"EE UU y la URSS colaboran de hecho en la crisis del Golfo P¨¦rsico", seg¨²n Guido Brunner

Guido Brunner, ex comisario de Energ¨ªa de la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE) y actual embajador de la Rep¨²blica Federal de Alemania (RFA) en Espa?a, consider¨® ayer que es poco probable que se produzca una nueva edici¨®n de las crisis energ¨¦ticas de 1973 y 1979 como consecuencia del conflicto b¨¦lico en el ¨¢rea geogr¨¢fica del estrecho de Ormuz. Brunner bas¨® su hip¨®tesis en la experiencia que Occidente ha acumulado de las anteriores crisis y en la cooperaci¨®n que, de una manera f¨¢ctica, se da en el terreno energ¨¦tico entre Estados Unidos y la Uni¨®n Sovi¨¦tica.

En una intervenci¨®n ante las reuniones peri¨®dicas que celebra el Club Espa?ol de Petr¨®leo, el ex responsable de la pol¨ªtica energ¨¦tica de la Comisi¨®n Europea a?adi¨® que "la experiencia de las anteriores crisis del petr¨®leo nos han ense?ado con creces que la soluci¨®n a estos problemas s¨®lo puede venir por la v¨ªa de la cooperaci¨®n internacional". Esta cooperaci¨®n est¨¢ hoy institucionalizada entre los pa¨ªses consumidores, a trav¨¦s de la Agencia Internacional de la Energ¨ªa (AIE), que, a su vez, realiza consultas con los productores."Una crisis energ¨¦tica de las proporciones que alcanzaron las pasadas, perjudica tanto a los pa¨ªses productores como a los consumidores. Basta comprobar que las anteriores tuvieron consecuencias nefastas para todos, ya que la recesi¨®n econ¨®mica que trajeron consigo termin¨® luego por extenderse, y perjudicar incluso m¨¢s, a los pa¨ªses en desarrollo, fueran o no productores de petr¨®leo", dijo Brunner. Para Brunner, el elevado endeudamiento del Tercer Mundo es una consecuencia m¨¢s de la recesi¨®n que trajo la crisis energ¨¦tica.

El ex comisario de la CEE realiz¨® un somero an¨¢lisis de las ense?anzas que han tenido las anteriores crisis para el mundo industrializado, centr¨¢ndolo en los esfuerzos que se han realizado en los pa¨ªses consumidores para reducir la dependencia del crudo y garantizarse unos abastecimientos m¨¢s seguros de petr¨®leo. Uno de los puntos m¨¢s d¨¦biles de la situaci¨®n anterior -la fuerte dependencia de Estados Unidos del crudo importado- se ha paliado y hoy se puede comprobar que Estados Unidos s¨®lo importa un tercio de lo que consume, mientras que en 1973 este porcentaje llegaba al 50%.

"Hoy existe ya un atisbo de racionalidad en las relaciones mundiales para evitar situaciones como las de 1973 y l979", dijo Brunner, que se?al¨® como gran dificultad a solventar la coordinaci¨®n global de las pol¨ªticas energ¨¦ticas de los pa¨ªses industrializados y en desarrollo.