La borracher¨ªa

La borracher¨ªa fue toda una instituci¨®n simb¨®lica en la bodega Domecq. Simb¨®lica, si la trasladamos al amplio marco de una mentalidad se?orial y caciquil, apegada a la tierra, y, por tanto, al sector primario de producci¨®n. Tan solo hace un a?o que esta instituci¨®n desapareci¨® de la bodega, siendo sustitu¨ªda por la sacrist¨ªa, en la que el visitante puede degustar los productos.Exclusivo lugar de reuni¨®n de la familia Domecq y los ¨ªntimos, en la bodega, en ella se daban cita todas las ma?anas sus miembros, donde, entre copa y copa, y taquitos de jam¨®n y queso, hablaban de sus cosas; aunque, parece ser, jam¨¢s se trataba sobre el trabajo de la bodega.

"Nadie es m¨¢s Domecq que Domecq", eso se dec¨ªa en Jerez, al igual que todav¨ªa se suele emplear el vocablo: "mi se?orito". Las relaciones de paternalismo comenzaban en la c¨²spide de la familia Domecq y culminaban en el ¨²ltimo de sus empleados. No es de extra?ar, por tanto, que los propios trabajadores de la bodega disfruten de alguna manera con la idea de que esta les pertenece. Unos trabajadores que hasta el presente han disfrutado de unos convenios sagrados, que han mantenido la paz social y que, se han acomodado al estilo tradicional de producci¨®n de los caldos jerezanos, por otra parte, m¨¢s pr¨®ximos a la brujer¨ªa que al alambique.

"Los trabajadores de Domecq somos los primeros interesados en que la empresa se reflote, pero tambi¨¦n deseamos. que nuestra situaci¨®n sea digna dentro de la empresa", este es el principal argumento manejado p¨²blicamente, desde que comenzara la huelga, por el comit¨¦ de empresa de Pedro Domecq S.A.

Un comit¨¦ de empresa en el que ninguna central sindical fuerte tiene hegemon¨ªa, integrados por miembros independientes y afiliados a CC.OO., UGT, CNT y a la Confederaci¨®n Libre Aut¨®noma de Trabajadores (CLAT), cuya influencia se reduce al marco de Jerez.

La huelga, apoyada por la mayor¨ªa de la plantilla de Domecq, se est¨¢ desarrollando con un estilo estricto de manual de sindicato revolucionario, ciment¨¢ndose en tres principios cl¨¢sicos de este tipo de acciones: la unidad de los huelguistas, la constancia en las acciones y la solidaridad de los compa?eros del sector. Por todo ello los trabajadores de Domecq muestran su satisfacci¨®n, dispuestos a mantener sus puestos de trabajo en una ciudad como Jerez que cuenta con unos 10.000 parados.

Pero no todos son flores, en este sentido, el secretario provincial del PSOE, Alfonso Perales, indicaba que la ausencia de una representaci¨®n sindical hegem¨®nica en Jerez, donde existe una gran dispersi¨®n en esta materia, estaba dando lugar al nacimiento de una serie de brotes sindicales de corte gremial y radicalista, como lo demostraban algunas acciones del CLAT y de la CNT.