La Polic¨ªa Municipal de Renter¨ªa es el ¨²nico cuerpo de seguridad en una ciudad de 45.000 habitantes

ENVIADOS ESPECIALESLa pol¨ªtica desarrollada por coalici¨®n abertzale Herri Batasuna (14B) en los ¨²ltimos a?os, de cara a potenciar la actuaci¨®n exclusiva de los polic¨ªas municipales en aquellas localidades cuyas alcald¨ªas ostentan representantes de esta coalici¨®n, podr¨ªa quedar en evidencia en los pr¨®ximos d¨ªas si la comisi¨®n investigadora del Ayuntamiento de Renter¨ªa (Guip¨²zcoa) demuestra que existi¨® conducta negligente en este cuerpo a la hora de evitar la explosi¨®n de la bomba que, colocada por ETA Militar, caus¨® el pasado s¨¢bado grav¨ªsimas lesiones al ni?o Alberto Mu?agorri, como lo demuestran las diligencias que obran ya en poder del juez.

El lunes ser¨¢ sometida a votaci¨®n en este municipio una moci¨®n presentada por Euskadiko Ezkerra (EE) y apoyada por los concejales socialistas, mediante la que se pide la dimisi¨®n del jefe de la Polic¨ªa Municipal de esta localidad, Jes¨²s Mar¨ªa Bagu¨¦s, hombre pr¨®ximo a HB.Todos los indicios apuntan, de momento, a que en el suceso de Renter¨ªa podr¨ªa haberse producido una supuesta negligencia por parte de la Polic¨ªa Municipal, precisamente desde hace algunos a?os el ¨²nico cuerpo de: seguridad que opera en esta poblaci¨®n. La Polic¨ªa Municipal de Renter¨ªa la dirige un abogado sin suerte en este terreno profesional, que accedi¨® hace poco tiempo al frente de ella, tras realizar una oposici¨®n en la que participaron solamente tres aspirantes: ¨¦l mismo, licenciado en Derecho, y dos actuales cabos de la Polic¨ªa Municipal.

Bagu¨¦s, que recibi¨® a, EL PAIS con un "no hay comentarios", est¨¢ vinculado estrechamente al alcalde de la ciudad, Sabin Olaizaola (HB) y es sobradamente conocido en el pueblo por sus ideas pr¨®ximas a esta coalici¨®n. Ha sido con anterioridad juez de paz y durante algunos a?os comparti¨®, con otros dos letrados un bufete en Renter¨ªa. Su acceso a la jefatura de la Polic¨ªa Municipal cont¨® con la oposici¨®n de los concejales socialistas, aunque fue apoyado no s¨®lo por los ediles de HB sino tambi¨¦n por los del Partido Nacionalista Vasco (PNV).

Fuentes policiales de toda solvencia denunciaron a este peri¨®dico la falta de coordinaci¨®n y apoyo, especialmente en la lucha contra el terrorismo, que suelen ofrecer los polic¨ªas municipales de localidades como Renter¨ªa o Hernani, esta ¨²ltima tambi¨¦n en Guip¨²zcoa, cuyas alcald¨ªas tienen al frente representantes de HB. Renter¨ªa, que tiene actualmente 46.000 habitantes, dispone solamente de cincuenta polic¨ªas municipales, ¨²nico cuerpo de seguridad con que cuenta toda su poblaci¨®n y ya se ha hecho p¨²blico en m¨²ltiples ocasiones que esta localidad, as¨ª como otras que se encuentran en la mis ma situaci¨®n, son los refugios, san tuarios y ghetos de los terroristas de ETA, que suelen pasearse tranquilamente por sus calles.

Oposici¨®n a las comisar¨ªas

Recientemente cuando una pareja de polic¨ªas nacionales de San Sebasti¨¢n fueron a patrullar por las calles de esta ciudad intentaron identificar a una persona que les result¨® sospechosa. Esta persona sac¨® un rev¨®lver y dispar¨® contra los dos agentes, dejando olvidado el Documento Nacional de Identidad en el momento en que se dio a la fuga. Comprobada su fotograf¨ªa result¨® que se trataba de Miguel Angel Apalategui Ayerbe, Apala, uno de los terroristas m¨¢s buscados de ETA Militar.

La situaci¨®n de Renter¨ªa viene produci¨¦ndose desde que hace alrededor de tres a?os una orden ministerial obligara a que los puestos de la Guardia Civil desaparecieran de localidades con m¨¢s de veinte mil habitantes, medida que aunque no se aplic¨® tajantemente ha dejado a ciertas poblaciones en manos de la Polic¨ªa Municipal. Estas localidades se han opuesto a trav¨¦s de organizaciones pol¨ªticas y ciudadanas, y ayuntamientos, a la creaci¨®n de nuevas comisar¨ªas de polic¨ªa.

El Ayuntamiento de Renter¨ªa hizo p¨²blico hace unos d¨ªas un bando mediante el que ped¨ªa la colaboraci¨®n de los ciudadanos para esclarecer las circunstancias que rodearon la explosi¨®n de la bomba que caus¨® graves heridas a Alberto Mu?agorri. Este peri¨®dico comprob¨® el pasado jueves la llegada del primer vecino de esta localidad al ayuntamiento para informar a la comisi¨®n investigadora sobre lo ocurrido. Este hombre manifestaba, seg¨²n declar¨® posteriormente, que a las siete de la ma?ana del s¨¢bado 26 no hab¨ªa ninguna protecci¨®n de la Polic¨ªa Municipal en tomo a la mochila sospechosa que se encontraba junto a la puerta del almac¨¦n de Iberduero de esta localidad. "Yo pas¨¦ por all¨ª dos veces sobre las siete de la ma?ana", comentaba, "y no hab¨ªa nadie. Estuve a punto de manipular la mochila porque me llam¨® la atenci¨®n el verla all¨ª. Sin embargo no la toqu¨¦ y luego me enter¨¦ de que hab¨ªa habido una explosi¨®n. Menos mal que no fue mi hijo el que pasaba por ese lugar, porque si hubiera sido ¨¦l, cojo la escopeta y busco a los responsables... que aqu¨ª nos conocemos todos".

Un alto responsable policial destinado en las provincias vascas comentaba a EL PAIS que desde hace alg¨²n tiempo los cuerpos y fuerzas de la seguridad del Estado adoptan una serie de medidas precautorias cuando suelen producirse llamadas nocturnas advirtiendo de la localizaci¨®n o colocaci¨®n de supuestos artefactos explosivos, ya que la experiencia ha demostrado que en la mayor¨ªa de los casos son trapos. "En el caso de Renter¨ªa", dijo, "la polic¨ªa, concretamente el 091 de San Sebasti¨¢n, ha actuado en todo momento con correci¨®n. Fue la propia Polic¨ªa Municipal la que nos avis¨® y nosotros los que le pedimos que comprobara si ofrec¨ªa la mochila indicios o aspectos sospechosos de bomba. Ellos, tras la comprobaci¨®n, nos llamaron y nos dijeron que hab¨ªan mirado el paquete y que no resultaba sospechoso. No obstante les pedimos que establecieran protecci¨®n, cosa que no hicieron".

A trav¨¦s de la investigaci¨®n ordenada por el Gobierno Civil y que, aparentemente, exime de responsabilidades a la polic¨ªa gubernativa, se han detectado una serie de contradicciones entre la propia Polic¨ªa Municipal, que, seg¨²n este alto responsable, se centran en las declaraciones prestadas por el cabo Juan Antonio Iglesias, al mando de la Polic¨ªa Municipal aquella noche, y el telefonista de la inspecci¨®n. El primero dice que fue advertido del hallazgo del artefacto a trav¨¦s de una pareja de servicio, que se lo comunic¨® a trav¨¦s de los transmisores. Sin embargo, el segundo indica que estuvo toda la noche escuchando los transmisores y que a trav¨¦s de ellos no escuch¨® ning¨²n aviso.

Este es uno de los detalles m¨¢s confusos que presentan las diligencias que se encuentran ya en poder del juez. La fuente informante indic¨® que le extra?aba mucho que ETA Militar, al ver frustrada su acci¨®n por un fallo t¨¦cnico en el ajuste del reloj incorporado a la bomba (deber¨ªa haber estallado poco despu¨¦s de la media noche, y lo hizo pasado el mediod¨ªa) no advirtiera de que se trataba efectivamente de un artefacto, como lo ha hecho en otras ocasiones.

Uno de los aspectos que confirmaban las sospechas de la comisi¨®n investigadora, compuesta no s¨®lo por HB, sino tambi¨¦n por el resto de los representantes de las fuerzas pol¨ªticas que integran el Ayuntamiento de Renter¨ªa -PNV, PSOE y EE- acerca de la actitud de la Polic¨ªa Municipal aquella noche, qued¨® reflejado gr¨¢ficamente el pasado jueves a mediod¨ªa, cuando se le orden¨® al jefe de la Polic¨ªa Municipal, Jes¨²s Mar¨ªa Bagu¨¦s, que se presentara en la reuni¨®n municipal con la m¨¢quina de escribir de la inspecci¨®n, con objeto de comprobar si los partes presentados se ajustaban al tipo de letra de esa m¨¢quina.

El secretario del Ayuntamiento de Renter¨ªa, que act¨²a como portavoz de la citada comisi¨®n, afirm¨® a este peri¨®dico, momentos despu¨¦s de la prueba de la m¨¢quina de escribir, que se sospechaba una negligencia de la Polic¨ªa Municipal en el caso de la bomba y precis¨® que, de confirmarse, se proceder¨ªa a sancionar administrativamente a los responsables.

Un situaci¨®n insostenible

En Renter¨ªa, como en otras localidades del Pa¨ªs Vasco, impera la ley del silencio y del terror. "En Renter¨ªa", manifestaba uno de sus vecinos, "hay miedo, se palpa el terror y la amenaza si no est¨¢s con ellos. Si con Franco no pod¨ªamos hablar, ahora estamos pasando por la misma situaci¨®n. Es la dictadura del terror".

El PSOE, que obtuvo alrededor de trescientos votos m¨¢s que Herri Batasuna en las elecciones municipales de Renter¨ªa no pudo conseguir esta alcald¨ªa porque careci¨® del apoyo del resto de las fuerzas pol¨ªticas, especialmente del PNV. HB logr¨® obtener este puesto y no han sido pocas las ocasiones en que los concejales socialistas han sufrido veladas o directas amenazas. Por este motivo un concejal socialista tuvo que salir del pueblo y ceder su puesto a otro.

"La situaci¨®n es insostenible", comentaban. "Cada d¨ªa que pasa se aprecia con mayor intensidad una tensi¨®n que no sabemos en qu¨¦ va a terminar". Pero Renter¨ªa est¨¢ dominada exclusivamente por unas cien personas. El resto quieren vivir tranquilamente, pero el miedo no les permite hablar. Este es el motivo de que muchos de los vecinos coincidieran en estas opiniones pero se negaran a facilitarnos sus nombres.

Una de las personas que acud¨ªa como p¨²blico al ¨²ltimo pleno del Ayuntamiento de Renter¨ªa, donde se debati¨® el suceso del que fue v¨ªctima Alberto Mu?agorri, manifest¨® que "no se puede sacrificar a Renter¨ªa por hechos pol¨ªticos, sean de donde sean, y s¨®lo por el hecho de que en dicho pueblo haya aparecido un peque?o grupo de matones que pretenden justificar una revoluci¨®n cuando no la vive todo el pueblo". Esta intervenci¨®n produjo un grave altercado durante el desarrollo del pleno.