Muri¨® Anna Seghers, s¨ªmbolo de la literatura comprometida y representante del 'realismo socialista'
Con la muerte de Anna Seghers, el pasado mi¨¦rcoles en Berl¨ªn Este, desaparece uno de los s¨ªmbolos de la resistencia frente al nazismo y una escritora que encarna como pocos la idea de novelista comprometida y representante del realismo socialista.
La literatura de Anna Seghers tiene un car¨¢cter documental, de testimonio sobre la vida de los oprimidos, desde sus primeras publicaciones aparecidas en el Frankfurter Zeitung.La novela Rebeli¨®n de los pescadores de Santa B¨¢rbara, publicada en 1928, el mismo a?o de su ingreso en el Partido Comunista de Alemania, parece inspirada en el ruso Dostoievski y la novela realista francesa del siglo XIX.
La llegada de Hitler al poder la ,oblig¨® a exiliarse en Par¨ªs, desde donde intervino en la lucha de los intelectuales contra el fascismo. Anna Seghers particip¨® en el II Congreso para la Defensa de la Cultura, celebrado en julio de 1937 en Espa?a y en Par¨ªs. En la pol¨¦mica del espa?ol Jos¨¦ Bergam¨ªn contra la cr¨ªtica individualista de Andr¨¦ Gide a la Uni¨®n Sovi¨¦tica, Anna Seghers admira la postura del "cat¨®lico Bergam¨ªn" como un artista responsable, sin posiciones declarativas ante el problema existencial.
Estaba claro que Anna Seghers. hab¨ªa optado por el camino del realismo y la descripci¨®n del sufrimiento colectivo y no de las angustias existenciales e individualistas. La obra m¨¢s famosa de Anna Seghers, La s¨¦ptima cruz, est¨¢ situada en los lugares que conoce de su ni?ez, Maguncia, Worma y Francfort, y describe la huida de siete presos de un campo de concetraci¨®n hitleriano, de los que seis son captura dos y el s¨¦ptimo, un comunista, consigue huir al extranjero.
La s¨¦ptima cruz apareci¨® como Novela de la Alemania hitleriana y pretend¨ªa "dar a conocer por me dio del destino de hombres individuales muchos sectores de la Alemania fascista".
La novela concluye as¨ª: "Todos sentimos que los poderes externos pueden penetrar profunda y horriblemente en el hombre, hasta lo m¨¢s ¨ªntimo, pero sent¨ªamos tambi¨¦n que, en lo m¨¢s profundo, hab¨ªa algo inalcanzable que no pod¨ªa ser lastimado".
Un testimonio de estas palabras era su actitud vital. AnnaSeghers huy¨® de las redadas de la Gestapo en Par¨ªs y se refugi¨® en la zona de la Francia no ocupada de Vichy. En medio del caos y la lucha por conseguir un visado de salida hacia M¨¦xico, Anna hac¨ªa su vida, imperturbable. Hilde Eisier, la mujer del compositor, describe c¨®mo encontr¨® a la novelista en un caf¨¦: "En este per¨ªodo ca¨®tico ella manten¨ªa su ritmo de vida, escr¨ªb¨ªa un libro y a una hora determinada de la tarde no se pod¨ªa molestarla, porque hac¨ªa los deberes con sus hijos. Yo la admir¨¦ mucho, porque en. medio de aquella existencia improvisada, de la histeria y el nerviosismo generales, exhalaba una gran calma".
Por aquellos d¨ªas Anna Seghers escrib¨ªa su novela Tr¨¢nsito, en la que describe en t¨¦rminos kafkianos. la lucha con la burocracia para conseguir un visado de salida hacia Am¨¦rica. En su exilio mexicano, Anna Seghers se considera unida al destino de Alemania: "Hoy un intelectual separado por el oc¨¦ano de su pueblo puede expresar m¨¢s fuertemente y sin concesiones su uni¨®n que otro condenado a la emiiraci¨®n interior".
A su regreso a Alemania, Anna Seghera escogi¨® la Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana como su patria y all¨ª ocup¨® durante 25 a?os la presidencia de la Asociaci¨®n de Escritores y pas¨® a ser la representante oficial del realismo socialista al servicio del r¨¦gimen de socialismo real.
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