Efra¨ªn R¨ªos Montt: "Yo llegu¨¦ sin votos y sin botas"
En esta entrevista, hecha conjuntamente por tres periodistas europeos, el lector tendr¨¢ oportunidad de apreciar algo del barroquismo de R¨ªos Montt, que a menudo elude las respuestas por elevaci¨®n. Todo en la entrevista fue bastante at¨ªpico. Desde la cita, a las seis de la ma?ana -una hora intempestiva aun en el tr¨®pico-, hasta la forma en que la realiz¨®: de pie en el aula de un colegio, rodeado de sus guardaespaldas, con un presidente sudoroso tras la alocuci¨®n a los maestros. Estos detalles ex¨®ticos no deben inducir, sin embargo, a infravalorar al presidente guatemalteco o a simplificar su personalidad diciendo que es un predicador metido a pol¨ªtico. Es eso y muchas m¨¢s cosas; algunas de ellas, inquietantes.Pregunta. ?Cu¨¢l ha sido el impacto pol¨ªtico, social y religioso de la visita del Papa a Guatemala?
Respuesta. La trascendencia de la visita del Papa es grande. Creo que lo m¨¢s importante es que nos ha venido a ense?ar que hay que cumplir con lo establecido. Si no, no se pueden obtener frutos.
P. ?Qui¨¦n establece lo establecido?
R. La Biblia.
P. El Papa se ha pronunciado abiertamente en contra de la violaci¨®n de la vida humana. ?Qu¨¦ opina como evang¨¦lico, como general y como jefe de Estado?
R. El Papa tiene raz¨®n al pronunciarse como quiera; tiene el derecho tambi¨¦n. Ahora, yo no soy evang¨¦lico; soy simplemente un cristiano y, como tal, tengo una actitud y un car¨¢cter cristiano, luna moralidad y un concepto de vida. ?Qu¨¦ pasa con lo que se siembra? Se cosecha.
P. Se ha dicho que el haber fusilado a seis personas unos d¨ªas antes de la venida del Papa, al margen de que estuviera en el derecho de Guatemala, no ha sido lo m¨¢s feliz para sus relaciones exteriores.
R. As¨ª es.
P. ?C¨®mo juzga este hecho?
R. Como una conciencia de hacer justicia y no como una tibieza de permitir que hagan lo que quieran.
P. Pero hay abogados que dicen que no hay tal justicia, porque ni se sabe cu¨¢l es el tribunal ni se puede hacer la defensa ante el juez, sino por medio de cartas...
R. Me gustar¨ªa que fuera a preguntarle eso al presidente de la Corte Suprema, porque ¨¦l es el se?or de la justicia en Guatemala. Yo soy un ejecutivo, un presidente que no tiene que ver nada con la justicia.
(La legislaci¨®n vigente sobre tribunales de fuero especial, que juzga gran cantidad de delitos que pueden estar relacionados directa o indirectamente con la subversi¨®n, reserva, sin embargo, al presidente la facultad de nombrar jueces entre abogados o militares.)
P. ?Considera usted que su Gobierno es m¨¢s fuerte o m¨¢s d¨¦bil que hace seis meses? ?Qu¨¦ elementos lo hacen m¨¢s fuerte o m¨¢s d¨¦bil?
R. La fortaleza o debilidad de un Gobierno implican al partido que lo ha llevado. ?sta es una pregunta que se hace a nivel de presidente partidista. Pero yo llegu¨¦ sin votos y sin botas. Entonces la fortaleza de un Gobierno consiste en la justicia que haga. Y yo pienso que estoy m¨¢s fuerte.
'Estoy buscando a Guatemala'
P. A pesar de que usted ha dicho que no viene a buscar votos su discurso se parece mucho al de una campa?a electoral, pero no hay tal campa?a. ?Qu¨¦ es lo que viene a hacer entonces?R. Estoy haciendo una campa?a: buscar a Guatemala. Nos la quieren traer, nos la quieren imponer de fuera, y nosotros queremos, ser Guatemala. Esa es mi campa?a.
P. Dentro del programa fisiles y frijoles, quisiera saber cu¨¢l es la importancia relativa a cada uno de los t¨¦rminos.
R. Ya ha bajado la importancia que ten¨ªan los fusiles. Nos interesan sobremanera los frijoles.
P. ?Por qu¨¦?
R. Porque la violencia, la subversi¨®n, la politiquer¨ªa, se manejan en Guatemala por el hambre, por la ignorancia, por la pobreza.
P. ?Hasta qu¨¦ punto esto puede convertirse en un plan de desarrollo?
R. Hasta el punto de conocer cu¨¢les son las verdaderas capacidades de desarrollarnos nosotros mismos; porque con regalos, con programas extranjeros, a lo ¨²nico que nos hemos acostumbrado es a que nos hagan las cosas.
P. ?C¨®mo ve el calendario de la democratizaci¨®n?
R. Pienso que va a ser una cuesti¨®n de hechos. A medida que va yamos dando los elementos reales para el regreso a la constitucionalidad, tendremos, la oportunidad de ver si es efectivo o no lo que estamos planeando.
P. ?Pero el d¨ªa 23 van a publicar dos o tres de los cuatro decretos que preparan?
R. Tres, incluido el de partidos pol¨ªticos.
P. En cuanto a una idea de calendario, hay quien dice que hace falta como un a?o para elegir la Constituyente, como otro a?o para elaborar la Constituci¨®n y como un a?o m¨¢s para convocar elecciones, lo que le llevar¨ªa a usted a cumplir un mandato de cuatro a?os...
R. ?Y por qu¨¦ no diez?
P. Hay algunos problemas con Estados Unidos por la desaparici¨®n de cuatro personas de la Organizaci¨®n de Ayuda al Desarrollo (AID). A algunos diplom¨¢ticos les ha llamado la atenci¨®n que esto se produjera el 9 de febrero, justo un d¨ªa despu¨¦s de liberar al norteamericano y a la espa?ola a los que acusaron de subversi¨®n. ?No habr¨¢ en esto el prop¨®sito de mantener una tensi¨®n permanente con Estados Unidos?
R. Guatemala no puede hacer eso. Es un pa¨ªs tan peque?o, tan insignificante, que no puede permitirse el abuso de reclamar ni siquiera un derecho como. naci¨®n. ?Qu¨¦ somos nosotros en el contexto de la estrategia global? No somos nada.
P. Pero Guatemala se ha caracterizado siempre por la fuerza de su nacionalismo.
R. ?D¨®nde? ?No ha visto lo que les acabo de decir en la cara a los maestros?. ?D¨®nde est¨¢n Chiapas y Tabasco y Centroam¨¦rica, si eran nuestros?
P. ?Pueden volver a ser de ustedes?
R. No, no queremos. Lo que queremos es ser nosotros; porque, si no, El Salvador se meter¨¢ hasta Jutiapa, Quezaltenango se ir¨¢ para M¨¦xico y sabe Dios de qui¨¦n va a ser Guatemala.
P. Su ministro de Defensa ha dicho que Israel es el mejor amigo de Guatemala. ?Qu¨¦ opina?
R. Le voy a preguntar a mi ministro. Yo no s¨¦ (grandes risas).
'El tiempo de la Corona, de la colonia, ya pas¨®'
P. ?Podr¨ªa decirme algo sobre las no existentes relaciones con Espa?a? ?Hay alguna perspectiva de que vayan a restablecerse pronto?R. Todas, todas. Es lo que quisi¨¦ramos nosotros. Lo ¨²nico que EL PAIS (nuevas risas) y Cambio 16 parece que no quieren dar la oportunidad. Han comprometido mucho al Gobierno socialista. Usted sabe que nosotros no podemos decir absolutamente nada. El tiempo de la Corona, el tiempo de la colonia, ya pas¨®. La Corona actual es diferente y creo que debe ser mucho m¨¢s magn¨¢nima. Que nos ense?en a reaccionar, porque, si no, reaccionaremos nosotros con el h¨ªgado. Nosotros queremos reaccionar como seres humanos y como naci¨®n. Eso es vital. Quieren que reconozcamos unas cosas que.... realmente no se pueden.
(El presidente guatemalteco alude a las explicaciones pedidas por el Gobierno espa?ol a causa del asalto policial a la Embajada de Espa?a en Guatemala el 30 de enero de 1980, hecho en el que murieron m¨¢s de treinta personas, sin que todav¨ªa se haya dado ninguna justificaci¨®n.)
P. ?Qu¨¦ significa para Guatemala que haya guerra en El Salvador?
R. Que hay guerra en El Salvador. Lo que no quiere decir es que me voy a poner de rodillas a llorar, que es lo que har¨ªa y es lo que est¨¢n haciendo all¨ª.
P. ?Qu¨¦ supone para usted ser religioso y jefe de Estado?
R. No soy religioso, soy un cristiano. Soy un hombre de car¨¢cter que me confronto.
P. ?No hay peligro de que haya un Jomeini en Guatemala!
R. Pues solamente si hubiera aqu¨ª un Ir¨¢n. Pero Guatemala es diferente. Usted ha visto esa manifestaci¨®n religiosa que ha habido con el Papa. Eso es diferente.
P. ?A qu¨¦ atribuye su ¨¦xito?
R. A que soy obediente.
P. ?A qui¨¦n?
R. A Dios.
P. ?A qu¨¦ Dios?
R. Al m¨ªo.
P. ?Dios le dice qu¨¦ tiene que hacer?
R. No, no me sea ingrato, porque eso es politizar muchas cosas. Le suplico, por favor, que no confundamos unas cosas con otras. Yo soy un hombre que teme a Dios y lo confieso. Se lo digo a usted y se lo digo derecho al mundo. Temo a Dios. Pero que Dios me llame por tel¨¦fono y me diga: "Mira, Efra¨ªn...", eso es un absurdo. Pero yo s¨ª oro.
P. ?De d¨®nde saca su inspiraci¨®n?
R. De la necesidad de querer ser. Estar frente a usted me implica un sacrificio, mire c¨®mo estoy sudando. Me exige un esfuerzo. Yo no tengo los estudios que tiene usted. Yo soy un cristiano simple mente, y tenerme que confrontar ya es una cosa muy seria. ?Qui¨¦n me puede dar la fortaleza? Usted lo llamar¨¢ psicolog¨ªa, filosof¨ªa o alg¨²n otro tipo de doctrina. Yo lo llamo Dios.
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