Objetivo prioritario de la pol¨ªtica exterior de Calvo Sotelo

El 18 de febrero de 1981, Leopoldo Calvo Sotelo, en su discurso de investidura ante el Pleno del Congreso de los Diputados, eleg¨ªa como uno de los ejes fundamentales de su futura pol¨ªtica la opci¨®n en favor del ingreso de Espa?a en la OTAN, anunciando que UCD se propon¨ªa "iniciar las consultas con los grupos parlamentarios a fin de articular una mayor¨ªa, escoger el momento y definir las condiciones y modalidades en que Espa?a estar¨ªa dispuesta a participar en la Alianza" y terminando con los devaneos tercermundistas y de no alineaci¨®n del Presidente Adolfo Su¨¢rez.El tema de la incorporaci¨®n espa?ola a la OTAN se ven¨ªa planteando a escala nacional e internacional desde que la muerte de Franco hac¨ªa prever la pr¨®xima instalaci¨®n de un sistema democr¨¢tico en Espa?a. Ya en noviembre de 1975, la Asamblea de Uni¨®n de Europa Occidental se declaraba persuadida de que "el pueblo espa?ol encontrar¨¢ pronto el lugar que le corresponde en la OTAN y en la Comunidad Europea".

Por su parte, los diferentes partidos pol¨ªticos espa?oles tambi¨¦n hicieron de la integraci¨®n o no en la Alianza Atl¨¢ntica uno de los puntos centrales, aunque no exento de ambig¨¹edades en algunos casos, de sus programas de pol¨ªtica exterior. As¨ª, UCD en su programa electoral de 1977 se limitaba a se?alar: "El Occidente significa una orientaci¨®n b¨¢sica que viene impuesta por nuestra posici¨®n geogr¨¢fica y nuestra vinculaci¨®n hist¨®rico-cultural. Espa?a debe aceptar la responsabilidad que le corresponde de participar en la defensa de ese conjunto". La posici¨®n centrista ser¨ªa mucho m¨¢s terminante en I Congreso, en octubre de 1978: "UCD es partidaria de la incorporaci¨®n de nuestra naci¨®n al pacto de alianza que actualmente asocia a la mayor parte de los pa¨ªses de la Europa occidental: la Alianza Atl¨¢ntica".

En cuanto al PSOE, en su XVII Congreso, celebrado en diciembre de 1976, declaraba: "Una Espa?a democr¨¢tica estar¨¢ en condiciones de marcar su independencia frente a los bloques militares (OTAN y Pacto de Varsovia)". M¨¢s tajante a¨²n ha sido el Partido Comunista de Espa?a en la oposici¨®n al ingreso de nuestro pa¨ªs en la OTAN, tanto en sus programas electorales como en las resoluciones de sus congresos. Por su parte, Alianza Popular fij¨® desde el principio "la incorporaci¨®n a Europa y a la defensa occidental" como uno de sus objetivos prioritarios, aunque afirmando que la entrada en la Alianza Atl¨¢ntica no podr¨ªa hacerse a cualquier precio.

En estas condiciones, el 20 de agosto de 1981, el Consejo de Ministros se pronunciaba a favor de la adhesi¨®n a la OTAN. Once d¨ªas m¨¢s tarde se presentaba en la Secretar¨ªa General del Congreso el expediente para la petici¨®n de ingreso de Espa?a en la Alianza, solicitando el debate parlamentario por el art¨ªculo 94.1 de la Constituci¨®n, que s¨®lo estipula la necesidad de que las Cortes Generales concedan su autorizaci¨®n por una mayor¨ªa simple.

Campa?as anti-OTAN

Mientras tanto, el PSOE iniciaba por aquellas fechas una campa?a bajo el lema "OTAN, de entrada no", recabando que el ingreso se realizase previo refer¨¦ndum. La recogida de firmas en apoyo de esta propuesta fue compartida tambi¨¦n por el PCE, que tambi¨¦n inici¨® una campa?a con el lema inequ¨ªvoco "No a la OTAN".

El 8 de octubre, la Comisi¨®n de Exterioes del Congreso autorizaba al Gobierno a concluir la adhesi¨®n de Espa?a al Tratado del Atl¨¢ntico Norte, que deber¨ªa ser ratificada por el pleno de la C¨¢mara. Mientras tanto se produc¨ªan en diversos lugares de Espa?a una serie de manifestaciones en contra de esta decisi¨®n, iniciadas meses antes con la marcha sobre Torrej¨®n el 25 de enero de 1981 y continuadas el 5 de julio por un festival anti-OTAN, que reuni¨® a unas 50.000 personas. El 15 de noviembre, una manifestaci¨®n bajo el lema "Por la paz, el desarme y la libertad" reun¨ªa a unas 250.000 personas durante las casi cinco horas que dur¨® los asistentes corearon decenas de frases en contra del ingreso de Espa?a en la OTAN.

El 27 de octubre se iniciaba en el Congreso de los Diputados el debate sobre la adhesi¨®n a la Alianza Atl¨¢ntica en un clima tenso con bastantes enfrentamientos entre la derecha y la izquierda. Las minor¨ªas nacionalistas vasca y catalana, una inc¨®gnita hasta entonces, se alinearon decididamente con las posiciones favorables al ingreso. UCD, Coalici¨®n Democr¨¢tica, PNV y Convergencia i Uni¨® suscribieron, con un total de 186 votos, en los que se incluy¨® el diputado navarro Aizp¨²n, del Grupo Mixto, la iniciativa del Gobierno. Los partidos de la izquierda parlamentaria, PSOE, PCE, PSA, junto con la mayor¨ªa de los miembros, del Grupo Mixto, sumaron 146 votos en contra.

El 24 de noviembre se repet¨ªa, tambi¨¦n durante tres d¨ªas, el debate en el Senado con las mismas argumentaciones que en el Congreso. Los resultados finales, que autorizaban definitivamente al Gobierno para proceder a la adhesi¨®n de Espa?a a la OTAN, fueron de 106 votos a favor, 60 en contra y una abstenci¨®n.

Desde ese momento, el Gobierno quedaba facultado para realizar los contactos oficiales con la OTAN, iniciados el 3 de diciembre pasado con la presentaci¨®n de una se?al, la carta del ministro de Asuntos Exteriores, Jos¨¦ Pedro P¨¦rez-Llorca, en la que se expresaba la disposici¨®n de Espa?a para adherirse a la Alianza. El 10 de diciembre, los quince pa¨ªses miembros representados por sus ministros de Asuntos Exteriores firmaban en Bruselas el protocolo redactado por el Consejo Atl¨¢ntico invitando a Espa?a a la adhesi¨®n.

Enviado a cada uno de los pa¨ªses miembros para su ratificaci¨®n aprobatoria a nivel de Gobierno o a nivel de Parlamento, seg¨²n lo dispuesto en su Derecho interno, Canad¨¢ iniciaba, el 8 de enero de 1982, el proceso de ratificaciones, concluido el pasado 25 de mayo tras la ratificaci¨®n por el Parlamento griego.