Los empresarios condenados por delitos financieros, fiscales y laborales ir¨¢n a la c¨¢rcel para cumplir m¨¢s de un a?o de pena
La nueva regulaci¨®n de los delitos socioecon¨®micos se mantendr¨¢ sin modificaciones sustanciales en el anteproyecto de ley del C¨®digo Penal. Las organizaciones empresariales que han participado en la informaci¨®n p¨²blica del texto no han logrado dejar fuera de lo penal, para que se sancionen s¨®lo en v¨ªa administrativa, los hechos susceptibles de penas superiores a dos a?os de prisi¨®n. El Ministerio de Justicia, cuando eleve la disposici¨®n al Gobierno reafirmar¨¢ la posibilidad de que el empresario carente de antecedentes penales vea sustituida la prisi¨®n inferior a un a?o por la nueva figura del arresto de fin de semana, o esta ¨²ltima por la de multa.
Junto a fiscales, audiencias y especialistas que recibieron el anteproyecto hace varios meses para informaci¨®n p¨²blica, han participado en este tr¨¢mite sobre el. t¨ªtulo relativo a los delitos socioecon¨®micos sindicatos, organizaciones empresariales y entidades afines, como el Consejo Superior Bancario. A diferencia de lo que ocurri¨® con motivo del proyecto enviado en 1980 a las Cortes por el Gobierno de UCI), que suscit¨® aceradas cr¨ªticas de algunas organizaciones patronales -la propia CEOE dijo que se iba a considerar al empresario "un delincuente"-, el anteproyecto de la Administraci¨®n socialista no ha recibido observaciones de fondo, seg¨²n fuentes del Ministerio de Justicia.El cambio de actitud es atribuido a la creciente a?oranza entre los empresarios de la tipificaci¨®n como delitos de algunas acciones que les afectan en el giro o tr¨¢fico de las empresas. Figuras hasta ahora et¨¦reas en la ley de propiedad industrial, como la revelaci¨®n de secretos, usurpaci¨®n, imitaci¨®n, falsificaci¨®n, espionaje industrial, ser¨¢n llevadas al C¨®digo Penal, al igual que la competencia desleal y los todav¨ªa inexistentes delitos publicitarios. Todos ellos aparecer¨¢n junto a los ya acu?ados en los ¨²ltimos a?os -el fiscal, los de contrabando y control de cambios- y a otros de nuevo cu?o, como los laborales y financieros.
La sugerencia m¨¢s destacada en las citadas fuentes, por su envergadura y por haber coincidido en ella diversas patronales, consiste en que el futuro C¨®digo sancione exclusivamente las penas graves (superiores a dos a?os de prisi¨®n) ' dejando las acciones que el anteproyecto considera susceptibles de penas menos graves y leves para la v¨ªa administrativa, que s¨®lo puede imponer multas. Acciones que el anteproyecto considera delitos no graves o leves -la mayor¨ªa de las penas para los sociecon¨®micos oscilar¨¢n entre seis semanas y tres a?os- perder¨ªan as¨ª la eventual calificaci¨®n de delito.
En la pr¨¢ctica, esto supondr¨ªa que buena parte de los hechos de eventual persecuci¨®n como delito -en los casos ya regulados, como el fiscal y el contrabando, se mantiene la cuant¨ªa de dos millones de pesetas como m¨ªnimo para incurrir en delito- quedar¨ªan agotados en los tribunales administrativos. Por ejemplo, el no pagar cuotas a la Seguridad Social s¨®lo podr¨ªa ser sancionado, como hasta ahora, por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social. Salvo que el empresario haya practicado retenciones por cuotas de los trabajadores, que ya ser¨ªa delito. Actualmente este delito se considera de apropiaci¨®n,, indebida; el anteproyecto le da car¨¢cter aut¨®nomo y sanciones m¨¢s severas.
Las observaciones recibidas, seg¨²n las mismas fuentes, han aconsejado, por otra parte, aclarar el mecanismo de sustituci¨®n para las penas, con el fin de evitar que pisen la c¨¢rcel por primera vez las personas condenadas a dos a?os de privaci¨®n de libertad y que el juez considere pueden gozar de dicho? beneficio. En la ¨²ltima redacci¨®n se indicaba que "los tribunales motivadamente podr¨¢n sustituir las penas privativas de libertad inferiores a dos a?os por multa, aunque la ley no prevea esta pena para el delito de que se trate".
Ahora se precisar¨¢ que el juez pueda cambiar la prisi¨®n por arresto de fin de semana, o este por el de multa. Cada d¨ªa, semana, o mes de privaci¨®n de libertad ser¨¢ sustituido por dos cuotas diarias, semanales o mensuales de multa.
En una l¨ªnea similar, aunque en apariencia contradictoria, el Grupo Popular, que ha apoyado la llamada "reforma de la reforma" de la ley de Enjuiciamiento Criminal para atajar los problemas de seguridad ciudadana, acaba de presentar una proposici¨®n en las Cortes para que los fraudes a los consumidores se castiguen como faltas del C¨®digo Penal, no como infracciones administrativas. Seg¨²n medios allegados a los redactores del anteproyecto de C¨®digo, las faltas llevar¨ªan aparejadas penas de multa, cuya cuant¨ªa resulta siempre inferior a la que se podr¨ªa derivar de la infracci¨®n administrativa.
Diferencias con el C¨®digo de UCD
Con respecto al proyecto de UCD, el nuevo texto, aparte de endurecer los delitos laborales, se diferencia del anterior en que es menos riguroso con otros, incluye en los delitos contra el patrimonio la insolvencia punible por suspensi¨®n de pagos o quiebra no necesaria, elimina la figura de la "letra de cambio vac¨ªa" -por entender que estas letras giradas sin causa son una moda lidad de la defraudaci¨®n, ya recogida tambi¨¦n en los delitos contra el patrimonio-, hace de los delitos contra la ordenaci¨®n urban¨ªstica otro t¨ªtulo distinto al de los socioecon¨®micos (antes de nominados "contra el orden econ¨®mico"), donde junto a la nueva figura del delito urban¨ªstico aparece el ecol¨®gico.
Asimismo, el cheque en descubierto se considerar¨¢ un incumplimiento civil, pues formalmente no atenta contra la propiedad, aunque afecte a la seguridad del tr¨¢fico. La explicaci¨®n estriba en que, si se emite con enga?o, puede ser sancionado como defraudaci¨®n (estafa).
Otra novedad ser¨¢ la tipificaci¨®n de los fraudes en las prestaciones de desempleo, tanto desde el punto de vista del trabajador como del empresario.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.