La contrataci¨®n temporal ha descendido desde la firma del Acuerdo Nacional sobre Empleo

La media mensual de contratos temporales sufri¨® un importante descenso como consecuencia de la aplicaci¨®n de los programas de fomento de empleo recogidos en el Acuerdo Nacional sobre Empleo (ANE). Hasta la firma del ANE, se encontraban en vigor los programas de los Pactos de la Moncloa que, desde 1978, hab¨ªan evolucionado desde una media mensual de 11.515 contratos a 51.729 en el mes de julio de 1981. A partir de esa fecha, firma del ANE, la media se situ¨®, en ese mismo a?o, en 13.595 contratos temporales. En 1982, en plena vigencia del ANE, la media mensual ha sido de 19.911. Todo ello seg¨²n datos del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.

A tenor de los datos suministrados por el Ministerio de Trabajo, el Acuerdo Nacional sobre Empleo no favoreci¨® la contrataci¨®n temporal, a pesar de las facilidades introducidas con los decretos de junio de 1981, generados a la sombra del ANE. Por el contrario, la contrataci¨®n temporal, que hasta entonces estaba regulada por los programas surgidos de los Pactos de la Moncloa, tuvo una favorable acogida en los a?os en los que se encontr¨® en vigor.En 1978, primer a?o de su vigencia, fue suscrita una media mensual de 11.515 contratos, aproximadamente el 10% del total de colocaciones registradas. En 1979 se superaron ligeramente los 30.000 mensuales, lo que vino a significar m¨¢s del 23% del total de empleos, y en 1980, la media mensual de contratos temporales firmados fue de 43.023 (el 27,1% del total de colocaciones). Hasta julio de 1981, fecha en la que quedaron derogados los citados decretos y entr¨® en vigor la nueva normativa surgida como consecuencia del ANE, la media mensual era de 51.729 contratos temporales (el 27,6% de los nuevos empleos).

El incremento en la contrataci¨®n temporal, que ven¨ªa registr¨¢ndose desde 1978, cay¨® bruscamente a partir de julio de 1981. Los nuevos decretos, a pesar de ofrecer, en teor¨ªa, mayores facilidades a los empresarios, no cuentan, sin embargo, con su opini¨®n favorable. La contrataci¨®n temporal cae en picado y no logra en el a?o y medio que ha tenido de vigencia alcanzar las cotas logradas con la normativa anterior.

As¨ª, desde agosto de 1981 hasta diciembre de ese mismo a?o, la media mensual de contratos temporales baj¨® a los 13.595 (el 10,4% de total de colocaciones). Y en 1982 la media sube a los 19.911 (el 14,8% del total). No puede decirse sin embargo que se haya experimentado un incremento homog¨¦neo, ni siquiera que la tendencia haya ido en aumento. Las oscilaciones han sido constantes, mes por mes, fen¨®meno que no s¨®lo puede explicarse por la estacionalidad de determinados trabajos.

Durante 1982 -hasta el mes de octubre, ¨²ltima fecha que recoge el estudio del Ministerio de Trabajo- las cifras de contratos mensuales han sido muy iguales y, aparentemente, han encontrado su techo. El mayor n¨²mero de contratos temporales firmados corresponde al mes de octubre, con 27.911 colocaciones temporales registradas, y la m¨¢s baja al mes de agosto en que se firmaron 15.541 contratos temporales.

Contrataci¨®n por sectores

Las empresas de menos de cincuenta trabajadores son las que m¨¢s han utilizado la contrataci¨®n temporal. En el primero y segundo trimestre de 1982, seg¨²n los datos del Ministerio de Trabajo, este tipo de empresas suscribieron el 62,3% y el 63% respectivamente de los contratos temporales suscritos, mientras que las empresas de m¨¢s de 250 trabajadores representaban, en el ¨²ltimo per¨ªodo para el que se dispone de informaci¨®n, ¨²nicamente el 6,3% de las colocaciones temporales.Por ramas de actividad, construcci¨®n, industrias de la alimentaci¨®n, comercio y hosteler¨ªa son las que m¨¢s han recurrido a esta modalidad de contrataci¨®n. Son ramas, tal como hace constar el citado informe, en las que se da un mayor ¨ªndice de empleo estacional o eventual.

Por lo que se refiere a la duraci¨®n de los contratos, los datos reflejan que m¨¢s del 66% de los suscritos lo fueron por per¨ªodos de seis meses o menos, espacio de tiempo muy inferior al de las contrataciones efectuadas al amparo de otros programas de fomento de empleo. S¨®lo el 10% de los contratos temporales tuvieron una duraci¨®n superior a un a?o y menos del 3% superaron los dos a?os.

El 24,8% de las colocaciones logradas con esta modalidad de contrataci¨®n lo fueron por un per¨ªodo de tres meses o menos. Y el 41,3% fueron contratos que superaron los tres meses y no pasaron de seis. Con duraci¨®n de entre seis meses y un a?o fueron suscritos el 23,3% de los contratos temporales. Las nuevas modificaciones introducidas al ser prorrogados los contratos temporales el pasado 29 de diciembre, seg¨²n el informe del Ministerio de Trabajo, han tenido en cuenta todos estos datos. El aumento de la duraci¨®n m¨ªnima de tres a seis meses se justifica por el objetivo de reducir la precariedad de las contrataciones temporales.