® del documento. Como presidente electo, ha incluido en su equipo a algunos de sus responsables y est¨¢ poniendo en marcha parte de sus pol¨ªticas. Uno de los autores de ese programa es Russell Vought, al que Trump ha puesto al frente de la oficina presupuestaria de la Casa Blanca, que trabaja codo con codo con el DOGE.

¡°Las huellas de Russell Vought est¨¢n por todas partes en la congelaci¨®n ilegal de fondos de la semana pasada¡±, indica en un comunicado el jefe de Pol¨ªtica y Activismo de Groundwork Collaborative, Alex Jacquez. ¡°Detener la financiaci¨®n de la atenci¨®n sanitaria, la atenci¨®n infantil y la asistencia alimentaria de los estadounidenses no fue un error. Fue intencionado, y el Proyecto 2025 es el plan. Ahora que Vought est¨¢ dirigiendo oficialmente el espect¨¢culo, podr¨¢ desatar su agenda radical en todo el Gobierno federal. Y si los tribunales lo detienen, tiene un amigo multimillonario con las llaves y la chequera del Gobierno: Elon Musk¡±.

La Constituci¨®n otorga al Congreso la competencia sobre la creaci¨®n y desaparici¨®n de departamentos y agencias federales. La estrategia de Trump es vaciarlos desde dentro, como con USAID y la CFPB. Trump prometi¨® en campa?a eliminar tambi¨¦n el Departamento de Educaci¨®n. Es lo que espera que haga Linda McMahon, nombrada secretaria de Educaci¨®n. ¡°Le dije a Linda: ¡®Linda, espero que hagas un gran trabajo en quedarte sin trabajo¡¯. Quiero que se quede sin trabajo¡±, afirm¨® Trump este martes en la Casa Blanca.

El viernes le preguntaron a Trump si le hab¨ªa dicho a Elon Musk si hab¨ªa alguna agencia que no deb¨ªa tocar: ¡°Bueno, no hemos hablado mucho de eso. Supongo que se podr¨ªa decir que es algo de alta inteligencia o algo as¨ª. Y yo mismo lo har¨¦ si es necesario¡±, contest¨®.

Los republicanos del Congreso parecen respaldar las iniciativas de Musk. ¡°Vamos a ver muchos cambios aqu¨ª en Washington¡±, dijo el presidente de la C¨¢mara de Representantes, Mike Johnson, el d¨ªa en el que Elon Musk, con su hijo X ? A-Xii sobre los hombros, fue al Congreso a presentar el DOGE. ¡°Llevamos mucho tiempo lamentando el tama?o y el alcance del Gobierno, que ha crecido demasiado. Y perm¨ªtanme ser franco al respecto: el Gobierno es demasiado grande. Hace demasiadas cosas y no hace casi nada bien¡±, zanj¨®.

Algunos han hecho sonar las alarmas por los posibles conflictos de intereses. Musk y sus empresas est¨¢n siendo investigadas por diferentes agencias gubernamentales. Al tiempo, el multimillonario logra una enorme cantidad de dinero en contratos federales. Tambi¨¦n Palantir, la compa?¨ªa presidida por Peter Thiel (que apadrin¨® pol¨ªticamente a J. D. Vance, el vicepresidente), es contratista de la Administraci¨®n. Los analistas preguntaron a los directivos de la compa?¨ªa esta semana en la conferencia de presentaci¨®n de resultados por las posibles disrupciones provocadas por el DOGE. ¡°Nos encanta la disrupci¨®n, y lo que sea bueno para Estados Unidos ser¨¢ bueno para los estadounidenses y muy bueno para Palantir¡±, respondi¨® el consejero delegado, Alex Karp. ¡°Habr¨¢ altibajos. Hay una revoluci¨®n. A algunas personas se les corta la cabeza. Es como si nos prepar¨¢ramos para ver cosas realmente inesperadas y ganar, b¨¢sicamente. Eso es lo que vamos a hacer¡±, continu¨® sin tapujos. Palantir ha subido en Bolsa un 350% en un a?o.

Mientras, Marko Elez, el colaborador racista de Elon Musk, se prepara para volver al DOGE. ¡°Lo recuperaremos. Errar es humano, perdonar es divino¡±, tuite¨® el multimillonario en respuesta a otro mensaje del vicepresidente, J. D. Vance, que escribi¨®: ¡°Obviamente, no estoy de acuerdo con algunas de las publicaciones de Elez, pero no creo que una est¨²pida actividad en las redes sociales deba arruinar la vida de un chico. No debemos recompensar a los periodistas que intentan destruir a la gente. Nunca. As¨ª que digo que lo traigan de vuelta¡±.

A Trump le preguntaron por el caso el viernes en la rueda de prensa. ¡°No s¨¦ nada de eso en particular, pero si el vicepresidente dijo eso... ?Lo dijiste?¡±, le pregunt¨® a Vance, que estaba all¨ª presente y asinti¨®. ¡°Estoy con el vicepresidente¡±, remat¨® Trump.