Falsificaci¨®n y 'mercado negro' en el tr¨¢fico internacional de mercancias
Los acuerdos internacionales que regulan estos tr¨¢ficos datan de los a?os sesenta. En esa d¨¦cada, el poder del sindicato vertical dentro de la Administraci¨®n de? Estado era incontestable. Garc¨ªa Ribes, Albadalejo (procesado por los asesinatos de Atocha) y Jos¨¦ Mar¨ªa Cabildo hac¨ªan y deshac¨ªan a sus anchas en la Direcci¨®n General de Transportes Terrestres, que entonces depend¨ªa del Ministerio de Obras P¨²blicas. As¨ª se explica que la mayor parte de las autorizaciones para tr¨¢fico internacional recayeran en Mariano Mateu, paisano y amigo del presidente del sindicato nacional del ramo, y en otras personas de estrecha vinculaci¨®n con el r¨¦gimen franquista.A partir de la muerte de Franco, los sindicatos se transforman en patronales; pero la influencia de estos hombres contin¨²a siendo muy grande en Obras P¨²blicas.
Tras las elecciones del 15 de junio de 1977, se crea el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, al que se adscribe la Direcci¨®n General de Transportes. La situaci¨®n en cuanto a las autorizaciones perdura, aunque desde el Congreso se hacen interpelaciones al Gobierno para que publique a qui¨¦n concede las autorizaciones internacionales (extremo que no se logr¨® hasta 1980). Entre tanto, a Mart¨ªnez Catena le sustituye un personaje importante en todos los acontecimientos que estamos relatando, Diego Calleja Gonz¨¢lez. Este ingeniero de caminos, que estuvo en el Ayuntamiento de Madrid con Juan de Arespacochaga, logra desde su llegada al ministerio hasta su cese (en las postrimer¨ªas de 1982) conservar desde diferentes cargos, seg¨²n las diversas reestructuraciones, su competencia sobre el transporte internacional.
La primera lista de beneficiarios de las autorizaciones internacionales que se hace p¨²blica pone de manifiesto que, de las 160.000 empresas de transporte que existen en Espa?a, s¨®lo 380 (un 0,24%) disfrutan de autorizaciones internacionales. Y de las 380 privilegiadas, 40 controlan cerca de la mitad de las autorizaciones concedidas. Mateu y Mateu lleg¨® a controlar el 20% de las licencias.
En 1980, con Salvador S¨¢nchez Ter¨¢n como titular de Transportes, Alejandro Rebollo como subsecretario y Pedro Gonz¨¢lez Haba corno director general, se dicta una orden ministerial que regula por primera vez el acceso a las autorizaciones internacionales. La orden es importante, pero no soluciona casi nada, al consagrar los derechos adquiridos de quienes ya disfrutaban de cupos de licencias y limitar a las posibles ampliaciones del n¨²mero de autorizaciones concedidas a Espa?a el acceso de nuevos transportistas al tr¨¢fico internacional. No s¨®lo esto es grave, sino tambi¨¦n el reparto que se hace del cupo de Mateu y Mateu -suspende pagos en 1979 y posteriormente se declara quiebra-, que en gran parte va a parar en 1980 y 1981 a empresas como Leal Transportes, SA; Mudanzas, SA; Sancho Transportes, SA; Transportes Espa?oles Combinados, SA, y Villalta Transportes, SA.
Falsificaciones y 'mercado negro'
Quienes no tienen suerte o mano Dar¨¢ conseguir autorizaciones, o cuentan con las suficientes, recurren a la falsificaci¨®n o al mercado negro. Respecto a las falsificaciones, este diario tiene en su poder una autorizaci¨®n falsificada y lista para cumplimentar; no s¨®lo se transgrede la legislaci¨®n espa?ola, sino que tambi¨¦n se falsean sellos y documentos de Gobiernos extranjeros. El tema es tan grave que el propio Gobierno franc¨¦s ha protestado varias veces ante el espa?ol, como prueba una carta a la que se ha tenido acceso.
En la citada carta, de 17 de septiembre de 1980, el director general de Transportes remite a la patronal de tr¨¢ficos internacionales ASTIC las sanciones impuestas a empresas espa?olas por utilizaci¨®n de autorizaciones falsas y otras anomal¨ªas. En la carta se dice que, "con fechas 1 y 27 de agosto, el Ministerio de Transportes franc¨¦s se dirige de nuevo a esta direcci¨®n general, incluyendo una lista de transportistas espa?oles presuntos infractores" y que se solicita a las autoridades espa?olas que suspendan la entrega de licencias "durante un per¨ªodo entret res y seis meses a las empresas que han utilizado autorizaciones falsas"; entre otras, seg¨²n se 1 ha podido saber, se encuentran Gerotrans, Transportes Arrechea, Natransil, Transportes Urbieta y Transportes Generales Mart¨ªnez.
Existe la convicci¨®n, aunque no pruebas, de que en algunos casos se est¨¢ utilizando el TIR para introducir contrabando. Y que muchos transportistas utilizan desde hace a?os un bol¨ªgrafo -que desde hace poco se vende tambi¨¦n en Espa?a- cuya tinta, pasando cierto tiempo, se borra. Ello permite rellenar varias veces la autor¨ªzaci¨®n y, en consecuencia, realizar varios viajes con un ¨²nico permiso.
Otra de las formas de conseguir autorizaciones es el mercado negro. All¨ª se venden a 18.000 pesetas las referentes a Francia y a unas 25.000 las destinadas a terceros pa¨ªses (¨¦stas tienen que tener tambi¨¦n la autorizaci¨®n francesa de paso; por eso son m¨¢s caras). En total, Espa?a dispone de unas 65.000 autorizaciones internacionales, y la Administraci¨®n las concede sin m¨¢s coste que el m¨ªnimo del papeleo de la solicitud.
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