La nacionalizaci¨®n evito la quiebra de la banca privada mexicana
Aparte de la total sorpresa que la nacionalizaci¨®n de los bancos mexicanos ha provocado, la comunidad bancaria internacional ha recibido la decisi¨®n de L¨®pez Portillo con alivio y, pese a la filosof¨ªa general en contra de cualquier incautaci¨®n, muchos banqueros internacionales est¨¢n convencidos que la dr¨¢stica medida era la ¨²nica forma de evitar una quiebra global del sistema bancario mexicano.
Desde que el problema financiero mexicano sali¨® a la luz p¨²blica con toda su virulencia y gravedad hace menos de tres semanas, los bancos internacionales, en su mayor¨ªa norteamericanos, hab¨ªa expresado sus dudas sobre la capacidad del sistema bancario mexicano para manejar la situaci¨®n. El problema se ve¨ªa agravado por las medidas precautorias adoptadas por el resto de los bancos privados mundiales, que hab¨ªan cortado su lazos con sus colegas mexicanos con el fin de protegerse ante una declaraci¨®n de insolvencia por parte de algunos de los m¨¢s perjudicados.Pero la firme decisi¨®n del presidente L¨®pez Portillo -estiman fuentes bancarias neoyorquinas consultadas por este peri¨®dico- ha confirmado la intenci¨®n del Gobierno mexicano de responder de todas las deudas del pa¨ªs, incluidas las de la banca privada. "De esta manera", declar¨® un banquero vinculado a una instituci¨®n con fuertes intereses en M¨¦xico, "la banca privada internacional salva el tipo, aunque el coste haya sido la nacionalizaci¨®n de sus colegas mexicanos".
Elevada deuda exterior
La deuda exterior de M¨¦xico fue situada por L¨®pez Portillo, en su emotivo discurso de despedida a la C¨¢mara legislativa de su pa¨ªs, en unos 65.000 millones de d¨®lares. Esta cantidad, sin embargo, es contestada por la banca internacional, que la calcula en las proximidades de los 85.000 millones de d¨®lares.Los servicios de deuda para este a?o de M¨¦xico rozan la cifra de los 20.000 millones de d¨®lares, y, como consecuencia del hundimiento general de los precios del petr¨®leo (fuente principal de ingresos del pa¨ªs), se estima que M¨¦xico se ver¨¢ incapaz de hacer frente a los mismos.
Un primer indicio de la gravedad de la situaci¨®n mexicana es el cr¨¦dito al Banco Central mexicano, que varios pa¨ªses de la OCDE, incluida Espa?a, tuvieron que conceder la semana pasada, en condiciones extraordinarias, por un importe de 1.850 millones de d¨®lares.
Que M¨¦xico haya recurrido a esta v¨ªa l¨ªmite de apoyo internacional contribuy¨® al cierre precipitado de los canales habituales de financiaci¨®n para el Estado azteca, que es el principal prestatario en los mercados privados internacionales de capital. Su capacidad de endeudamiento, ajuicio de los bancos privados, hab¨ªa tocado fondo y, pese a los esfuerzos del ministro de Finanzas azteca, Jes¨²s Silva Herzog, los cr¨¦ditos internacionales han quedado lejos de su alcance.
La nacionalizaci¨®n del sistema bancario privado mexicano afecta a unos veinticinco bancos privados y a otras 35 instituciones en los que el capital privado se mezcla con el p¨²blico. En total, el activo global de estas instituciones es de unos 1.816.000 millones de d¨®lares, con una relaci¨®n de cien pesos por d¨®lar. Medios privados neoyorquinos estiman que el Gobierno mexicano tendr¨¢ que medir mucho su prop¨®sito de compensar a los accionistas privados de cada banco a la luz del efecto que esto puede tener sobre el sector empresarial mexicano y sobre la confianza futura de las empresas extranjeras en dicho pa¨ªs.
Para los bancos espa?oles, la nacionalizaci¨®n de la banca mexicana representar¨¢ a su vez una garant¨ªa de recuperar sus cr¨¦ditos. La banca espa?ola se ha comprometido con esperanza en M¨¦xico en los ¨²ltimos cinco a?os y ha participado en varios cr¨¦ditos sindicados concertados con el Estado mexicano. La importancia de estos compromisos queda reflejada en la importante participaci¨®n del Banco de Espa?a en el cr¨¦dito de 1.850 millones de d¨®lares para M¨¦xico.
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