El Gobierno vasco cree que no es seguro el cierre de Lem¨®niz

El Gobierno vasco, a trav¨¦s de su consejero de Industria, Juan Carlos Isasti, est¨¢ convencido de que las previsiones de demanda energ¨¦tica expuestas por el ministro Carlos Solchaga van a ser superadas y, en consecuencia, las conclusiones sobre cierre de centrales nuclares se van a revisar, por lo que Isasti afirm¨® ayer que no est¨¢ claro que Lem¨®niz se vaya a cerrar y que los an¨¢lisis efectuados desde hace semanas son meras especulaciones. "Al final, los comentarios actuales es posible que sean bien distintos".Estas declaraciones de Isasti, realizadas a la agencia Efe, contrastan con las diferentes interpretaciones realizadas a ra¨ªz del anuncio de Carlos Solchaga de que, con la revisi¨®n del Plan Energ¨¦tico Nacional (PEN), cinco de las 12 centrales nucleares proyectadas no son necesarias, por lo que Lem¨®niz parece condenada a su paralizaci¨®n, definitiva. No obstante, parece que no hoy nada decidido, y el futuro de la central vizca¨ªna sigue siendo una inc¨®gnita.

La autorizaci¨®n de la construcci¨®n de la central nuclear de Lem¨®niz se emiti¨® el 14 de marzo de 1974. Desde entonces, la compa?¨ªa Iberduero ha invertido 203.304 millones de pesetas. A esta cantidad hay que sumar los elevados costes financieros del pago de los intereses de los cr¨¦ditos internacionales y las p¨¦rdidas en la industria de bienes de equipo destinados a la central.

Conclusiones a revisi¨®n

Precisamente cuando se cumplen 10 a?os desde la autorizaci¨®n para su construcci¨®n, el ministro de Industria, Carlos Solchaga, presentar¨¢ la revisi¨®n del Plan Energ¨¦tico Nacional con base a los nuevos datos de la demanda energ¨¦tica prevista para los pr¨®ximos a?os, inferiores a las previsiones efectuadas por el equipo ministerial de Bay¨®n.El consejero de Industria del Gobierno vasco afirm¨® que los estudios actuales se contraponen a los an¨¢lisis reales de consumo y necesidades energ¨¦ticas que se est¨¢n registrando en estos momentos. "Hay una contraposici¨®n entre las estimaciones te¨®ricas que se manejan y los datos reales del a?o 1983, que, en cuanto a consumo de energ¨ªa, son notablemente superiores", afirm¨®.

"En definitiva, teniendo en cuenta estos datos", a?ade, "las repercusiones industriales y econ¨®micas, las conclusiones actuales ser¨¢n sometidas a revisi¨®n. Entiendo que donde se est¨¢ hablando de paralizaci¨®n igual se quiere decir ralentizaci¨®n en la puesta en marcha".

Al margen de los elevados costes que supondr¨¢ para el Estado el posible cierre de algunas centrales nucleares, las repercusiones energ¨¦ticas en el Pa¨ªs Vasco se ver¨¢n trastocadas si se produce la paralizaci¨®n definitiva.

Isasti se?al¨® que Lem¨®niz no es imprescindible para la econom¨ªa vasca, "porque el Pa¨ªs Vasco nunca ha tenido energ¨ªa y la ha consumido en grandes cantidades. No somos una isla. Estamos inmersos en la Administraci¨®n del Estado, que tiene unas fuentes de energ¨ªa muy diversas". "Ello no quita", agrega, "que nuestro modelo energ¨¦tico quede afectado en gran medida. Preve¨ªamos diversificar la oferta para conseguir un equilibrio entre las distintas fuentes, con una reducci¨®n de la dependencia del petr¨®leo, y se contaba con el carb¨®n, del gas de la bolsa de Bermeo y de Lem¨®niz".

Estas previsiones estimaban que, para el a?o 1990, el 29,2% del consumo de energ¨ªa en el Pa¨ªs Vasco saldr¨ªa de la central de Lem¨®niz, con una disminuci¨®n fuerte de la dependencia del petr¨®leo y un incremento del consumo de gas y carb¨®n, adem¨¢s de una mejor utilizaci¨®n de la energ¨ªa procedente de centrales t¨¦rmicas.

"Mientras se decide el futuro de Lem¨®niz, las previsiones y an¨¢lisis de futuro deben quedar en un impasse. Todo est¨¢ en manos de quienes elaboran el PEN y del consejo de intervenci¨®n de la central", se?ala Isasti.