El poder colectivo ha elegido un nuevo presidente nominal de la Rep¨²blica Federativa Yugoslava

Vaselin Djuranovic, representante de la rep¨²blica de Montenegro, se ha convertido en nuevo presidente de Yugoslavia, por autom¨¢tica aplicaci¨®n de un sistema perfectamente ilustrado con la frase que una turista norteamericana pronuncia en una pel¨ªcula cuya acci¨®n se desarrolla en este pa¨ªs balc¨¢nico: "En Yugoslavia no se puede organizar un atentado contra el presidente de la Rep¨²blica porque hay ocho".Efectivamente, desde que falleci¨® Tito, en mayo de 1980, dirigen el pa¨ªs y sus fuerzas armadas, por un plazo de cinco a?os, un delegado de cada rep¨²blica federada (seis en total) m¨¢s uno por cada una de las dos regiones aut¨®nomas (la de Kosovo, de mayor¨ªa albanesa, y la de Voyvodina, de fuerte minor¨ªa h¨²ngara). Se completa el grupo con la venerable figura del presidente de la Liga de los Comunistas de Yugoslavia. Todos tienen derecho a veto.

A efectos de representaci¨®n protocolaria del Estado en viajes y contactos internacionales, de entre las filas de los copresidentes todos los a?os se designa un nuevo presidente nominal, seg¨²n un orden estrictamente respetado.

El a?o pasado le correspondi¨® a la Rep¨²blica Yugoslava de Croacia el honor, y este a?o, desde el pasado domingo, le toca al representante de Montenegro, ya designado en la persona de Veselin Djuranovic, que sucede al croata Mika Spiljak. La novedad de este a?o es que para antes del 15 de abril han tenido que renovarse los ocho candidatos, al haber expirado el quinquenio para el que fueron elegidos. S¨®lo queda su proclamaci¨®n oficial el 15 de mayo en la Asamblea Federal.

El hecho de que los ocho sean primus interpares plantea a veces delicados problemas de protocolo. Volviendo de Estados Unidos, el presidente saliente Mika Spiljak se encontr¨® con que a la misma hora hab¨ªa aterrizado en el aeropuerto de Belgrado, procedente de Argentina, otro de los ocho, Rado van Vlajkovic. Mientras tanto, una compa?¨ªa vestida de azul, de gala, permanec¨ªa formada sin saber muy bien a cu¨¢l de los dos rendir los honores de jefe de Estado. Ambos copresidentes se pusieron de acuerdo y pasaron revista juntos.

Veselin Djuranovic, el montenegrino que representar¨¢ a Yugoslavia durante un a?o en el extranjero al frente del octeto federal, ha sido duramente atacado por haber ostentado el cargo de primer ministro en los ¨²ltimos a?os de Tito, aquel lustro irracional durante el que el pa¨ªs se endeud¨® en cifras astron¨®micas.

Veselin Djuranovic cuenta con la oposici¨®n de Eslovenia, la Rep¨²blica alpina fronteriza con Austria y superdesarrollada, que le culpa de mala administraci¨®n durante su cargo de primer ministro.