El Comit¨¦ Ejecutivo de UCD analizar¨¢ ma?ana cuatro proyectos contrapuestos sobre la crisis del partido

Al menos cuatro documentos diferentes ser¨¢n presentados ma?ana en la reuni¨®n del Comit¨¦ Ejecutivo de Uni¨®n de Centro democr¨¢tico (UCD). Esto constituye una buena muestra de la divisi¨®n y confusi¨®n reinantes en el partido en el Gobierno tras el "mes de reflexi¨®n" que UCD se dio de plazo para intentar recuperarse del fracaso de las elecciones andaluzas.

Cuando ayer conclu¨ªa el per¨ªodo de sesiones en el Congreso de los Diputados, una mayor¨ªa de parlamentarios centristas trataba de averiguar el sentido de los ¨²ltimos pactos entre las diversas familias ucedistas, en medio de los m¨¢s diversos rumores. La gran inc¨®gnita, a pocas horas de la celebraci¨®n de la reuni¨®n del ejecutivo, es saber si Adolfo Su¨¢rez, a la cabeza de sus fieles, abandonar¨¢ el partido para poner en marcha su propia opci¨®n pol¨ªtica de centropopulismo o permanecer¨¢ en UCD.Las distintas posiciones evidenciaban ayer que existen grandes posibilidades de ruptura en el seno del partido gubernamental, si bien se registran todav¨ªa algunos intentos de s¨ªntesis y conciliaci¨®n, aparentemente llamados al fracaso, seg¨²n lo admiten sus propios promotores, entre ellos Fernando Abril.

Mientras el democristiano Oscar Alzaga parec¨ªa reafirmarse en su intenci¨®n de abandonar el centro para coaligarse con la alianza popular de Manuel Fraga, una mayor¨ªa de integrantes del sector democristiano se decantaba por mantenerse en UCD, pero dentro de un partido renovado y sin el peso de los azules. Los democristianos Fernando Alvarez de Miranda, I?igo Cavero, Javier Rup¨¦rez y otros querr¨ªan formar un centro en el que conviva esta ideolog¨ªa con la liberal, con la inclusi¨®n de Antonio Garrigues y aceptando la permanencia de Adolfo Su¨¢rez.

Sin embargo, la facci¨®n liberal partidaria de unirse a Garrigues, uno de cuyos m¨¢s fieles representantes es Joaqu¨ªn Mu?oz Peirats, se muestra m¨¢s radicalizada en sus postulados: pretende el abandono de UCD y de sus siglas, la formaci¨®n de un partido propio para los liberales -para el que incluso se ha pensado ya el nombre de Partido Dem¨®crata Liberal- y llegar a una coalici¨®n electoral con los democristianos, constituidos igualmente en partido. El propio Mu?oz Peirats as¨ª lo ha confirmado a este peri¨®dico. En esta coalici¨®n no ser¨ªan bienvenidos los azules pero, tampoco, y esta es la diferencia de lo que predican los democristianos, ser¨ªan admitidos los suaristas, por entender, en palabras de Mu?oz Peirats, que "no pueden convivir tantas ideolog¨ªas juntas, y la experiencia anterior de UCD en este sentido se ha mostrado fracasada".

La f¨®rmula Calvo-Sotelo

Los rostros electorales de la citada f¨®rmula ser¨ªan primordialmente Landelino Lavilla y en segundo t¨¦rmino Antonio Garrigues, y mediante esta soluci¨®n se tratar¨ªa de frenar la salida hacia la coalici¨®n con Fraga de algunos de los parlamentarios que pretenden acompa?ar a Alzaga en su fuga. En medios centristas se asegura que apenas una docena de diputados y senadores est¨¢ decidida hoy a abandonar UCD para engrosar la coalici¨®n fraguista, ante la ausencia de garant¨ªas de que obtendr¨¢n un buen puesto en las futuras listas electorales. Se afirma incluso que el "n¨²mero dos" de Alianza Popular, Fernando Su¨¢rez, habr¨ªa advertido seriamente a un cercano seguidor de Alzaga que "no se haga ilusiones" sobre sus posibilidades de obtener un esca?o en las pr¨®ximas elecciones. El portavoz socialista S¨¢enz Cosculluela lleg¨® a afirmar ayer que Fraga y Oscar Alzaga podr¨ªan haber llegado ya incluso a un reparto electoral del territorio nacionalFrente a estas soluciones "escisionistas" el presidente Calvo Sotelo propondr¨¢ en la reuni¨®n del comit¨¦ ejecutivo, soluciones ecl¨¦cticas, tendentes a conciliar las ambiciones y postulados de las diversas familias ucedistas. Aunque poco optimista sobre su futuro pol¨ªtico poselectoral, Calvo Sotelo pensaba ayer proponer al ejecutivo un plan de "salvaci¨®n" del partido, contando b¨¢sicamente con el apoyo del sector azul, del ministro de Asuntos Exteriores, Jos¨¦ Pedro P¨¦rez Llorca, y del de Justicia, P¨ªo Cabanillas. El plan consistir¨ªa b¨¢sicamente, y en l¨ªneas generales en situar a Lavilla en la futura presidencia del partido y como primer candidato ante las elecciones generales, mientras un azul, Mart¨ªn Villa o Ros¨®n, se har¨ªa cargo de la secretar¨ªa general del partido y se prometer¨ªan -ciertamente sin muchas esperanzas, como confiesan los mismos leopoldoistas- importantes parcelas de poder en el aparato organizativo del partido y en la comisi¨®n electoral a los suaristas.

Calvo Sotelo baraja tambi¨¦n proponer la disyuntiva de convertir a UCD en una federaci¨®n de partidos, caso de que se atisve la posibilidad de que el sector suarista y el grupo de Oscar Alzaga no vayan a consumar su salida de UCD. El presidente baraja tambi¨¦n la hip¨®tesis de formar una "comisi¨®n nacional" que de alguna manera sustituya al actual secretariado del partido.

Los azules, aislados

Sin embargo, esta soluci¨®n, impulsada fundamentalmente por los azules, en su deseo de no quedar aislados por el rechazo de democristianos-liberales y de los suaristas parece destinada a tropezar con la rotunda negativa de todos. Adolfo Su¨¢rez se mantiene en una posici¨®n irreductible y sus desavenencias personales con Calvo Sotelo parece: insalvables, seg¨²n reconocen ambos sectores.Todo ello muestra que existen pocas posibilidades de llegar a un acuerdo entre los diversos sectores centristas, si bien es posible que la reuni¨®n de ma?ana del comit¨¦ ejecutivo no marque la ruptura definitiva y sean, convocadas posteriores reuniones de este ¨®rgano directivo antes de la "cumbre" del consejo pol¨ªtico.

Numerosos diputados centristas despidieron ayer el per¨ªodo de sesiones convencidos de que les quedar¨¢n escasas ocasiones -tal vez algunas sesiones plenarias en septiembre- para ocupar el esca?o: muchos -de ellos quedar¨¢n, voluntaria o involuntariamente, al margen de las diversas "operaciones pol¨ªticas", que se fraguan, con toda urgencia, en los distintos cen¨¢culos centristas.